Cap.3 "Contando penas"

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Aquella noche, pasé a buscar a Hunter a su casa, iríamos al hotel Blue Sky. Era cinco estrellas, se encontraba situado -por suerte- fuera de la ciudad. En Doncaster.

Al llegar a su casa, toqué el timbre, pero por lo visto no se encontraba. Decidí llamarlo a su móvil.

-¿Bueno?-contestó después de dos timbres

-Hunter...estoy en tu casa. Se suponía que iríamos al Blue Sky. ¿Dónde estás?-dije frustrado.

-Oh,maldición...lo olvide. Pero...si quieres pasa por mi, estoy en casa de Lena...-a pesar de estar al otro lado de la linea, podría jurar que estaba sonriendo al pronunciar el nombre de su novia. Yo rodeé los ojos.

-¡agghh!...okey...voy para aya-sin esperar respuesta corté la llamada. Di la vuelta al coche y entré en el. Aceleré y me puse en marcha. Encendí la radio. Pero no había nada interesante en ninguna estación. Así que conecté mi ipod y elegí la canción Asleep de The Smiths. Quería relajarme un poco de la tención de todo este día.

Entré en el edificio donde vivía Lena. Toqué la puerta. No habrían.

-¡genial!-exclamé alzando las manos en señal de enojo. Justo cuando me iba a ir, se abrió la puerta principal con un Hunter muy despeinado y demasiado sonriente. No tenías que pensar mucho para saber lo que estaban haciendo ese par de tortolos. Lo miré incrédulo, con una ceja levantada y conteniendo la risa.-¿enserio?

Me golpeó el brazo con su puño- Tenía que aprovechar el tiempo en lo que tu llegabas, ¡¿verdad amor?!- lo último se lo gritó a Lena que, se encontraba en su habitación. Y volteó con una sonrisa de satisfacción. En respuesta solo se escuchó la risa de su novia.

-Joder Hunter, ¡¡apúrate!!- puse los ojos en blanco.

Ya en el Blue Sky, entramos en el mini bar, donde se permitían a todo público aunque no se encontraran hospedados en el hotel. En la entrada, enseguida visualizamos la barra y nos dirigimos a esta, pedimos solo una cerveza para cada uno, tampoco planeaba llegar inconciente a casa.

-Entonces, ¿qué harás?- preguntó mi amigo mirando a la pista de baile.

-¿Qué haré de qué?- estaba confundido debido a que no sabía a que se refería.

-Herencia...matrimonio...2 años...¿te suena?

-Ummm...no lo sé. Se que sonará ridículo, pero no me quiero casar con alguien a quien no quiero.- dije un poco nervioso, esperando a que Hunter se burlase. Pero no lo hizo, solo me palmeó el hombro asintíendo compadecido.

-Uyy amigo.- inhalo aire- agradezco de verdad que mi padre no fuera hijo de la reina- fingió estremecimiento.- La ventaja de esto es que en dos años puedes encontrar a tu "media naranja"- hizo comillas con las manos. Dándome ánimos.

-No lo creo. -bufé- Todo esto es más difícil de lo que imaginé. -tenía la cabeza gacha. Pero al querer olvidar mi horrible situación, en tono burlón dije: -¿Lena no tendrá una amiga, así bien guapa, que quiera ayudar a un príncipe a salvar su herencia?

-Seguro que sí-contestó sonriendo. Él me conocía y sabía que trataba de cambiar la situación, burlandome de esta.

Apróximadamente permanecimos hasta las 3 de la madrugada platicando de mis penas como príncipe. Y Hunter me comentó que tendría vacaciones todo este mes. Así que no iría a ninguna misión por el momento. Pero claro, Lena me robaría a mi mejor amigo.

Dejé a Hunter en su departamento, y me dirigí a casa. En la reja de seguridad, Gim Salió  a mi encuentro. Maldecí en voz baja, ya que lo más probable era que le anunciara a papá las horas en las que estaba llegando. Y esto traería consigo un enorme interrogatorio acerca del lugar en donde me encontraba esta noche. A veces me trataban como un crío. Y esto me cabreaba.

Creí que estaría Matt, el era un buen amigo de Hunter y mio, y no decía nada de mis horas de llegada. En cambio Gim, era un maldito entremetido.

Venía caminando a paso moderado con su lámpara de mano alumbrando mi audi. Por su gesto burlón, sabía que estaba esperando la hora en la que me interrogaran como a un niño. Vestía, como todos los guardias del castillo, un pantalón negro, chaqueta y botas del mismo color.

-¿Príncipe Lawrence que hace llegando a estas horas?- joder, si no estuviera trepado en el auto, ya le hubiera propinado un golpe en esa cara tan frentuda. Pero como siempre, contesté con modales.

-No me apetece hablar de eso, y de todos modos usted sr. Gim, no tiene derecho de inmiscuirse en mi vida. En dado caso sería mi padre el que debería presentarme este interrogatorio.-dije con tranquilidad, no dejando ver mi furia.-Ahora, haría el favor de abrir la reja. Necesito descansar.-dije con autoridad. Este al ver que hablaba en serio, asintió avergonzado. Y entro en la caseta de mando y con un botón técnico, abrió la reja de seguridad. Inmediatamente aceleré el audi y entre en el enorme estacionamiento.

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Primero que nada, perdón por haber tardado en subir cap. no había tenido el tiempo para hacerlo. Espero y les este gustando esta historia. Pronto entenderán el título. Paciencia pequeños saltamontes ;) ya falta poco para que conozcan a otros personajes demasiado importantes.

Como siempre, espero y anden bien.
Un saludo desde Cancún, Quintana Roo. México ;)

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