Capítulo 5 - Especial

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Perspectiva

No fue nada especial, el recuerdo intacto en mi memoria lo confirmaba, pero le atesoraba, atesoraba aquella primera sensación, el intenso latir, adrenalina por todo el cuerpo, la estúpida impresión de mantener una sonrisa en todo momento, sentir que lograría cualquier propósito que me pusiera con solo mirarle y permanecer a su lado, el mayor sentimiento para un chico de 12 años ingenuo, lento y lleno de ideales, pero no sucedió y debía aceptarlo hacer frente a mi realidad ¿Es que se puede ser mas idiota? La increíble terquedad con la que fui criado no ayudaba o quizá era culpa de los genes, dos generaciones con la misma historia no podía ser coincidencia ¿cierto?.

Solo paso a mi lado, no hizo mas, pero eso basto para forzarme a observar cada uno de sus movimientos, gozaba de una gracia natural, el rostro mas hermoso del cual había sido testigo, su mirada decidida y cautivadora, todo lo que se denomina una belleza coreana y alguien que jamás notaria mi existencia o con quien tendría una oportunidad, comprendiendo perfectamente lo que traería consigo me ilusioné, soñé e idealicé un futuro, aun si debía trabajar el doble para convertirme en alguien lo suficiente bueno para ella. Cuando noté su asistencia frecuente al establecimiento no dudé en permanecer cerca siempre que ella lo hiciera, en un principio parecía la persona mas acosadora en el mundo pero no importaba, era feliz con solo mirarle de lejos.

La segunda semana, la oportunidad llego, nuestra primera charla fue demasiado trivial, pregunto acerca de una sección en especial, al parecer era uno de los pocos jóvenes que disfrutaba de la música clásica, la conduje hasta el lugar adecuado siendo perfecto para hablarle, así que dije lo primero que apareció a mi mente.

─¿Por qué música clásica?

─¿Disculpa?

─Lo siento quizá no...

─Descuida sólo me sorprendió escucharte decir algo, he notado que siempre permaneces en silencio

─¿¡Lo has notado!?

─Sí, te observe un par de veces, creo que el gusto musical es mutuo ¿verdad?

Estaba tan sorprendido que no sabía como responder, primero porque charlaba con tanta fluidez y segundo al saber que me observaba ¿En serio? ¿A mí?.

─Eh...

─Oh si lo siento, si, me agrada, pero también tengo algunos favoritos

─¿De verdad? Algún día deberías mostrarme

Y así inicio mi enamoramiento, el cual aún ahora no me dejaba tranquilo

En cada ocasión le conocía mas y todo acerca de ella me agradaba, las contradicciones, el intenso temperamento, cuando decidía sus metas y se esforzaba al máximo por conseguirlas, su intensa pasión hacia la música, la forma de adentrarse tanto en una melodía y tararearía sin notarlo.

Siendo joven los mayores creen que a esa edad el amor llega tan fácil y del mismo modo se va, pero mi caso marcaba la diferencia, realmente le amaba, no se trataba de un capricho o admiración por lo guapa que era físicamente, adoraba su mente, su actitud, las carencias, el sentir la necesidad de protegerle en cuanto le veía pero dejar de pensarlo al conocerla. Comprendía todo acerca de mis sentimientos pero no lo mas importante; en ocasiones no es suficiente el esfuerzo o dedicación que aportes simplemente los sentimientos no encajan.

Se alejó sin enterarse de mis sentimientos, demostrándome el cariño sincero que tenía hacia mí y que muy probablemente jamás cambiaría, el tenerla lejos no fue complicado, en realidad era lo mejor para olvidar, saber que no era posible un "nosotros" tampoco lo fue, puesto que desde un principio fui consiente de mis posibilidades, lo realmente difícil era aceptar que por mas que hiciera nunca conseguiría me mirase como yo lo hacía.

Y ahora aquí observando como se acerca, continuo aferrándome a la idea de conseguirlo. La situación no es la misma, he cambiado tanto como ella lo ha hecho, no es mas la bella joven que conocí, se convirtió en una hermosa mujer decidida, fuerte.

Le encontré de nuevo un par de meses atrás, el destino es algo que no comprendo pero seguro se divierte, colocarnos en el mismo lugar no es coincidencia, una nueva oportunidad y en esta ocasión me encontraba seguro de obtenerle.

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