Dinah decidió irse y dejar a las chicas solas, tenían cosas por hablar y demasiado tiempo por recuperar.
Camila y Lauren se quedaron en la sala, abrazadas, escuchando musica, Camila sabía que Lauren podría estar así toda su vida y que seria feliz, así que decidió este así con ella, mientras estuviera feliz ella también lo estaría.
Lauren se dio cuenta de que Camila se había quedado dormida, así que saco él móvil y se tomo una fotografía con ella, la guardo y la estableció de fondo de pantalla.
Lauren estaba verdaderamente feliz de saber que su novia no tendría que irse a otro país, que la iba a poder tener con ella mucho tiempo más, que podría seguir siendo dueña de su sonrisa por las mañanas.
Cuando despertaron, él sol ya empezaba a meterse.
-Amor ¿Quieres salir a comer?.- preguntó Camila.
-¿Por que no hacemos esto como la primera cita?.-
-No entiendo.-
-¿Recuerdas nuestra primera cita?.-
-¿Como no recordarla? Si estaba más nerviosa que cualquier otra persona en la tierra, recuerdo que ese día le dije a mis papás "Voy a salir, en una cita, con una chica, con Lauren, la de la calle de al lado".-
-Si me contaste eso, yo también estaba nerviosa, pensé varias veces en no ir, pero valió la pena rechazar a mi conciencia.- Lauren abrazo a Camila y se dieron un corto beso en los labios.
-¿Entonces quieres comer pizza y limonada?¿Y también te vas a vestir como ese día?¿Te vas a poner tu camisa negra de "The 1975"?.- Camila empezó a reír y la ojiverde solo rodó los ojos.
Ambas chicas salieron de él apartamento y se fueron a la pizzería del centro comercial, la misma de su primera cita.
-¿Puedo ponerme cursi?.- pregunto Lauren.
-¿QUE?¿TU?-. Camila empezó a reírse.
-Camila.-
-Ya esta bien.-
-Cuando me dijiste que ya no podíamos seguir, mi mundo se vino abajo, lo único que se me venia a la mente eras tu con alguien más, o siendo feliz sola sin mi, estuve muy mal en tu ausencia, no se me antojaba nada, trate muy mal a Dinah, le deje marcas en él cuello por que quise golpearla, para evitar que me abrazara, en ese momento lo único que quería era a Camila, a mi hermosa Camila, con esa sonrisa que me sacaba de él mundo y me transportaba a otro, donde sólo eramos tu y yo. Camila Te amo.-
-Yo También te amo Lauren, eres la mejor persona que he conocido, Te amo.-
Las chicas comieron pizza y limonada, como lo planearon y después fueron a casa de Camila a ver como estaba Sofia.
-¡Lauren!.- Grito la pequeña en cuanto vio a la chica entrar.
Sofia se veía demasiado bien, seguía un poco cansada pero nada grave, pasaron la noche juntas y vieron películas, jugaron juegos de mesa y cenaron comida china, a petición de la pequeña Sofi.
Mientras Camila lavaba lo platos, observo como Lauren trataba a Sofia, con tanta delicadeza, paciencia, ternura, se imagino a ella y a Lauren con una hija, o un hijo, y una gran sonrisa se le formó en él rostro.
