Capítulo 4

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Ese día después de un poco más de un año que no le dirigí la palabra a Zeth, ahí estaba conmigo. Me quedé dormida en su cama, al despertar escuche como daba vueltas en la habitación, me pare y me acerque a él.


— Mmm... Hola.

— ¡Oh! ya despertaste, lo siento, debes estar cansada.

— No, ya descansé lo suficiente pero... Tú no has dormido nada.

— No logro idear ningún plan, un embarazo no se puede ocultar -dijo angustiado-. Ya pronto se notará.

— Lo sé, pero si le contamos a Melissa seguro puede ayudarnos, sé que parece fría y despreocupada, pero conmigo es diferente, se convirtió en una hermana para mí.

— ¡NO! Dev esto es diferente, aunque fue muy condescendiente contigo, no dudes que te matará cuando ya no le seas útil, ten en cuenta que en tu estado no generaras ningún ingreso para ella.

— Pero...

— No, lo más que podría hacer ella sería buscar la forma para que te deshagas de ese bebé.

—¡No! yo... yo.. No podría -dije entre lágrimas-.

— Tranquila encontraremos la forma, lo único que se me ocurre es que tomemos muchas misiones lejos, de esa forma no estaremos en la base, no te preocupes yo me encargaré de ellas, pero tendrás que dar en adopción al bebé.

—¿Podemos huir?

— No Dev no podemos, Craig podría rastrearnos fácilmente y nos mataría, en cuanto a eso no tenemos opción.

— Tienes razón, pero independientemente es lo mejor, se merece una vida como nosotros no la tuvimos.

Se acercó y me abrazó, nos quedamos un momento en silencio.

— Gracias por todo.

— No te preocupes, yo me encargaré de todo.


Desde que dejé a Drako en aquel departamento, no lo volví a ver, a Melissa le comenté que tuvimos un altercado y eso me ayudó a que me mandara a misiones con Zeth en lugar de Drako, al parecer ella lo entendía ya que estuvo en una situación similar con Damian, ni tan similar, pero ayudó con el plan de Zeth.


A los cuatro meses de embarazo ya se empezaba a notar mi vientre, Zeth puso en marcha el plan me mando a varias misiones a Reino Unido y América, como dijo él se encargaba de todas las misiones, mientras tanto yo me establecí en Glasgow.


A los siete meses Zeth tuvo que irse a América, en ese tiempo empecé a extrañar a Drako, él no era mala persona, las circunstancias lo hicieron así y no lo culpo, aun así no puedo perdonarlo, no dejaba de dar vueltas en el pequeño departamento en el que vivía con Zeth, antes de que él partiera me dio unos folletos de varios hospitales para dar en adopción a mi bebé, él logró infiltrarse en la base de datos de parejas que querían adoptar, así que me encargaré de investigarlas y ver cual es la indicada.

Las características de las parejas eran diversas, unas las eliminaba al solo ver su fotografía y nivel socio-económico, quería que mi hijo viviera bien pero no con demasiados lujos, llamaría la atención de personas como nosotros y no siempre el dinero es bien ganado, no quiero que termine como yo, espero que pueda tener una vida tranquila y feliz.

        DevoraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora