capítulo 5

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Escucho que mi despertador está sonando. Es la alarma para irme a correr.
Abro mis ojos y siento todo el peso del mundo encima, una garganta bastante irritada y un dolor tremendo de cabeza.
Ruedo por mi cama para poder alcanzar el despertador y apagarlo. Al llegar a él y apagarlo me quedo en la misma posición, una rara de mitad cuerpo de lado y la otra mitad cuerpo pecho bajo.
No me siento bien. Nada, nada bien.
No creo poder ir a correr hoy. Y dudo estar en condiciones para ir a trabajar.
Hago un esfuerzo por levantarme de la cama y buscar mi celular. Cuando lo tengo en mis manos sé que sólo puedo hacer una cosa en estos casos; llamar a mi madre.

-¡Nat!- contesta mi madre al cuarto tono- ¿cómo estás?

-Hola mamá- limito mis palabras y hacer que mi madre note mi situación con sólo esas palabras.

-¡Ho! Estás enferma.

-Sí... Me siento demasiado en exceso mal. ¿Tendrás algún remedio mágico que me haga sentir mejor?- digo tirándome de nuevo a mi cama.

-¿Qué es lo que sientes?- pregunta mi madre.

-Temperatura, dolor de garganta tremendo, y dolor de cabeza.

-Sí, sé qué puedes hacer. Ve al doctor.

-No quiero moverme. Pensé que me dirías algo de un té o esas cosas raras que las madres saben. ¿Crees poder venir?

-Señorita pero si usted ya está grande, ya no necesita de su madre - me dice en todo de burla.

-¡Aaaa!- emito un sonido extraño.

-No puedo Nat, de hecho iba a llamarte; ya salimos de viaje tu padre y yo. Se adelantaron los planes.

-¿Ya se fueron? No puedo creerlo. ¿Y qué se supone que haré ahora?- digo en tono de berrinche. Sé que ya no estoy para hacer eso pero ¡Vamos! con nuestra madre podemos hacerlo toda la vida.

-Ya te dije, ve al doctor. Nena te tengo que colgar, es momento del desayuno.

-No mamá espera. No cuelgues... ¿mamá?- sí, ya colgó.

Me siento en líos, tengo que ir a mi trabajo pero no siento estar en condiciones para hacerlo.
Está decidido tendré que faltar.
Tomo de nuevo mi celular y marco el número de Ani.

-Buenos días Nat- Ani responde de inmediato- ¿qué se te ofrece?

-Ani buenos días. Sólo decirte que hoy no iré a trabajar, estoy enferma y creo que lo mejor será tomarme el día. ¿Puedes encargarte hoy de todo?

-Oh Nat, que mal escuchar eso, espero te recuperes. No te preocupes descansa y yo me encargo de todo lo que esté pendiente.

-Muchas gracias Ani. Si necesitas algo me llamas. Cuídate.

-Claro Nat. También cuídate.

Bien ya arreglé lo del trabajo ahora sigue lo que me hizo arreglar lo de mi trabajo; los gérmenes que llevo dentro.
Por ahora creo que sólo dormiré un poco más.

Después de un tiempo me despierto y sigo sintiéndome "bal". Rayos tengo mucha gripe.
Me levanto y voy al espejo de mi baño... no me gusta lo que veo, en verdad me veo muy enferma. Será mejor que vaya el médico.
Como puedo me doy una ducha. Me pongo un pants color negro, cepillo mi cabello y lo dejo suelto. El maquillaje no es una opción para hoy.
Así, simple y sencillamente salgo al médico.
Cuando llego hay un par de personas en la sala de espera, me siento para ser la tercera.
Casi en cuanto me siento la asistente del doctor hace pasar a una señora con su hijo.
Yo me quedo sentada y saco mi celular para llamar de nuevo a Ani.

-¡Nat! ¿como sigues?- pregunta Ani del otro lado del teléfono.

-Hola Ani, igual creo. ¿Cómo están las cosas por allá?

-Todo está muy bien Nat ya tenemos el contrato del fotógrafo, justamente hoy le di el recorrido por la empresa y comenzamos a hablar un poco sobre el viaje que tendrán que hacer. Pero no le expliqué todo, prefiero que tú se  lo expliques completamente.

-Muy bien Ani, todo está muy bien- interrumpo mi oración para limpiarme un poco la nariz- te llamo más tarde entonces.

-Bien Nat, saludos de todos en la oficina.

Y cuelgo.
Recargo mi nuca en la pared, cierro mis ojos y no pienso en nada que no sea mi nariz escurriendo.
Pasan unos cinco minutos y la señora que entró con su hijo sale. Abro mis ojos y veo que de nuevo la asistente sale y le pide al otro sujeto de edad avanzada que pase con el doctor.
Y de nuevo tengo que esperar.
Recargo nuevamente mi nuca, cierro los ojos y creo que comienzo a culparme por la mojada de la noche del domingo. Me divertí no lo niego, pero en verdad no me siento bien.
Saco mi celular y llamo a Berenice.

-Hola Nat.

-Hola Bere ¿cómo estás?

-No tan bien Nat, estoy en mis días íntimos de mujer. ¿Y tú? Te escucho algo rara.

-Estoy enferma, la mojadita del domingo me hizo daño.

-Ay nena ¿fuiste a trabajar?

-No. De hecho estoy con el doctor.

-Bien, cuando salgas de ahí me llamas para ir contigo y cuidarte. Te apapachare.

-Amm... con que lleves un poco de comida basta.

-¡Nat no has desayunado!

-¿Cómo lo sabes?

-Sacaste el tema de comida demasiado rápido.

-Bien, me conoces muy bien.

-¿Qué te gustaría que lleve?- pregunta Berenice.

-Tacos y películas.

-¡Y helado! Bien, entonces tacos, películas y helado.

-Sí pero oye que no sean películas de romance, algo de terror y ciencia ficción me gustaría.

-Ese ya es otro asunto Nat. Haré lo que pueda ¿de acuerdo?

-Mmm... temo por ese >haré lo que pueda<

-Jaja tú tranquila nena la vamos a pasar muy bien, además a mí también me ayudará; no soporto este dolor.

-Huy no, mejor no vengas. Estás en modo niña hormonal... dudo poderte soportar- digo sarcásticamente.

-Ash Nathalie que graciosa. Bueno entonces nos vemos más tarde ¿vale?

-Muy bien.

Y colgamos.
¡Ya no sé qué hacer! Estoy demasiado en exceso aburrida, y enferma, con una nariz escurriendo.
Creo que saldré a la calle un momento, observé cosas.
Cuando salgo sólo veo carros pasar, gente caminar y escucho mucho ruido. Que raro eso me molesta, normalmente me gusta observar a la gente pero me imagino que esta enfermedad hace que todo lo vea feo.
Mejor regreso a la aburrida sala de espera, en una más aburrida silla.
Después de cinco minutos que volví a sentarme por fin es mi turno de pasar.

-Pase por favor- me indica la asistente del médico.

Apenas puedo levantarme. Lo hago arrastrando los píes... rayos, sí me siento mal.
Y entro a consulta.

>>¡Hey! ¿Cómo están mis lectores?
Es un gusto poderles saludar desde este medio.
Les agradezco en verdad por darse el tiempo de leer y también por esperar (sé que no soy muy constante pero hago un esfuerzo por serlo.)
Este capítulo es un poco o un mucho pequeño en honor a jhchagksll¡Gracias amiga por leer!
No se olviden de votar y comentar.
¡Gracias a todos!
Saludines xD<<

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