A cada respirar

209 30 2
                                    


Título: Bienvenida a la sociedad

Sumary: —Oh, ya veo. Eres una rara, ¿verdad? Nadie te quiere hablar. Sí que tienes suerte Hinata, aún tengo que hacer mi buena acción del día y yo te voy a enseñar. Mi nombre es Namikaze Naruto. Bienvenida a la sociedad.

Advertencias: Universo Alterno/Un poco de OoC/Amor Lento/Conceptos de psicología.

Pareja: NaruHina

Cantidad de palabras: 2,667/Cortesía de Magic Word en complot con Microsoft para hacernos creer que de verdad hay esa cantidad de palabras en el capítulo.

Disclaimer: Naruto no me pertenece, todo registro legal y de derechos son de su autor Kishimoto. Y el NaruHina :3

O

O

O

A cada respirar

O

O

O

Al principio había pensado que la mejor forma de enfrentar la situación era simplemente dejar a la chica oscura sentarse a su lado en completo silencio, esperando que tal vez aquello la hiciera entender su desplante, pero la situación empezó lentamente a tornarse pesada y bastante extraña para su gusto.

Había conocido a muchas mujeres de su tipo, calladas, silenciosas y aparentemente inofensivas pero que en cuanto mal interpretaban la más mínima señal de su parte como positiva solían buscar una manera de atraer su atención a cualquier costo.

Con las calladas nunca supo cómo actuar, hubo varios momentos horrorosos dónde fue casi violado por chicas así de serias que terminaron por hacerse las víctimas ante los demás. Así fue cono Sasuke fue construyendo su barrera, llena de leyes inquebrantables que obligaba al resto a obedecer, una de las principales era que nadie se sentaba en su banca designada zona anti-Naruto los jueves, o al menos lo fue hasta que llegó esa mujer a burlarse de su sistema.

Sasuke suspiró, acercándose en silencio a su lugar correspondiente, ignorando deliberadamente la presencia de la, a su parecer, chica rara y esperando obtener cualquier tipo de reacción que aclarara sus dudas sobre como proceder. Pero nada llegó de ella. Se negaba a mantener todo tipo de contacto visual, enfocándose por completo en las pequeñas hojas de cerezo sueltas que avanzaban gracias al viento sobre el camino de concreto. En otras ocasiones no le daría tanta importancia, quizás, dependía mucho del humor del pelinegro, pero el hecho de que su auto proclamado mejor amigo estuviera espiando de forma tan ridícula en su dirección acrecentaba su curiosidad hacia ella.

Era una persona amarga e insolente y Sasuke era muy consciente de ese hecho, pero aun con todo y su agria actitud no podía evitar empezar a sentirse un poco incómodo al lado de ella. A pesar de su timidez las féminas solían por lo menos mirarlo de reojo y suspirar, pero ella era bastante diferente. Parecía querer fundirse con la banca. Si no fuera porque la veía pestañear pensaría que era una muñeca demasiado realista que alguien (Naruto con seguridad) le había dejado como broma pues estaba completamente inmóvil en su lugar.

—Oye...—Llamó, atrayendo un poco de su atención. —No estoy interesado en ti —Pronunció Sasuke con aparente indiferencia, vigilando de cerca a su acompañante indeseada. Se mantuvo por largos segundos observando detenidamente sus gestos y esperando la consecuente reacción a su frase. —¿Lo sabes, verdad? —Agregó para asegurarse de que le estaba escuchando.

Bienvenida a la sociedad | Naruto | NaruHinaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora