Escurridiza

933 69 6
                                    

-Papá me cambio de casa...

La cena torno un tono serio.

-¿Qué?, solo tienes 16 años mi pequeña niña...

-Quiero probar un poco de libertad...

-Sabes que tú homosexualidad no es un problema...

-No es eso, quiero saber que es valerse por uno mismo.

-Entendido, prepárenle algo que le quede cerca del colegio.

Dijo imponente a uno de sus empleados que solo asintió.

-Que pueda salir lo más pronto posible, que sea demasiado privado y por favor familia, quien sea que me busque, no le den mi dirección, yo personalmente lo haré a las personas que me interesan...

-Así que ahí está el problema...

-Es algo personal sin ofender...

-Respeto la privacidad, pero sabes que estoy aquí...

-Gracias...

Me levante para ir a mi habitación donde apenas pisando su piso estaba entrando una llamada al celular.

-¿Vendrás?

-Hola cariño......Jess no me aviso nada...

-Yo soy la responsable de pasar el mensaje sobre que las noches esas se cancelas siendo pasadas al plano de rutina para dormir con su novia como yo con la mía...

-Oh por Dios~

-Estoy tomando una ducha, el calor es insoportable~

-Será mejor que no te pongas nada, voy en camino...

-Sabes lo que me gusta...

-Sabes bien que tú me gustas...

Colgué para tomar unas cosas rápidas y salir arrancando el auto, haciendo sus llantas rechinar al momento de comenzar a conducir.

-¿Has probado juguetes sexuales?

Yo jugueteaba con mi cabello sentada en el piso de la sala donde la chimenea estaba prendida y copas de un vino no muy fuerte estaban sobre ella, pregunto aquello mientras se unía a mí cruzando las piernas, cuidando que no revelara tanto aun su corta bata de tela.

-No...tengo solo 16...

-A veces lo olvido...-Sonrió coqueta.

-¿Podemos solo continuar?-Me puse en cuatro para acercarme a sus labios, algo seductora mientras mordía mi labio inferior.

-Mi ex esposo olvido algunas de sus cosas......-Delante de mis ojos se balanceaba una corbata azul marino con franjas inclinadas grises.

-Wow......

Me vendo mientras susurraba seductoramente en mi oído algunas cosas perversas.

-Veamos si puedes adivinar...

Fui empujada hacía el suelo, la respiración era irregular estaba ansiosa por saber lo que seguía, algo simple en primer lugar al hacerme despojar de mi blusa, después sus húmedos labios besaban mi abdomen con intercesión en momentos de mordidas pequeñas, mi nariz captaba el olor de miel.

-Sabes esto pudimos guardarlo para la barra de la cocina...

-Silencio...

Su dedo índice rozo mis labios para callarme y con un beso probé aquel dulce pegajoso.

-Sé que puede ser muy porno todo esto, pero tú piel erizada me dice que te encanta...

-Oh...

Mi cuello fue mordido mojado por vino y secado suavemente con el tacto de su lengua, al parecer esta noche solo debía preocuparme por disfrutar el ser comida por su hambre voraz acompañada de los elementos dulces y salados que se irían metiendo a lo largo de la velada.

Seguidas mis piernas fueron probadas con chocolate cuando logró sacar la ropa de ellas, una fresa junto nuestros labios poco después.

-Necesito completa quietud...

Sentí como aprisionaba mis manos con otra corbata en un nudo firme, seguido un hielo paso por medio de mis senos cuando logro dejarlos al aire, dejo que se derritiese para cuando estuviera mojada secarme a chupetones, mi cuerpo se retorcía, pero cómo le encantaba.

-Auch~

La mordida en mi pezón izquierdo me sorprendió, dejo caer todo su peso en mí cuando ataco mi lóbulo derecho, estaba ya demasiado mojada y ella lo sabía siendo su próxima parada, era el primer sexo oral que me daba o al menos el mejor......madre mía, que sabía mover la lengua, unos segundos fue los que me dejo sin tacto antes de juntar nuestras intimidades, estaba prohibido arquearme, fue una difícil tarea hacer eso pero valió la pena, el pensamiento de que ella se daba satisfacción sola en sus pechos me calentaba.

-Debes de saber que esto se llama consolador...

Lo paso por todo mi cuerpo, estaba algo húmedo...y cuando estuvo en la entrada correcta fue penetrándome lentamente, eso sí que me hacía sufrir de gusto, su muñeca ayudaba al objeto ahí abajo dentro de mí pero su boca estaba ocupada en reprimir mis gemidos en besos casi agresivos, solo entre de vez en cuando se alejaba un poco me dejaba escuchar el susurro de...-Vamos córrete para mi...

Y así fue cuando sentí algo salir de mí, era caliente, se sentía extraño, los demás eran orgasmos pero jamás me había "corrido", era todo nuevo fabulosamente bueno.

-Pero hay diferencia entre esto y un vibrador...

-Ah~

Esa cosa se sentía más potente y le daba menos trabajo para que su boca se concentrara en todo tipo de movimiento sobre mis pezones y su lengua contra la mía. Sentí ese líquido salir de nuevo, esa cosa que seguía aun en mi prolongaba lo que sea que hizo.

-Aunque lo tradicional siempre es bueno igual...

Lo saco sin siquiera dejarme descansar cuando tres dedos me atacaron sin previo aviso, bueno si me aviso, pero pensé que solo lo decía porque sí.

-D-Déjame p-probarte...

-¿Quién te lo prohibió?.-Me beso fugazmente.-Usa tus instintos.

Eso me hizo acorralar su cuello con mis brazos que aún estaban amarrados de las muñecas, la punta de nuestras narices se juntaron, use esa parte como guía hasta llegar a su cuello, también la abrace con mis piernas, parecida a un vampiro no hubo beso en la parte que trataba de encontrar si no una mordida directa, arrastre mis dientes tan lentamente asegurándome de escucharla.

-Oh~-Ese suspiro-gemido era lo mejor.

Termine, saco sus dedos t bajo la corbata de mis ojos, compartimos una mirada tierna antes de un beso lento y que se recostara sobre mi aprisionada para caer en rendición por fin.

Dear Mom Donde viven las historias. Descúbrelo ahora