novela laliter abre tu corazon ( Terminada)

Capítulo 28 - Parque De Atracciones

-Mar......-susurró Peter.

-si... eh... vas... es decir vienes.... no... ibas a hacer algo?- preguntó nerviosa mientras él la miraba

de arriba a abajo, estaba vestida extremadamente hermosa según la percepción de Peter: vestido

veraniego, cabello suelto, poco maquillaje y un montón de nervios que intentaba disimular, pero

que se notaban a leguas.

-si- respondió Peter y el brillo de los ojos de Mar se ensombreció.

-ah... bueno.... ve tranquilo... no te preocupes..., yo solo pasaba y...-

-voy a salir contigo- le interrumpió tomándole una de sus manos a la vez que admiraba como se le

iluminaban a ella sus ojos, poco a poco. -no habiamos quedado en eso?-

-si...- dijo con voz suave pero luego reaccionó- pero si tienes algo más importante que hacer,

yo no...-

-tu eres lo más importante- alzó su mando dejándole un beso en el dorso- estas muy linda- la guió

para girarle y así poder darle un vistazo completo - te estaba esperando, pero como no llegabas

pensé que no vendrías-

-si, perdón, es que tarde más de lo que pensé, discúlpame...por eso insisto, si estás enojado, o vas

a hacer otra cosa...-

-vamos?- ignoraba lo que le decía Mar producto de su nerviosismo.

-a...-aclaró su garganta- a dónde?-

-sorpresa- hizo una sonrisa de costado que le dio a ella un poco de confianza, y se dejó llevar.

Saludaron a Nico en la puerta, quién le hizo señas a Peter que Mar no entendió y partieron en taxi

a un lugar "desconocido". Ella se había tardado por su indecisión, nada le parecía adecuado para

"gustarle a Peter". Su celular? estaba en silencio para no interrumpirla mientras se alistaba, pero

de algún modo terminó oculto entre los montones de ropa que le tiro encima sin darse cuenta,

durante su proceso de elección.

Para cuando se dio cuenta, miles de llamadas perdidas, miles de mensajes de Peter y miles de

minutos de tardanza. Corrió lo más rápido que pudo, para ver si por casualidad él aún se

encontraba allí y fue cuando chocó con su anatomía.

En el auto, hablaban de cualquier cantidad de banalidades existentes, y a su vez, el teléfono de

Mar interrumpía a cada minuto, hasta que casi por arte de magia no sonó más.

Llegaron al lugar: un parque de atracciones. Mar estaba sorprendida, se imaginaba cualquier cosa

menos esto. Apenas entraron compraron pase libre para todos los juegos.

-Peter, yo traje dinero!!-

-pero yo te lo quiero pagar!- refutó mientras les colocaban el brazalete.

-y con esta pulserita podemos montarnos en lo que sea?-

-eh... si- respondió mirándola con extrañeza- no habías venido nunca a un parque de atracciones?-

-Jamás- dijo sincera y él sonrió -ah, bueno! tampoco te agrandes por ser el primero-

-digamos que me gustaría ser el primero en muchísimas cosas más- expresó con todo el doble