Lobo Blanco [Eunhae +18]

Buenas Noches

El sonido del motor caliente deteniendo su marcha, y el de los frenos contra los rieles, movieron la cabeza de cabellos castaños que, descansaba tranquila sobre el vidrio empañado por el propio aire tibio cada que soltaba un respiro

Eunhyuk abrió los ojos lentamente, y poco a poco fue enfocándolos, sintiendo cómo el tren frenaba su marcha, parpadeó fuerte para aparatar el sueño de sí, y giró para ver qué los aguardaba afuera; la estación construida en madera y metal, fue lo que sus ojos captaron, junto con el letrero que, mostraba el nombre de la primera y única parada del tren "Denali" -suspiró y se frotó la cara levemente con sus manos, sacudió un poco su cabellera y apoyando ambos codos en la mesa levantó la vista- Donghae dormía de igual manera contra la ventana, sus labios rosados se mostraban levemente entre abiertos y sus mejillas pintadas de tonos rojizos, producto del frío ambiente y de su blanca piel, su pecho subía y bajaba con respiraciones regulares y acompasadas

El castaño lo miraba con los ojos de un amante, con suspiros encontrados y respiraciones pausadas, lentamente alzó un brazo hacia Hae, pero lo retiró a mitad del camino, desviándolo hasta su cámara fotográfica y capturó la escena, >quería tomar tantas fotos de Donghae como le fuesen posibles, si era necesario llenaría el rollo entero< , sonriente se colocó la cámara al cuello y se levantó de su lugar, caminó hacia el bello durmiente y lo miró unos pocos segundos más

El encargado de estación gritó, anunciando la llegada y Eunhyuk finalmente se agachó hasta el albino, con la punta de su naríz tocó su cabello, oliendo inmediatamente el delicioso y dulce almizcle que envolvía al menor, con sus labios lo suficientemente cerca del oído ajeno, susurró amablemente –Ya llegamos Hae

El aludido gimió levemente entre sueños y frunció el entrecejo para después entre abrir sus ojos y voltear a verlo aún adormecido

El mayor sonrió enternecido, al ver el gesto perdido y lo alentó a levantarse, sacó el equipaje de la parte de arriba y se aseguro de que no estuviesen olvidando nada

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Había extrañado la sensación de libertad que, estar entre los árboles y flores le causaba, amaba la sensación refrescante del aire despeinando su cabello, y por su puesto, la nieve bajo sus pies

Donghae cerró los ojos mientras respiraba hondamente y se quedaba quieto en el justo medio de una roca grande, cuando finalmente exhaló, sus ojos se abrieron al hermoso verde de la montaña, recordaba si vida como lobo, ya que, la mayor parte de su vida la pasó así, sus caminatas a la luz de La Madre Luna que velaba por él, y sus paseos por la orilla del río, incluso en primavera cuando el hielo se había derretido un poco, las truchas saltaban corriente abajo >le gustaban las truchas<, unas hojas crujieron a su espalda y a su lado, pasó Eunhyuk tomando fotografías con su... >¿cómo la había llamado?, ¿cámara?<, Hae suspiró, sus primeros días en el Hotel, habían sido realmente difíciles, no sabía hablar >no muy bien<, así que no podía comunicarse tanto como le hubiese gustado, había visto y conocido tantas cosas maravillosas..., como aquél aparato donde el humano vuela, ¡era maravilloso!..., si [1]Kylia hubiese lo hubiese visto...-Hae sonrió- la habría podido perseguir por los cielos como siempre había deseado hacerlo.... –la sonrisa que se había formado en su boca, comenzó a desvanecerse- era verdad, Kylia ya no estaba, ni su padre, ni ...- alzó la vista de las hojas secas en la tierra y posó su mirada profunda en la espalda del castaño – ni Hyukjae- la exposición del profesor Cho, había resultado muy difícil de ver, tantos objetos con los que él había crecido, que él había visto en su esplendor, al igual que las personas, ver sus huesos era simplemente ...-agitó la cabeza para alejar la idea- incluso su lenguaje, era un idioma muerto, lo había intentado, realmente lo había hecho, pero... esta vida, no era su vida, y Eunhyuk, no era Hyukjae, en cambio, él seguía siendo él, lo había sido por cientos de años...