Capitulo Tres

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El sol aún no se ocultaba, Carola ponía los platos en la mesa y el joven Collin estaba fuera buscando algo para dar a la hermosa chica como regalo.

Reachel peinaba su cabello mientras se veía al espejo, el silencio de la habitación no le molestaba, aquella soledad era algo agradable aunque no le gustaría estar así siempre. Bajo su mirada y abrió un cajón del tocador y sacó un perfume al volver al ver al espejo se podía ver el reflejo de su padre en el.

-Padre ¿Que haces aquí? -dice viendo el reflejo de él en el espejo.

-Te pareces tanto a tu madre.

Reachel se pone tensa al ver que su padre se le acerca y coloca sus manos en sus hombros para después acariciar su rostro.

-Ah ¿si? Yo no recuerdo mucho de ella.

-Pues heredaste toda su belleza -dice al oido de la chica.

La respiración de Reachel se agita, su pecho se movía turbulentamente, la pobre chica estaba asustada. Su padre le da un beso en el cuello a lo que ella de levanta y se dirige a la puerta de la habitación.

-Si, padre -intenta abrir la puerta pero rápidamente se da cuenta que está tiene seguro. Tratando relajarse se da la vuelta y da la cara a su enfermizo padre -la puerta ni abre, tiene seguro.

-¿Quieres las llaves? -estira su brazo y en su mano se encontraban estas.

Reachel algo desconfiada estira su mano para tomarlas que antes de que esta pudiera tomarlas el cierra el puño y las avienta a la cama.

-Muy pronto te iras, pequeña Reachel. Tengo que despedirme.

La respiración de la chica va cada vez mas rápido y se da la vuelta tratando de abrir la puerta.

-Reachel es imposible, toma las llaves -apunta hacia la cama.

La chica no quería verle el rostro a su padre e involuntariamente empieza a llorar con desesperación. Si se acercaba a las llaves su padre lograría su objetivo aunque de igual manera la tenía acorralada. Siente como Xavier la toma del hombro a lo que un escalofrío recorre su cuerpo, Xaviar con fuerza la obliga a darse la vuelta y después la suelta. La chica indefensa se daja caer al suelo mientras lloraba con inmenza desesperación.

-¡Por favor padre! -pedia condolencias a su padre con desesperación y frustración.

-Solo imagina que soy uno mas de esos hombres -se acerca poco a poco a lo que Reachel se acurruca intentando alejarse.

-Soy tu hija...

Este ignora aquello y la toma a la fuerza y está solo suplica a su padre dejarla, al obtener respuesta grita por ayuda. Sus gritos eran realmente escalofriantes, con tan solo escucharla podías sentir aquella desesperación. Carola escuchaba firmemente pero Xavier había amenazado de muerte a la vieja anciana, la mujer sólo se sentó en una de las sillas de la mesa y tronaba sus dedos. Pasaron más de 5 minutos en los que la chica batallaba con su padre, este más allá de darle besos en el cuello ni había logrado nada pero el trauma para chica ya era irreversible.

Carola desde el comedor escucha al joven Collin entrar corriendo, los gritos de la joven eran tan fuertes que talvez se escuchaban hasta la plaza. La mujer sólo escuchaba con alivio y culpa al mismo tiempo como Collin pedía que abriera la puerta, despues un disparo que destrozo el candado, escucho incluso a Xavier pedir perdón. Claramente se escuchó un disparo más que se podía asegurar había matado a aquel horrible hombre.

-¿Estas bien?

-Si... si.

Collin toma una pequeña maleta en la cual rápidamente llena con ropa de Reachel y de el. Bajan y sin despedirme toman un carruaje que los llevaría hasta Ottawa...o eso esperaban. Al pasar por los alrededores del bosque los caballos se alteraron sacudiendo asi el carruaje. Estos llevarnos el carruaje dentro del bosque, en donde en cierta parte se soltaron y escaparon, quedando así sólo Collin, Reachel y el hombre que dirigía los caballos.

La Bruja© [#Wattys2016] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora