Sempiterno

Violet (I)

Recuerdo la primera vez que te vi. Sí, claro que lo recuerdo. Como si hubiese sido ayer.

Era una tarde nublada y quizás un poco tétrica. Con todos los árboles sin hojas adornando sus brazos, desnudos, mostrando avergonzados aquellas ramas esqueléticas que se movían incesantes con el viento.

Caminaba sin rumbo por aquellas calles vacías hasta acabar en la orilla del mar.

Y allí estabas tú. Subida en aquel saliente rocoso. Las olas chocaban bruscamente contra las afiladas rocas.

Vi la decisión en tus ojos, mezclada con la más infinita tristeza.

- Yo que tú no haría eso. - te dije, a lo que te giraste y me miraste.

- ¿ Y por qué no?

- Tiene pinta de ser doloroso...y mortal.

- Eso no me importa.

- Ya, pero a mí sí, chica suicida.

Frunciste el ceño, sin decir nada. Ni siquiera me miraste.

Pero diste media vuelta y te fuiste lejos de aquella playa.