Solo Un Reto(Adrianette)

Capitulo 7

 "Acéptalo"

Sabes que lo más difícil aún no ha llegado... ¿Quieres ser sincera?

Acepta como es el mundo.

Tú no tienes una mejor amiga, fue tu madre quien llamo a la policía, quien tú crees que te ama no te ha notado nunca; para él solo eres una amiga más. Las personas no notan tu presencia, solo eres un alumno "X".

¡Deja de pensar en esa realidad, es una mentira!

...

¿Por qué tienes esperanza?, ¿no lo sabes?

Regresaste ese día.

Tratando de encontrar a ese chico de melena rubia. Él no volvió, no estuvo las últimas semanas de clase, pero había pasado el año con méritos.
Él tenía asegurada su entrada en alguna de esas escuelas, una Conalep o una Cobay en Santa Rosa. Pero tú aun debías luchar para mantenerte, pues ya tenías un lugar en la escuela que eligieron para ti.

Aun sin rumbo, sin meta... vagaste por esa escuela, la que te entrego el conocimiento para crecer, aquella que brindo en ti el don del diseño, del crear.

No buscabas ningún maestro.

Lo buscabas a él. Solo a él.

Nunca leyó tu mensaje.

En la cacha de futbol al igual que un veterano, la anduviste, sintiendo cada recuerdo en tu piel, aquellos donde tú y él reían, en donde le magullaste el rostro con una de tus patadas al balón.

Reíste al recordarlo.

No asistió a clase por dos semanas.

Deseabas correr en el "teatro" con él, hasta caer del cansancio.

No estaba en su hogar.

El no volvería a estar junto a ti.

¿Se habrá cansado de ti?

Sin prisa escalaste aquellas escaleras las que durante 2 años subiste y bajaste, reíste, corriste y creo que hasta te caíste. Llegaste a tu salón, no había nadie. Mirante esa pizarra donde millones de mensajes se juntaban, encontraste el tuyo... "Veni, Vicii, Venci", eran tus palabras. Las habías escuchado, deseabas que la preparatoria las respondiera.

Te sentaste junto a la ventana, en el lugar que compartías con él.

Nunca volverá.

Recordaste todo.

¿Por qué te preocupas por él?

No parabas de temblar, tenías miedo de algo... de las lágrimas, ¿Quizá?

No es porque fueran amigos.

Tus ojos se nublaron, deseabas algo. ¿Su compañía?, ¿Su risa?, ¿Sus brazos?, ¿Su apoyo?... ¿Su...

Tú lo amabas

Por fin aceptaste todo, y las lágrimas silenciosas eran la perfecta respuesta. Tu corazón lloraba por su amor.

Ya no llores... los años pasaran rápido, aun eres joven puedes volver a amar.

Pero, no sabes confiar en nadie que no fuese él.

Quieres volver a amarlo, pero se ha ido.

Te juro nunca dejar de amarte.

Sabías que no debiste confiar en él.