Epílogo.

50 12 6
                                    

Sentado frente a su escritorio, con documentos abiertos por doquier, completamente "ordenados" dentro del desorden del hombre, el oficial Lucas Ramírez estaba al borde de la desesperación.

—Esto no tiene sentido —dijo, frustrado.

Definitivamente no era lo que él quería para su carrera. Un caso sin resolver.

Volvió la vista hacia sus anotaciones por lo que se sentía que era la milésima vez esa noche.

__________________________________________
COSAS EXTRAÑAS.

1. Las pastillas para dormir. ¿Sabía Miguel Vega que la cantidad que estaba tomando podía dejarlo en coma?
2. Si no lo sabía, ¿significa eso que fue drogado?
3. ¿Por quién? ¿Su novia? ¿El asesino?
4. ¿El asesinato fue cometido a las dos con trece como muestra el video al asesino irrumpiendo en la habitación?
5. ¿Murió antes?
6. ¿Murió debido a qué?
7. ¿Era un hombre pequeño o una mujer bajo la ropa?
8. ¿Isaac Lasserre?
9. ¿Fue apuñalado por más de una persona?
10. ¿Qué otra explicación pueden tener sus heridas?

__________________________________________

Si analizaba punto por punto, encontraba por lo menos tres o cuatro para los que no tenía ni la más mínima idea.

Según la novia, Miguel tomaba pastillas para dormir cada noche, así que es poco probable que tuviera una sobredosis, lo que descarta la hipótesis de que el chico se haya tomado la cantidad que apareció en su sistema; lo que abría la puerta a la conclusión de que había sido drogado y a eso se debe la ausencia de lucha. Pero así como abre esa puerta, llegamos al punto tres: ¿Drogado por quién? ¿Por su novia? Puede ser, pero no hay pruebas. ¿Por el asesino? A menos que el asesino sea la novia... Las copas fueron entregadas por el personal de hotel que entregó el servicio de habitación.

Alguien entra a la habitación a las dos con veintidós. Sale media hora después y se adentra en el pequeño bosque que rodea las cabañas, pero hay un muro de concreto con cercado eléctrico que descarta la idea de que el alguien haya salido del hotel por esa vía, sin embargo, no hay nadie más en el video, salvo el guardia de seguridas, que hace la ronda a las cuatro treinta de la mañana y no se cruza en ningún momento con el intruso.

Según el informe forense, hay heridas que fueron causadas postmortem, lo que sugiere que quizás el alguien entró y apuñaló el cuerpo sin vida de Miguel, que ya se encontraba muerto debido a la sobredosis de somníferos. Ahora, cabe la pequeña posibilidad de que Miguel estuviera vivo, muy drogado pero vivo, y el asesino lo apuñalara. Y luego volviera a hacerlo, pero eso no tiene mucho sentido. Quedarse más tiempo del necesario lo arriesgaba a ser descubierto por la novia de Miguel, quien no había forma en que el asesino supiera que también tomaba somníferos.

Pasados al punto siete, no había forma de saberlo. Según la novia del chico, había escuchado una voz masculina maldecir (o como ella lo llamó ¡zanahorias!) a muy bajo volumen, pero que ella pensó que era parte de un sueño, ya que, cabe destacar, estaba bajo la influencia de un somnífero y por más que lo intentara no podría despertarse.

Isaac Lasserre es un vacío en todo esto. El tipo no pinta en ningún lugar, sin embargo, parece ser el meollo del misterio. ¿Por qué rentar una cabaña y no aparecer?

Nueve y diez. Otro agujero en la investigación.

Había visto no menos de veinte veces el video de vigilancia de esa noche. Vió a Miguel Vega entrar en la habitación con su Nina Gálvez, su novia, y no salir de allí. Vió al señor José Díaz tocar la puerta y entregarle a Nina la bandeja con un poco de comida y el par de bebidas. Vió al vigilante dar su ronda de medianoche, acompañando a Jade Villazan (la mujer que estaba en la cabaña de enfrente) hasta su puerta y luego la luz de la televisión de esta encendida se ve en el resplandor en la ventana. El intruso aparece de la nada en el pasillo de la cabaña de Miguel a las dos con veintidós de la madrugada, fuerza la puerta, entra y sale media hora después para adentrarse en el bosquecito. La luz de la televisión de Jade Villazan se apaga a un cuarto para las cuatro de la mañana. El vigilante hace su ronda de las cuatro de la mañana. A las seis trece de la mañana sale Nina Gálvez corriendo de la habitación.

__________________________________________
SOSPECHOSOS.

Nina Gález: Novia. Cabaña n° 14-1, piso superior.
Coartada: Dice haber dormido toda la noche bajo influencia de somníferos. El examen sanguíneo confirma su uso durante la noche del crimen. Dice que cree que escucho a un hombre hablar en voz baja en su habitación.
Pruebas contra ella: Ninguna.
Circunstancias sospechosas: Estaba en el lugar del crimen mientras el crimen ocurría.

Jade Villazan: Cabaña n° 15-0 (frente a la cabaña del asesinato), piso inferior.
Coartada: Según video de vigilancia, llegó a su cabaña a media noche (apoyada por el guardia de vigilancia), jamás dejó la cabaña hasta hacer check out cerca del las diez de la mañana del día siguiente. Se ve el resplandor de la televisión hasta casi las cuatro de la madrugada. Dice haber oído pasos.
Pruebas contra ella: Ninguna.
Circunstancias sospechosas: Ninguna.

Isaac Lasserre: Cabaña 14-0, piso inferior.
Coartada: Ninguna. Jamás llegó (según registro en video de la cámara de seguridad y registro administrativo).
Pruebas contra él: Ninguno.
Circunstancias sospechosas: Renta de una cabaña para no usarla.

José Díaz: Personal laboral del hotel.
Coartada: Ausencia en la escena del crimen luego de dejar el servicio a la habitación.
Pruebas contra él: Ninguna.
Circunstancias sospechosas: La cantidad de somnífero en la bebida.

__________________________________________

Todo aquello era un rompecabezas sin duda alguna, y ninguna pieza encajaba con la anterior. El crimen tenía apariencia de haber sido cometido por alguien que sabía muy bien lo que hacía. No había nada incriminatorio que apuntara directamente a alguna de las personas que estaban (o debieron haber estado) en los alrededores cuando el asesinato se llevó a cabo. Nada.
Con un suspiro frustrado, cargado de la más pura resignación, el Oficial Lucas Ramírez cerró su libreta de anotaciones y apagó la luz de su puesto de trabajo al levantarse. Con rapidez, tomó sus objetos personales y se retiró a su casa.

Cada policía tenía un caso así: enigmático e imposible de resolver. Por fin se había convencido de que el asesinato de Miguel Vega sería la gran "Dalia Negra" de su carrera.

--
Dedicada a Annandthecorpse

Cómo Asesinar A Tu Novio #HistoriasDeMuerte Donde viven las historias. Descúbrelo ahora