Loving Her || Dylan O'Brien ||

I am back

Rebecca

Después de pasar seis largo meses lejos de casa me encuentro regresando a San Francisco, tengo que afrontar la realidad y volver, en fin no todo es para siempre ¿no?. Al irme de la ciudad no mire atrás y no me despedí de nadie, más que de mis padres y de mi hermano mayor Mike, no estuve en contacto de mis mejores amigas, Isabelle, Jane, Bianca y Cameron, ni siquiera les dije que me iría, no tengo idea de cómo tomaron la noticia, y tengo miedo de volverlas a ver. Pero tenía que arreglar las cosas y seguir mi vida.

— ¿Con quien hablas?-pregunto el viejito que se encontraba sentado junto ami en el avión

— Ha interrumpido mi narración-dije mirándolo con los ojos entrecerrados

— Lo siento, pero tu interrumpiste mi lectura-dijo el señor alzando su libro

— Supongo que lo lamento

— Supongo que lo lamento-repitió después de mi el señor

— Si eso es lo que dije

— Si eso es lo que dije-dijo nuevamente

— ¿Porque repite lo que digo?

— ¿Porque repite lo que digo?

— Oh vamos, que infantil-dije rodando los ojos

El viejo se hecho a carcajadas. ¿Que diablos le pasa en la cabeza a este viejito?

Escuche mi estación por los micrófonos, ya era la hora, al fin regresaría.

— ¡Adiós lesbiana!-chilló el viejo colocándose unos audífonos

Repito ¿Que diablos le pasa?
Baje del grande avión junto con mis maletas para perderme entre todas las personas, después de salir con mucha dificultad de ese gran lugar, me entregaron mis maletas y me acerque a la gran sala donde se encontraban mis padres y Mike volteados dándome la espalda.
Me acerque a ellos soltando mis maletas y toque sus espaldas con mis dedos. Dieron un brinco asustados y se giraron sorprendidos, no dudaron mucho y se lanzaron sobre mi dándome un cálido abrazo, admito que los extrañe.

— ¿No te pudiste quedar unos meses más? ahora tendré que regresar a mi habitación-dijo Mike bromeando mientras me abrazaba y despeinaba mi cabello

— ¿Estabas en la mía?-preguntó zafándome de su agarre

— Es grande y espaciosa-dijo alzando los hombros

— No quiero ni pensar qué le hiciste-dije asqueada

— No te preocupes sólo fue conmigo mismo-dijo entrecerrando su mano y moviéndola de arriba abajo

— No lo tenía que saber eso asqueroso!-grite pegándole en el pecho

— ¡Tranquilos que ya vamos ala casa!-gruño mi mama

El camino a casa fue muy divertido, realmente los extrañaba pensé que todo seria diferente, pero no, Mike seguía igual de inmaduro, baje del auto junto a Mike que venía pisándome los talones.

Subí a mi habitación y estaba muy diferente, había un aparato para hacer ejercicio, ¿Mi hermano Mike haciendo ejercicio? ¿Ese gordo bueno para nada? Aunque debo admitir que su cabello es algo diferente y se ve más alto.

Su cama estaba desordenada y había ropa por todos lados, parecía un nido. Me acerque a el mueble de madera que se encontraba en el cuarto y abrí el cajón. Había dinero, que tal vez desaparezca por arte de magia, un collar de mujer, ¿Mike con un collar de mujer?, y si eso no es para sorprenderme encontré una caja de preservativos.

— ¿Qué haces aquí? Aún no e sacado mis cosas-dijo Mike entrando por la puerta

— ¿Qué es esto?-dije sorprendida elevando el pequeño paquete

— Es una caja condones tonta, ¿jamás habías visto unos? ¿por qué revisas mis cosas?-preguntó molesto

El pequeño Mike si que creció.

— ¿Desde cuándo haces ejercicio y porque tienes un collar?-pregunte curiosa

— Escucha sacaré mis cosas de aquí, sólo deja de mover-bufo mi hermano arrebatándome la pequeña caja y guardándola en su bolsillo

Un teléfono vibró y al ver que no era el mío, me gire para ver el teléfono de mi hermano, lo tomé y revise la pantalla.

— Dame eso, ¡es mío!-dijo intentando quitármelo

— Veamos quién te mensajea-dije alejando el celular de el

Me quedé anonadada al ver quien le había mandando un mensaje

Una de mis mejores amigas, Cameron

"¿Entonces tu hermana llega ahora? Estoy emocionada por verla de nuevo. Mis padres no están, ¿Vienes?"

— ¿¡Porque Camerón te mensajea!?-pregunte sorprendida

— Mira Rebecca, no sé qué pensabas cuando regresaste pero las cosas cambiaron. Todo cambio, yo cambie

— ¡Eso explica tu nuevo cabello, y tu cuerpo ejercitado, tus mensajes con Camerón y los preservativos!-dije molesta

Sabía que las cosas no podían seguir iguales, quería hacerme a la idea de que sí.

— Tu no te quedas atrás, seguro también cambiaste, ¡y quien dice que no te acostaste con muchos chicos en el internado!-grito molesto

¿Eso pensaba él de mi?

— Para cuándo suba, sacarás todas tus cosas de mi habitación, y no irás a la casa de Camerón-dije caminando hacia la puerta

Me dolió lo que dijo, no era el Mike que yo quería, tal vez ni siquiera fue buena idea regresar

Después de bajar a comer y responder miles de preguntas de mis padres sobre el internado donde visité muchos lugares y aprendí demasiado.

— Bueno, quede muy llena, si no les importa subiré a instalarme, es pregunta-dije levantándome

— Claro, descansa, fue un largo viaje-dijo mi madre

Les sonreí y lleve mi plato al fregadero; lo lave y subí rápido a a poner mis cosas donde debían.

Instale casi todas mis cosas en mi habitación, sólo faltaba guardar mi ropa, si esto paso en mi casa no quiero sabes que pasará mañana en la escuela.

Tocaron la puerta de mi habitación, seguro era mi madre

— Adelante-dije terminando de acomodar mis blusas

— Veo que ya acomodaste todo-dijo Mike entrando con timidez

— Eso parece, aún me faltan unas cosas-susurre.-¿Necesitas algo?

— Mama dice que te ya estas en el colegio nuevamente, ¿Estas segura de volver? Solo digo, mama cree que tal vez deberías descansar y entrar ala escuela, no se en una semana tal vez-finalizo

— Dile a mama que estoy segura, y que entraré mañana, me salte mucho la escuela, necesito ponerme al corriente-dije apretando los labios

— Y lamento lo que te dije, se que no eres así, pero no me gusta que revisen mis cosas, ni que me impongan cosas-dijo tocando mi cabello

Estire mi mano hacia su abdomen y la deje ahí.

— Si que haces ejercicio-dijo con una sonrisa.-Esta bien Mike, yo también me hubiera molestado si te hubiera visto buscando entre mis cosas

El sonrió al escuchar lo del ejercicio y asintió con lo demás.

— Pero es que, siempre te e visto como un hermano menor sabes, a quien proteger

— Yo te e visto como la hermana tonta a la cual cuidar.-dijo despeinando mi cabello-Te dejo descansar, hasta mañana, te llevare en mi Porsche ala escuela-dijo alzando las cejas

— ¿Como rayos te dieron un Porsche?, bien, buenas noches-dije acostándome en la cama

Mike salió de la habitación, y yo me dedique a repasar mi día, tengo miedo de que mis amigas me odien, pero si son mis amigas entenderán, pero siempre hay otras personas que pueden ser tus amigos, ¿No?.