Ya no pienso en ti.
Y si lo hago ya no es con rencor.
Ya no es con odio.
Apestar de todo te doy las gracias.
Gracias a ti conocí a la persona que me hace feliz.
Gracias a ti aprendí a no ser tan iluso.
Gracias a ti....
¿Extraño las pláticas?
Aun las extraño.
Extraño que siempre había algo de que hablar.
Extraño tu calma para decir las cosas.
Solo extraño tus palabras.
Sinceramente ninguno fue lo que esperaba del otro.
O por lo menos yo lo creo así.
Tenía mucho que no te dedicaba un escrito.
Juraste que hablarías de mi.
Y lo sigo esperando.
Quiero ver cómo me describes.
Si cuentas todo lo bueno que vivimos.
O sólo cuentes lo peor que experimentamos.
Creo que ahora nos evitamos.
Lo agradezco.
Porque si no lo hiciéramos.
Yo volvería a caer en el juego.
Supongo que te ha ido bien.
Te he visto feliz.
Tal vez sólo lo demuestres frente a mi.
O por otro lado no sientas de verdad.
La última vez que hablamos fuiste un tanto grosera.
Solo te pregunte si te sentías bien.
Lamento preocuparme por ti.
Solo contaste la parte mala de la historia.
Donde yo soy el malo.
¿Porque no contaste lo malo que tu hiciste?
Supongo que tienes una reputación que cuidar.
La niña buena que nunca hace nada y le hacen todo.
¿No crees que ya fue suficiente?
Sigue engañando te.
Me falta mucho que decir.
Pero las palabras no brotan de mi con la facilidad de antes.
Ya no tengo algo que me motive a seguir escribiendo.
AR.