Ángel :
Un hogar roto,
alcohol y
droga,
fue todo lo que necesité
para llegar a donde estoy hoy.
Para llegar a lo que soy hoy.
Un vagabundo
sin una casa
para refugiar su corazón
de la incesante lluvia,
de esa eterna lluvia.
Dios, siento que me inundo.
Almas de brillo desgastado
pasan con prisa frente mía,
sin tener ni idea de nada
por lo que he pasado,
sus rostros me muestran
la repugnancia
que les produzco.
Bueno,
solo ellos pueden revelarme como soy,
llevo años sin mirar hacia un espejo.
Solo tú me miraste
sin hacerme pensar
que era un monstruo.
Por unos segundos,
esos en los que tardaste
en pasar de largo,
me sentí...
Me sentí, simplemente.
Por eso te escribo a ti
esta triste despedida.
Aunque no te vuelva a ver,
ni vayas a leer esto, claro,
gracias por considerarme
una persona.
Solía pensar
que al morir
era cuando nacíamos
por primera vez,
en un lugar cálido,
ya que antes de irnos
ya habíamos muerto hace tiempo
acabando transformandonos en
tristes marionetas sin vida,
pero quizás
siguen habiendo ángeles como tú,
inmortales en este mundo,
y en el siguiente.
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Sempiterno
PoetryEn un lugar del bosque, vuelan miles de cartas, cartas sin destinatario jamás leídas, cartas escritas por fantasmas cuyos demonios terminaron consumiendo hasta acabar dejando de existir...