"Ava, detente."
Luke ordenó a la pequeña bestia que se encontraba lanzando una pelota a lo largo de la mesa en la cocina. Él se encontraba realizando la comida, así que en cualquier falla, su hija podía pasar un accidente.
La pelota logró tirar un tazón que contenía galletas molidas, por lo cual Luke explotó.
"¡Te dije que te detuvieras!" Dejó la espátula con la que movía la carne y prosiguió a tomar la pelota y aventarla hacia el patio mediante la ventana trasera.
Ava sólo atinó a bajar la cabeza, había roto un tazón y de paso había echo enojar a su papá. "Perdón.."
Luke no respondió a su disculpa, él siguió cocinando urgentemente.
Tenía una cita.
Al cabo de unos minutos, se encontraba sirviendo en dos platos hondos algo que parecía una sopa verde, probablemente de espárragos. Después colocó un tazón grande llenó de carne y verduras; Luke inhaló fuertemente y en su rostro apareció una sonrisa triunfal.
"¿No aceptaste mi perdón, papá?" La pequeña llegó a su lado, jalaba de la chaqueta de su padre y movía su pie de lado a lado.
"Perdóname tú a mí, Ava, estaba muy ocupado y tenía que terminar ésta cena."
Su hija se percató de la deliciosa comida, rápidamente desapareció del lugar y después volvió con las manos un poco húmedas.
"¡Ya quiero carne!"
Oh oh.
"Bebé... ésta comida no es para ti."
"¿Entonces para qué cocinaste montones?" Ava exclamó con decepción total en su rostro.
Unos golpes en la puerta sacaron a los dos de su pequeño debate, Luke revisó su teléfono y se percató de que ya eran las 8 de la noche.
"Ya ha llegado tu respuesta, Ava." Contestó con una sonrisa burlona y nerviosa.
Luke arregló su cabello frente al pequeño espejo de lado de la puerta, acomodó el cuello de su chaqueta y nerviosamente abrió la puerta.
El largo cabello color café y una chamarra color olivo fue lo único que percibió Ava. Nunca había visto a una mujer en su casa, y su pequeña mente ya había formulado ideas en su cabeza sobre quién podía ser.
"Hola, me llamo Ava." La pequeña rubia extendió su mano plácidamente con una sonrisa enorme. La ajena chica le devolvió el gesto mientras estrechaban sus manos.
"Charlotte. Un gusto, nena."
Luke parecía no estar en la escena, Ava sentía conectarse enormemente con la chica que seguía afuera.
"Por favor, pasa." El rubio se hizo a un lado junto con su hija, dejando pasar a la chica mientras Luke retiraba la chaqueta de ella para colocarla en el perchero
"Ava, ¿qué te parece sí vas a tu habitación y le llamo al tío Calum? Así tal vez te llevé a comer." Ofreció Luke a su pequeña, quién no se veía demasiado convencida pero de todas formas subió a su recámara.
"Linda casa, ¿hace cuanto vives aquí?"
"Desde hace cuatro años... ¿Te gustaría cenar ya?" Evadió más preguntas respecto a su pasado, no tenía ganas de hablar con ello, pero Charlotte realmente le interesaba y si quería llegar a algo, tenía que hablar.
"Claro, me encantaría."
Luke ofreció a Charlotte tomar asiento, no antes sin lavarse las manos. Ya sentada, él regresó con un traste lleno de pan en trozos, el cual olía muy bien.
Los dos juntos en la mesa comenzaron a comer de la sopa que había echo Luke. Sin rastro de gestos de disgusto por parte de ella, él había tomado una decisión:
No cocinaba tan mal.
"Dime, ¿cuantos años tiene tu hermana? Es muy linda." Charlotte preguntó tranquilamente mientras tomaba un pedazo de pan.
Él casi se ahoga con su sopa. Era demasiado rápido para decirle que era su hija, pero era demasiado tarde también para confesarlo.
Eso era lo primero que tuvo que haberle dicho.
"Uh, tiene cuatro." Comenzó a rascar su nuca de los nervios. "La considero más como una hija."
"Vaya qué lo creería. Son idénticos."
Luke no alcanzó a responder, ya que Ava se encontraba a lado de él mirándolo con sueño y aburrimiento.
"¿Podrías ya, llamar a mi tío?"Sonó más como una orden, él tomó su teléfono y marcó su número.
A los segundos contestó, se oía cansado. "Hey, ¿qué pasa?"
"No, nada." Luke al oír su voz no quiso molestarlo pero Calum prosiguió.
"¿Quieres que vaya por Ava? Está bien, mi cita me canceló y no me vendría mal ir por unas copas junto con mi sobrina." Colgó riendo y Luke sólo rodó los ojos.
Ava seguía pendiente, él sólo le dio la instrucción de ponerse zapatos y la pequeña corrió escaleras arriba.
Su cena prosiguió, lo interesante se había acabado y la carne también. La puerta se abrió, dejando ver a Calum guardando sus llaves para después verlo confundido.
Ava bajó corriendo hacia las piernas de su tío, quien sólo pudo tomarla de sus brazos.
"¿Qué carajos haces aquí, Charlotte?"
Luke se paró de su silla, y la chica lo imitó con su rostro en shock, también. "Lenguaje."
"¿Calum?"
El rubio estaba demasiado desconcertado, Calum por su parte miraba a Charlotte con tristeza y un poco de odio.
"¿Se conocen?" Luke y Ava dijeron al mismo tiempo.
Calum y la chica comenzaron a decir cosas qué a Luke no le interesaban ya en lo mínimo. Ava corrió hacia su padre y éste la cargo para irse a su habitación.
Pero antes, su teléfono vibró avisándole que tenía un mensaje.
No tenía porque desbloquear su teléfono, en la pantalla decía quien y qué había mandado.
Su noche no podía estar peor.
•Caroline Blare
Lo lamento, podemos vernos?

ESTÁS LEYENDO
𝐁𝐫𝐨𝐤𝐞𝐧 𝐇𝐨𝐦𝐞 ; 𝐋𝐑𝐇
Teen Fiction" ―Papá, ¿cuándo mamá y tú perdieron su felicidad?" A Luke Hemmings story ashfixia (now spideytae) 2015☆