Capítulo 5: Snowdin

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Frisk caminó un poco más en el pueblo. Viendo las pintorescas casas a los costados. Habían más monstruos y algún que otro monstruo con apariencia humana.
En el pueblo se podía notar un ambiente cálido y amable... parecían que estaban en épocas navideñas, ya que, en el centro del pueblo había un gran pino con regalos debajo.

Al exhalar, veía como una hilera de humo blanco salía de su boca.

Parecía haber una posada, un restaurante y una librería... Aunque el cartel estaba mal escrito.

Miró a los lados, apreciando cada detalle y siento una sensación de deja vu en todo ello. La nieve blanca, el exquisito olor que provenía de "Grillby's" y los rostros familiares.

Alguien cayó justo enfrente de ella. Parecía que andaba corriendo y por ello azotó en la nieve. Frisk se acercó para ayudarle a levantarse.

Vio entonces a aquel niño. Más bien parecía de su edad pero sus facciones parecían más infantiles.

 Más bien parecía de su edad pero sus facciones parecían más infantiles

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—¿Estás bien?—preguntó la castaña.

—¡Y-yo! ¡N- no te preocupes! ¡Yo puedo solo! —le sonrió.

Frisk le devolvió la sonrisa, haciendo que el contrario se paralizara. A este le parecieron brillar los ojos mientras plasmaba en su rostro otra sonrisa.

—¡Frisk! ¿¡Eres tú!?

Aquel chico parecía conocerla. "¿Quien será?" se preguntó la protagonista.   Ella solo se limitó a asentir para pronto sentir el cuerpo de él contra el suyo, en un amistoso abrazo.

  —¡Genial! ¡Hacia ya tiempo que te fuiste!—le dijo—  ¡Además nunca me contaste como te fue con Undyne! 

—L-lo siento —fue lo único que se le vino a la mente.

—¡Yo! ¡No te preocupes! Por fin estás aquí... —se separó de ella—. Por cierto... ¿Qué haces aquí? 

—Vine a visitarlos. Por cierto... ¿Donde viven Sans y Pap? —trataba de no sonar confundida.

—Oh, viven un poco más adelante. Es una casa grande.  ¿Te acompaño?

La castaña asintió. Era mejor con la ayuda de alguien, aunque tendría el peligro de ser descubierta. No quería que nadie supiera sobre su condición. Por lo menos tendría la ayuda de Sans.

Ambos caminaron mientras aquel chico platicaba sobre lo genial que era Papyrus en la guardia real (aunque lo único que hacían era regar plantas) y la desgracia de que la gran Undyne había renunciado a esta para hallar una forma de salir

Frisk y aquel chico llegaron frente una gran casa con dos buzones.  Ella se atrevió a tocar la puerta para luego dar unos pasos atrás y esperar a que abrieran. Atrás de la puerta se pudieron escuchar voces y... ¿ladridos?

Undertale: After (Human!Sans XFem! Frisk) [Editando]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora