-¡Niño! ¡Hey niño despierta!- escuchaba una voz débilmente a mi lado.
-¿Qué... ¿Qué pasó?- empecé a abrir mis ojos y pude ver una silueta borrosa.
-Te desmayaste, eso pasó- cuando abrí mis ojos por completo pude reconocer a esa silueta, era Ethan -. Parece que el viaje te afectó más de lo esperado.
¿Viaje? Ahh ya lo recuerdo, el portal a Neart Dóiteáin- ¿Por qué mierda había tanta presión ahí dentro?
-Porque un portal es una dimensión dentro de otra.
-No me estás explicando mucho- le respondí tratando de incorporarme.
-Es como un agujero negro, la gravedad aumenta de forma aplastante.
-Sería imposible moverse.
-Cierto, pero en los portales solo aumenta unas dos o tres veces. Mientras más fuerte te hagas más podrás soportarlo, ¿te sientes bien?
-Un poco mejor gracias, ¿y mis maletas?
-Ya están en tu habitación.
-¡Wow son rápidos!
-Bueno en tres horas se puede hacer mucho.
-¿Tres horas?
-Es el tiempo que estuviste inconsciente.
-Maldición ¿en serio?
-Te lo dije, te afectó más de lo esperado.
Me ayudó a levantarme (aunque aún me tambaleaba un poco) y me guió hasta las habitaciones de Neart Dóiteáin.
A diferencia de Shadow Gate que parecía una fortaleza Neart Dóiteáin parecía casi un castillo o una gran catedral decorada con baldosas y mosaicos carmesí, una vista verdaderamente hermosa.
Al llegar a las habitaciones vi que las de aquí tenían puertas de madera tallada como las habitaciones de un castillo- Aquí te quedarás- me dijo Ethan señalando una de las puertas-, ya todas tus cosas están ahí. No te pongas muy cómodo, debemos seguir con tu entrenamiento.
-¿De verdad?- debieron de ser las nueve de la noche, ¿de verdad íbamos a continuar con el entrenamiento?
-Sí, de verdad, así que muévete.
-Entonces déjame por lo menos cambiarme.
-Enviaré a alguien por ti, tienes cinco minutos- bueno por lo menos tengo algo de tiempo para desempacar.
Esta habitación se parece a la que ocupé en Shadow Gate, aunque era un poco más grande; tenía su televisión y una colección de libros más o menos grande acomodada en una esquina. Mientras terminaba de acomodar mis cosas me cambié de ropa y me puse algo más cómodo, terminando de cambiarme alguien tocó a la puerta- pase- le indiqué y entro una muchacha muy hermosa.
-¿Qué hay novato?- era un poco más baja que yo, tenía el cabello corto hasta el cuello y en punta, y una bella cara casi angelical.
Me quedé casi sin habla- Ho-Hola soy Mark Romero.
-Hmph un placer, soy Alejandra de los Ángeles, la teniente de aquí.
¿Teniente? ¡Wow! Primero Allison que era bella y ahora ella ¿todas las tenientes serán así de lindas?- Si ya estás listo mueve tu culo y sígueme a la Sala de Entrenamiento- wow, eso fue un poco rudo-. Yo no soy una dulce niña como Allison, yo no dudaré en hacerte escupir sangre y recoger tus dientes novato; ahora ¡muévete!
No dudé en hacerle caso, no sabía si lo que decía era cierto o solo quería asustarme pero decidí no desafiarla- Y... ¿de dónde eres?
-De Venezuela igual que tú.
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La Ultima Guerra - PAUSADA
FantasyEsta obra habla sobre Marcel Romero, un joven como cualquier otro que se siente atraído a la mitología sin razón aparente, un día descubre un antiguo libro que tiene la historia de los hechiceros y una guerra que se suscita entre ellos, al leer este...