Cap. 4

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POV Vallolet:

Tenía ya un rato despierta por pesadillas. Diran que las pesadillas son de niños pequeños. Pero no! Ojalá fuesen esas pesadillas del monstruo debajo de la cama. Las mías son aún peor mucho peor (todo por hacer magia)

Gruñi y cerré el libro. Suspire fuertemente.

—¿Podrías callarte? Ya no aguanto más tu voz.—dije mirando a mi 'compañera' de cuarto que no dejaba de hablar desde hace horas sobre no sé qué cosas de su jodido novio.

Colgó el teléfono y me miro indignada. Juro que no la mato por que a los segundos los castigos son peor por agredir a tus compañeros.

—Amiguis—rode los ojos—enserio que ocupas un novio. Eres muy amarga. Ocupas un poco de dulce. Conozco a alguien que es igual a ti. Sólo que más divertido. Seguro que le hablas y le caerás de mara..—no puedo más. Tome un vaso con hielo que fui a buscar hace unos minutos a cafetería. Se lo vacie todo en la cabeza.

Pego un grito demasiado chillón para mis oídos. Provocando que los taoara rápidamente. Al abrir los ojos vi que algo salió corriendo no le di importancia y le dije:

—te. Dije. Que. Te. Callarás. —di media vuelta y me metí al baño cerrando con fuerza la puerta.

No soy tan mala persona sólo eh matado un pájaro. Era de una maestra que por cierto se enojó demasiado por eso me cambié de torre a la B todas son iguales. Sólo que en la torre E a donde sea que mires, vez puros gemelos, mellizos, trillizos. Y la llaman la torre GEMA. Nadie sabe por qué.

Suspire y abrí la llave de la ducha. Me despoje de mi ropa y me metí a bañar rápidamente.

Unos minutos después salí de la ducha. Pero al salir caí en cuenta de que no había metido mi ropa y tampoco mi toalla.

Genial! Esto determina que tendréis el mejor día.

Empeze a mirar a todos lados. No había ni una sola toalla. No podía utilizar mi ropa ya que la mandábamos directo a lavandería para un rato más ir a lavarlas.

Seguí mirando a todos lados. Hasta que vi la ventana y la cortina. . .

No. No. No. No. Mejor salgo asi y me cambio rápido. Dudo que Miley siga en el cuarto después de lo que le hice. No me arrepiento aún así.

Saque primero la cabeza comprobando que se había ido no sin antes...¡Dejar la puerta abierta!

La vida me odia. Estaban pasando personas de aquí para ya. Platicando o simplemente estudiando.

No hay de otra. Suspire y tome la cortina. La envolví al rededor mio y salí del baño corriendo y cerrando la puerta.

—suerte—susurre.

Me levanté. Y me encamine a tomar mi ropa que consistía en: unos vaqueros negros y una blusa suelta color blanca que tenía escrito 'People Scare Me' la eh robado de las cosas perdidas así que no importa de quien sea. Por que ya es mía. Tome mi ropa interior y me cambie rápidamente.

No me peine ni nada. Sólo me deje el cabello suelto y me puse mis vans de diario color negro. Tome mi mochila y salí de la habitación cerrándola detrás mío.

Me encaminó a la cafetería cuando me detengo totalmente. . .

Mi gato. No lo vi salir de su casa. Me voltee y comienzo a correr hacia mi habitación que ya estaba lejos pues ya casi llegaba a cafetería.

-Ouch.—dije levantándome del suelo y viendo a la persona con la que había chocado. Un Friki Fresa Popular  O como yo los llamo. Un descerebrado.-fijate por donde avanzas.- me quejé comenzando a caminar pero el se levanta y me toma del brazo. Lo que me faltaba.

Una Pequeña Mentira. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora