La ironía de la vida y del amor (KaraIchi) en español

Alguien como yo

-Narra Karamatsu de niño-

Al principio yo solo lo veía como un amigo mas... Pero tengo que admitir que a diferencia de otras personas a este lo veía diferente... Como si esa persona me importará mucho, era difícil de entender ya que, para mi era difícil que cogiera cariño hacia alguien. Pero sucedió, y esa persona no era nada menos que... El señor Ichi.

Yo apenas era un niño de 11 años, pero en ese entonces yo había ingresado en esa escuela, todo parecía una nueva experiencia, quiero decir, me habían cambiado de escuela y lo normal es que te complicas en hacer amigos, pero como yo era deportista obtuve amigos fácilmente, también por que yo normalmente soy muy "amigero" Pero a pesar de todo... Aun que hubiera gente a mi alrededor, me sentía solo, bastante solo. No sabia el por que, pero simplemente me sentía así, había veces que lo mencionaba y lo único que hacia la gente era reírse, o decir cosas como "No te preocupes, lo entiendo" "Quizás es por la etapa" "Es algo normal" "Ya llegará alguien que te entienda" Cosas que si le soy sincero, hasta se volvía repetitivo, algo que me lo había prendido de memoria, mientras el tiempo avanzaba con mi crecimiento, mi mente retrocedía junto mi "ser" Pensaba seriamente que quizás tenia depresión o algo así, pero no, simplemente vi la realidad de las cosas.

Te preguntarás por que sentía eso, no lo se, desde pequeño mis padres nunca me apoyaron en lo que yo quería, siempre tuve que hacer lo que ellos decían y que era "lo mejor" Para mi, pero a distancia se veía que en realidad era a ellos a quienes beneficiaba, a pesar que yo hacia todo lo que me pedían, en el fondo ellos se decepcionaban conmigo, tan solo un fallo que hacia, ellos me miraban con odio. Pero con el tiempo me acostumbre y aprendí que no podía confiar con alguien que no sea a mi mismo, por que si lo hacia terminaría decepcionando. Con el tiempo había formado una "mascara" perfecta para los demás: Ser alguien idiota, sonriente, despreocupado y sin problemas, siendo que en el fondo, lloraba y gritaba por ayuda, cuando llegaba a mi limite yo solo me repetía diciendo "A nadie le interesa, sigue fingiendo" Hasta que.. Lo conocí a el.

Yo en los primeros días de clases mientras hacia deporte me había lastimado, así que me llevaron con el enfermero de la escuela, se me hacia raro, ya que en la escuela anterior había solo enfermeras, pero nunca había conocido a uno. Total, me llevaron... Y desde que cruce la puerta mi vida no fue la misma.

-E-eh, Hola, usted es el enfermero?- Estaba nervioso de algún modo, el solo se volteó y se me quedo mirando como si estuviera escaneando, yo simplemente me quedé parado pensando el lo que el probablemente pensaría de mi.

-Si, tu debes saberlo, te estaba tratando en la cancha ¿Acaso lo olvidaste?- Era cierto, solo que yo no me fije tanto en la cara, pero ahora que lo veo bien... Se veía bastante atractivo

-Ah! Cierto, solo que... se me olvido- El enfermero aun seguía viendo con amargura, después no me volvió a contestar solo hizo que descansará un poco. Cuando yo ya me sentía mejor me presenté pero al parecer a el no le importó, intente bastantes cosas para ser "amigable" o que por lo menos le hiciera platica de algo, pero simplemente me contestaba con amargura. Era como yo, solo que a diferencia... El si la demostraba. Esto me resultaba un tanto atractivo de el, nunca había conocido a alguien de esa forma de ser pero... Había llegado un punto en que me había rendido, pensaba en ya no hablarle, solo si me lastimaba, quiero decir, ni quería ser su amigo... Pero, una parte de mi me decía "inténtalo de nuevo" A pesar que nunca tenia oportunidad de conocerlo, mi mente me insistía pero a pesar que el siempre resguardaba su lugar, mostraba una pizca de aprecio, esto la mera verdad, me hacia bastante feliz.

Pero no era de esperarse, nunca lo dejé de ver,  ya que debido a todos los deportes que estaba, me era difícil no salir herido, esto hacia que me diera un poco de alegría el hecho que volvería a verlo de nuevo, me di cuenta por que...