14

3.7K 163 8
                                    

NATALIA 

Ha sido sin dudas el mejor viaje de mi vida, al aterrizar podía ver desde la ventana pequeñas casas por el aeropuerto, Alemania esta hermoso y no podía creer que estaba aquí con Alex.

Bajamos del avión, tomamos nuestras maletas y caminamos hacia la salida

-¿Te ha gustado el viaje?.-Pregunta Alexander. Volteo para mirarlo y respondo 

-¿¡Estas de broma!?, me ha encantado como se veía todo desde allí, ya quiero volver a subir.-Digo emocionada como una niña pequeña y el ríe.

-Me alegra que te guste, Vamos que ya es muy tarde y quiero que duermas  bien.-Dice mientras llegamos a un auto negro donde un chófer nos abre la puerta.-Rafael.-Saluda Alex y este asiente

-¿Me llevaras a conocer mañana?.-Digo ansiosa-¿Adonde iremos?.-El voltea y me mira con una sonrisa tierna, besa mi frente y dice

-Eres muy curiosa, mañana te sorprenderás.-Dice mientras el auto se pone en marcha 

Esta muy de noche y puedo ver con claridad el paisaje así que decido recostar en el hombre de Alex y de pronto me quedo dormida .

-Pequeña despierta, hemos llegado.-Escucho una voz en mi oído pero no me quiero mover.

-Cargame.-Digo haciendo pucheros y estirando los brazos hacia el que me mira con ternura y me recibe con gusto.

-Eres una niñita.-Dice y besa mi frente.-Ademas no pesas nada para todo lo que comes.-Dice riendo 

-No te metas con mi comida.-Digo seria 

No siento ni ganas de abrir los ojos de lo cansada que me siento, mañana veré como es la casa; Alexander sube las escaleras y entra a un cuarto dejándome sobre la cama.

-Bajare por tu equipaje por si quieres cambiarte por algo para dormir.-Dice y yo asiento.

veo que sale de la habitación y la verdad no puedo esperar a que regrese de lo cansada que estoy así que decido quitarme los jeans, el bra y dormir con la camisa y la ropa interior, me meto a la cama y me quedo dormida.

Tengo calor y un gran peso sobre mi cuerpo, abro los ojos lentamente por la luz que entra por la ventana y me encuentro con un hermoso Alex dormido en mi cosa que me encanta pero tengo hambre, me remuevo hasta que logro salir de la cama sin despertarlo, me levanto de la cama y me coloco su camisa...Huele de maravilla.

Salgo de la habitación y la casa es enorme,no lo note anoche, tiene dos pisos y muchas habitaciones, bajo las grandes escaleras que me llevan hasta la sala, veo el comedor y la cocina, todo es muy grande y bien de decorado con un estilo muy clásico y elegante.  

-Buen día niña.-Dice alguien a mi espalda haciendo saltar del susto, volteo y veo a Gabriela sonriendo. ¿En que momento llego?.

-Buen día, ¿como es que estas aquí?.-Digo mientras entramos juntas en la cocina.

-Siempre viajo con el niño cuando va sus casa para atenderlo, solo me quedo cuando viaja a algún hotel. ¿Quieres algo de desayunar?.-Pregunta 

-Claro pero si no te molesta quisiera ayudarte, quiero subirle el desayuno a la cama a Alex.-Digo tímida y ella sonríe

Un par de minutos después Alex aun no se levanta y el desayuno esta listo, lo pongo en una bandeja para subirlo. Al entrar en la habitación sigue dormido, dejo la bandeja en una mesa junto a la cama y se me ocurre una idea... agarro mi teléfono  y le saco un par de fotos, se ve hermoso, su cara relajada y tranquilo...Me encanta este hombre.

Siempre Tuya. © PAUSADADonde viven las historias. Descúbrelo ahora