¡Minicapítulo extra!

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2 años después:

Lo coloqué en mis brazos y besé su frente. Caminé despacio a lo largo de la habitación intentando calmar sus llantos.

-Aunque llore sigue siendo una ricura. -le dije a Jake, el que estaba en la cama mirándonos con atención.

-Bueno, teniéndote a ti como madre, normal. -dijo con un tono picarón.

Yo reí algo irónica y cuando el pequeño ya estuvo más tranquilo me senté en la cama con él aún en brazos.

Jake cogió su mano y la pegó a la suya.

-Algún día será como tú de guapo y de genial. -dije sincera mirándole a los ojos.

-Sí bueno, espero que sea tan genial como yo. -se halagó a sí mismo.

Rodé los ojos y miré a Bruno, el pequeño que había salido de mí. Tenía el pelo entre una mezcla del de Jake y el mío y los ojos color miel. Era un regalo caído del cielo, y el toque que hizo perfecta nuestra vida.

Ahora mismo nuestra situación era realmente buena, ambos trabajábamos de policías, aunque obviamente en el ámbito laboral no nos comportábamos como lo haríamos fuera.

Teníamos una casa en una urbanización cerca de la ciudad y nuestros vecinos no eran nada más y nada menos que Lucy, Frank y la pequeña Samantha. Era realmente genial poder tenerlos al lado, y gracias a eso teníamos con quién dejar a Bruno cuando estábamos trabajando, además de que seguimos comportándonos como mejores amigas, contándonos pequeños chismes o ayudándonos en todo lo posible como lo hicimos hace muchos años.

-Dakota, -dijo Jake para llamar mi atención- gracias por seguir aguantándome después de todo lo que ha pasado.

Reí y acaricié su cara con la mano que tenía libre. -Es un placer tener que aguantarte Jake, si no fuese por ti aún estaría secuestrada. -ambos reímos- De verdad, no es ninguna molestia tenerte a mi lado, al contrario, eres algo así como mi fuente de energía.

Se secó una lágrima imaginaria y besó mis labios suavemente.

-Eres la mejor novia y madre que puede existir.  -dijo cerca de mi oído.

-Aún me queda mucho para eso. -acaricié la mejilla de Bruno- Cuando seamos unas pasas andantes, quiero poder sentarme en una mecedora, y contarle la historia de cómo nos conocimos a mis nietos. Quiero que cuando se enamoren se acuerden de la pequeña historia de su abuela y sepan que a veces el comienzo de un relato no es siempre lo mejor, sino el final, que es lo que determinará el futuro de la persona.

Sonreí y como una idiota sequé las lágrimas que ya se deslizaban por mis mejillas.

-Dakota, ¿quieres que te cuente una historia? -dijo en voz baja Jake a lo que yo asentí- Érase una vez tú y yo.

-¿Y no hay final? -pregunté.

-No, y esa es la parte que más me gusta. -contestó sonriendo.

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Bueno, sinceramente, entré en Wattpad y la idea de hacer un minicapítulo extra vino a mí, y dije, ¿por qué no? Asi que aquí está.

Sé que es algo corto, pero era más bien de guía para decir que había pasado con ellos y demás...

Espero que les haya gustado, y ahora sí...

¡ADIÓS! ♥

Enamorada de la persona equivocada. #Wattys2016 [Completada]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora