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La deslumbrante chica la he perdido de vista por unos segundos, así que me levanto de la silla y hecho otro vistazo buscándola, hasta que la veo con Rita y están en la pista de baile.

Me dan ganas de llegar y bailar con ella pero contengo mis ganas *no tan rapido manuel*, además, se ve que es seria y no bailaría con un desconocido.

Así que tomo calma, y vuelvo a sentarme con mis amigos que están hablando.

No le veo mucho interés a estas conversaciones así que sólo escucho. Ellos sólo hablan de sus fiestas, sus ocios, y pues yo no tengo tiempo para hacer esas cosas, así que no tengo nada que añadir; no participo en esta conversación.

Veo a la deslumbrante  y está hablando con un amigo y de pronto pierdo las esperanzas, pero también veo que Rita habla con él y veo que solo bromean así que me tranquilizo, veo que el  amigo no tiene intenciones con ella.

Me pregunto si la deslumbrante tiene novio o sale con alguien; y la idea me aterroriza cada vez más.

Me levanté de la mesa de mis amigos y fui hacia dónde estaba Daniel, que por supuesto, estaba con Adam, a cabo de unos segundos llegué y le dije:

- Daniel, conoces a esa mujer que está con Rita?- en un tono alto porque la música no deja escuchar muy bien.
- Claro, es como su hermana y se llama Carlota, porque me lo preguntas?- me dice

-Es muy bonita, me atrae. ¿Cuántos años tiene?-le pregunto.

- Le llevas unos 3 años, no es mucho; tiene 24.-Me contestó

-Crees que puedo tener algo serio con ella? Le digo.

Mi hermano se sorprende, se lo noto en las facciones de su cara, pero rápidamente me contesta:

- Intentalo, tocar la puerta no es entrar.

-Intentaré, y le esbozo una amplia sonrisa con mi perfecta dentadura, y doy un vistazo en busca de ella.

Veo que sale de la pista de baile sola y que va directo hacia la barra, la sigo con la mirada mientras pienso si llegar y entablar una conversación con ella o no.

Llega y se sienta, en la barra, veo cómo se sienta y pienso *esta mujer desborda elegancia*, y su vestido encantador en un tono fosforescente es escotado en toda la espalda; tiene una espalda encantadora, diría que es porque práctica motocross, pero la verdad es que no sé nada de ella para decir eso.

Recuerdo las palabras de mi hermano y la veo sola, en la barra...

Es ahora o nunca, iré a por ella.

Y obto por dirigirme de inmediato a la barra.

Fliying In Love Donde viven las historias. Descúbrelo ahora