Quinto llanto

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Allen POV

"No podía volver. Me sentía frustrado, agotado. Estaba corriendo en el mismo maldito lugar por mucho tiempo. Decidí descansar un momento. Reflexionaba acerca de lo que había pasado en la Tierra. Pensaba si valdría la pena volver. Nada me motivaba a hacerlo. Pensé que correr lo que muchos llaman la muerte sería lo más oportuno, ya que en mi mente aún rondaba lo que me esperaría al volver. Solo desgracia, sufrimiento y dolor. Además que mi cuerpo ya lesionado por los cortes que me realizaba estaba más magullado y destrozado.

No volvería a ser el mismo. Tendría secuelas del accidente. Eso lo daba por sentado. Solo quería recordar algún momento feliz que tenga que atarme a la vida terrenal."

*Flashback*

Era un día corriente.
En casa nunca nada era hermoso, a pesar de que esa mañana el cielo lucía un sol de maravilla. Decidí que tomar una ducha sería lo ideal para aliviar la pesadez del despertar. Saliendo, quise cambiar un poco mi forma de vestir. Si me ponía negro, me rostisaría. Decidí ponerme un par de pantalones azul oscuro, unos converse blancos y una camisa de jean más clara que el pantalón.

Tuve la suerte de que mis padres estuviesen dormidos por la resaca. Urgué en la bolsa de mi madre para sacar su billetera y llevármela. "Ella cobraba bien",pensé, "no creo que le moleste que tome un poco".

Tomé una cantidad considerable de dinero y salí corriendo de casa. Tenía que llegar al parque temprano. No quería hacerlo esperar.

El parque de mi barrio era bastante agradable. Tenía variedad de áreas verdes y una amplia vereda para que las personas circulen sin dañar las bellas flores que crecían alrededor. a los lados de la vereda habían bancos hechos de una madera trabajada de forma bruta, al lado de cada uno habían faroles muy altos pintados de negro. El aroma era tan cautivante. Había una mezcla de fragancias, entre las rosas y los tulipanes; entre el olor de la madera de los árboles y el pasto impregnado con algunas gotas de rocío.

Tenía mi lugar especial en ese parque. El banco donde me senté era el más viejo del lugar, detrás de este había un hermoso acre y un jardín de tulipanes. La sombra de aquella hermosa creación apaciguaba el calor irremediable del ambiente. Poco a poco un ligero sueño vino a mí. No pude evitar irme quedando dormido poco a poco.

*_*_*_*_*_*_*

Cuando desperté, pude notar que el sol, que estaba en su apogeo cuando salí de mi "dulce" morada, ahora estaba en su ocaso. Ya casi no había gente en el parque, solo se divisaban personas a lo lejos que retornaban del trabajo o la escuela de vuelta a sus hogares.

La persona a la que esperaba jamás llegó. Quedé esperando en vano. Pero aún no me resignaba, decidí que quedarme u momento más allí sería pertinente.

Mientras veía pasar a todas aquellas personas, pude distinguir a lo lejos un rostro conocido. Estaba demasiado lejos para poder ver claramente sus facciones, pero la forma de la cabeza y su cara perfilada me dieron una idea de quien podría ser.

No titubeé ni un segundo más para empezar a seguirlo. Me paré y disimuladamente empecé a seguirle el paso. No quería hacer esto un acto muy evidente, así que me paraba cada tanto en alguna tienda para esconder mis verdaderas intenciones.

Después de un momento, se metió a un pequeño callejón que tenía salida a la calle paralela a la que me encontraba. Pude ver, desde detrás de la pared, que el hacía gestos con sus manos. Era como si estuviese llamando a alguien.

De entre las sombras apareció una mujer, de la que nunca me olvidaría su rostro ni su nombre. Ella se acercó dubitativa al muchacho y lo abrazó y besó de forma apasionada. No podía distinguir la cara del hombre, hasta que se dio vuelta.

Su rostro prefilado, su nariz pequeña y respingada, sus ojos celestes y hermosos. Era la persona que había amado desde hace mucho tiempo. Era alguien con el que entablaba una relación bastante duradera. Era mi novio, Isaac.

No podía creer que me haya sido infiel de tal forma, y encima con una mujer. El me dijo que tenía inclinación solo por los hombres, nunca se cruzó por mi mente que podía ser bisexual.

Me sentía usado, inservible. Como si fuera un pañuelo desechable. Mientras yo era el sucio, ella era uno nuevo, al que todos preferían. A mí me desechaban como si fuera basura. Se supone que si amas a alguien, debes permanecer a su lado, no apartarte de él. Triste y sin consuelo, me dirigí a mi casa donde me esperaría la misma maldita rutina de todos los días.

°*°*°*°*°*°*

Pocos días después del incidente, Isaac decidió que terminar sería prudente ya que había encontrado el atractivo en el cuerpo femenino, atractivo que para él yo no poseía.

Fueron las semanas más tristes de mi vida. Como en mi familia nadie me apoya o me quiere, tiendo a aferrarme mucho hacia personas que deciden emparejarse conmigo.

*Fin del Flashback*

"¡Vaya! Ahora que lo recuerdo, pensé que evocar esa memoria me haría bien. Pensé que terminaba bien. Al parecer no.

Ahora que lo pienso, nada bueno pasó en mi vida hasta ahora. Recuerdo la vez que mi madre me sacudió a golpes por haber llevado mi boletín de notas con una reprobación; cabe resaltar que era la primera.

La persona que más me importó en toda mi vida, mi mejor amigo, Thomas, murió de un accidente cerebro vascular. No llegamos a entablar una relación amorosa por nuestra corta edad, pero puedo afirmar que fue la persona que más quise.

Desde allí un montón de desgracias transcurrían día tras día. Relaciones que no duraban, vida intrafamiliar agresiva, acoso por parte de compañeros de la escuela.

Tal vez... irme sería lo correcto... Sí, porque no hacerlo. Mis padres tendrían un alivio económico, las personas con las que comparto clase estarían contentas, nadie tendría que lidiar con los inútiles sentimientos que puedo llegar a tener.

Me paré y observé al camino donde estaba mi vida terrenal. Con una mirada de tristeza, me despedí de aquella. Me dí la vuelta y empecé a caminar hacia el sendero que me libraría del calvario que había estado pasando hasta ahora."



Don't Go [Yaoi/Gay]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora