CAPÍTULO VIII - El Juramento

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-¡Niño! ¡Hey niño despierta!- escuchaba una voz débilmente a mi lado.

-¿Qué... ¿Qué pasó?- empecé a abrir mis ojos y pude ver una silueta borrosa.

-Te desmayaste, eso pasó- cuando abrí mis ojos por completo pude reconocer a esa silueta, era Ethan -. Parece que el viaje te afectó más de lo esperado.

¿Viaje? Ahh ya lo recuerdo, el portal a Neart Dóiteáin- ¿Por qué mierda había tanta presión ahí dentro?

-Porque un portal es una dimensión dentro de otra.

-No me estás explicando mucho- le respondí tratando de incorporarme.

-Es como un agujero negro, la gravedad aumenta de forma aplastante.

-Sería imposible moverse.

-Cierto, pero en los portales solo aumenta unas dos o tres veces. Mientras más fuerte te hagas más podrás soportarlo, ¿te sientes bien?

-Un poco mejor gracias, ¿y mis maletas?

-Ya están en tu habitación.

-¡Wow son rápidos!

-Bueno en tres horas se puede hacer mucho.

-¿Tres horas?

-Es el tiempo que estuviste inconsciente.

-Maldición ¿en serio?

-Te lo dije, te afectó más de lo esperado.

Me ayudó a levantarme (aunque aún me tambaleaba un poco) y me guió hasta las habitaciones de Neart Dóiteáin.

A diferencia de Shadow Gate que parecía una fortaleza Neart Dóiteáin parecía casi un castillo o una gran catedral decorada con baldosas y mosaicos carmesí, una vista verdaderamente hermosa.

Al llegar a las habitaciones vi que las de aquí tenían puertas de madera tallada como las habitaciones de un castillo- Aquí te quedarás- me dijo Ethan señalando una de las puertas-, ya todas tus cosas están ahí. No te pongas muy cómodo, debemos seguir con tu entrenamiento.

-¿De verdad?- debieron de ser las nueve de la noche, ¿de verdad íbamos a continuar con el entrenamiento?

-Sí, de verdad, así que muévete.

-Entonces déjame por lo menos cambiarme.

-Enviaré a alguien por ti, tienes cinco minutos- bueno por lo menos tengo algo de tiempo para desempacar.

Esta habitación se parece a la que ocupé en Shadow Gate, aunque era un poco más grande; tenía su televisión y una colección de libros más o menos grande acomodada en una esquina. Mientras terminaba de acomodar mis cosas me cambié de ropa y me puse algo más cómodo, terminando de cambiarme alguien tocó a la puerta- pase- le indiqué y entro una muchacha muy hermosa.

-¿Qué hay novato?- era un poco más baja que yo, tenía el cabello corto hasta el cuello y en punta, y una bella cara casi angelical.

Me quedé casi sin habla- Ho-Hola soy Mark Romero.

-Hmph un placer, soy Alejandra de los Ángeles, la teniente de aquí.

¿Teniente? ¡Wow! Primero Allison que era bella y ahora ella ¿todas las tenientes serán así de lindas?- Si ya estás listo mueve tu culo y sígueme  a la Sala de Entrenamiento- wow, eso fue un poco rudo-. Yo no soy una dulce niña como Allison, yo no dudaré en hacerte escupir sangre y recoger tus dientes novato; ahora ¡muévete!

No dudé en hacerle caso, no sabía si lo que decía era cierto o solo quería asustarme pero decidí no desafiarla- Y... ¿de dónde eres?

-De Venezuela igual que tú.

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⏰ Última actualización: Sep 29 ⏰

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