Senpai, senpai... ¿sensei?

Sentimientos por aclarar y sensaciones por descubrir.

-Entonces... Aya-Chan...

-¿Y ahora soy Aya? Si que te familiarizas pronto con la gente.

Ayano caminaba a la par con Budo por las calles de Buraza Town de camino a la escuela.

Budo llegó unos 20 minutos antes y la esperó sentado en la banqueta. Yan-Chan no tardó en salir cuando miró su silueta, no quería hacerlo esperar y por lo que contaba el Sensei, siempre se iba con los chicos, pero este camino se le facilita más, así que le preguntó si se podían regresar juntos igual pues también le facilitaba de vuelta, Ayano no "tuvo otra opción" más que aceptar.

A  pesar de que el pobre chico tratase de sacar conversación, la chica le respondía con un "Oh, Seguro." o un "Claro." y hasta ahí, pero Sensei no se rendía tan fácilmente, descubrió que empieza a interesarse en la conversación cuando la sacan de su zona de confort y se pone a la defensiva.

-Es mejor forzar los lazos de amistad desde ahora, para que puedas convivir más con los chicos, sé que es difícil, pero sé con seguridad que te unirás a ellos más rápido de lo que crees.

-Con todo respeto, no quiero hacer amigos. Hago esto por un objetivo y no me quiero distraer de ello. Formar amigos sólo es una pérdida de tiempo en cuanto te quieres hacer una meta, son una distracción y una molestia.

-¿Que nunca has escuchado que la unión hace la fuerza? No digas eso Aya-Chan, cambiarás de opinión, cuando veas lo bueno que es tener amigos, te retractarás, lo sé.

-¿Acaso eres un vidente? ¿Ya puedes ver mi futuro? ¿que tal si me dices como me irá en Biología? Creo que la profe me odia...

-¿Te escuchaste? ¡Hiciste una broma! - Se rió, haciendo que Yandere se sonrojara un poco.

Ayano repasó lo que se dijo mentalmente en la noche anterior, necesitaba ser más sociable, porque si no, todo sería en vano, el ser fuerte no tendría sentido si sólo podría deshacerse de sus rivales pero no poder hablar con su Senpai de una forma civilizada.

-Está bien, confiaré en tu palabra, señor vidente... Seré mas flexible con los chicos del club, la verdad no sé como le haré, pero daré mi mejor esfuerzo...

 Dijo muy poco animada, pero fue suficiente para Budo, quien sonrió para sus adentros. Las personas como Ayano siempre eran interesantes, unos capullos que se rehúsan a abrirse, pero cuando lo hacen, las sorpresas pueden ser muy grandes, ya esperaba ver a Ayano con una actitud más abierta, se nota que es de las bromistas.

-Sólo tienes que seguir siendo tú, justo como ayer en el restaurante. ¡Oh! por cierto, casi se me olvida entregarte esto -le da una cinta para la cabeza, idéntico al de sus discípulos -Ya eres parte de la familia, así que también necesitas uno.

-Muchas... gracias...-  La frase "Eres parte de la familia" le dio una sensación muy extraña, ¿de identidad? ¿plenitud? no lo sabía, Sólo que se puso la cinta con orgullo.

-Te queda bien.

Llegan a la escuela justo a tiempo, porque justo un rato después llegaron todos los chicos del club.

-¡Ayano-chan! Esa cinta te asienta perfecto - Le dice Shima, ya había arreglado los asuntos con ella, o eso piensa. Pues Yan-chan le pidió disculpas cuando la chica le reclamó sobre lo que pasó la vez pasada, pero no lo hizo con sinceridad.

"Apenas ayer soy un dolor de cabeza y ahora parece que quieres ser mi mejor amiga, pero al menos se nota que si es sincera, no como yo" Se sintió culpable por su actitud hipócrita, otra sensación nueva: malestar.

-Gracias Shima- le sonrió de la manera más sincera posible.

Saludó a duras penas a Sho, a Juku y a Mina, haciendo que, otra vez, el resto de alumnos la mirasen de nuevo, ahora si lo notó pues escuchaba murmureos como "Una chica nueva en el Club de Artes Marciales" "¿Miraste que llegó con Budo-Sensei? ¿Serán pareja?" o "¿No se supone que son muy exclusivos en ese club?, no aceptan a cualquiera, ¿quien será esa chica?"