#5: Wait the apartment!

11.2K 502 83
                                    

a r i a.

No sé si era yo, o algo se estaba quemando.

Ya eran casi las dos de la tarde y me acababa de levantar, (¿ven lo que les digo?), salí rápido de mi habitación para ver porque tanto ruido y el porqué de ese olor.

-¡Ah! -Chilló Rachel desde el baño.

Corrí hacia allá, para ver lo que pasaba.

-¡Rachel!, ¿qué está pasando aquí? -Grité preocupada al ver a mi amiga tratando de apagar el fuego.

-¡La secadora, hizo PUM! -Dió un salto, al ver que la toalla estaba prendiendo fuego y salió corriendo del baño para aventar la toalla al sillón.

-¿Como qué hizo pum? ¡Rachel, el sillon! -Hablé alterada al ver que el sillón empezaba a incendiarse también.

-¡Te explico luego! ¿Ok? Tu solo ayúdame a apagar esto.

Después de eso, Rachel y yo tratamos de apagarlo, en un intento inútil ya que el sillón había acabado con toda la sala, hasta que tuvimos que salir por la cantidad de humo que había en el lugar.

Que forma tan estúpida de incendiar un lugar.

★ ✩ ★ ✩ ★ ✩

-Eso es ridículo, Rachel.

Estábamos las dos, junto con otras personas en el vestíbulo del edificio, mientras que los bomberos se encargaban de apagar el fuego del departamento. Jack, Caspar y Finn también estaban con nosotras, pues habían sacado a todos los que vivían en el mismo pasillo que nosotras.

-¡Así fue como pasó! -Dijo Rachel un poco alterada.

-Explícate mejor, Rachel. ¿Cómo que la secadora hizo pum? -Habló Finn, calmado.

-Pues, estaba secando mi pelo, porque si no lo hago se electrifica y se pone feo, y eso no estaría bien porque...

-Rachel, al punto. -Reclamé.

-Okay, lo siento. Entonces, ¿en qué me quedé? -Paró un segundo para después continuar hablando. -Ajá, estaba secando mi pelo y empecé a notar que algo olía mal, así que dejé un segundo la secadora, cuando la volví a tomar, me di cuenta de que estaba muy caliente, hizo corto circuito y en un acto involuntario la aventé y calló en la tina, y se empezó a incendiar, traté de apagarlo pero cada vez se hacía mas grande y me acabé las toallas, ya que todas terminaron incendiandose. -Terminó Rachel soltando un suspiro.

Afortunadamente, antes de que nos salieramos del lugar, alcancé a tomar casi toda mi ropa y la aventé a mi maleta, y Rachel hizo lo mismo.

-Ay, Rach. -Suspiré. -¿Ahora qué vamos a hacer? -Rachel se encogió de hombros haciendo una mueca. Debe de estar sintiéndose muy mal.

-Pueden quedarse con nosotros. -Ofreció Jack sonriendo.

-¿Nosotros? Yo para que voy a querer eso, con soportarte a ti tengo suficiente. Harán estorbo nada más. -Se quejó Finn.

-Eso es cierto, Jack. Vamos a hacer estorbo. -Asentí.

-No, no es cierto.

-Si, si es cierto. -Interrumpió Finn. -Déjala, en fin es otra más que te rechaza.

-Callate. -Dijo Jack.

-No me vuelvas a callar.

-Te callo si yo quiero, soy el mayor. -Dijo Jack y Finn rodó los ojos.

-Por un minuto... idiota.

-Calmense, no peleen. -Intervino Caspar.

-Me importa un carajo lo que tu me digas. -Dijo Finn y Caspar le hizo una seña obscena con su dedo corazón y provocó que el riera escaso de humor.

-¿Podrían calmarse? -Pedí yo, no queriendo seguir presenciando esto.

-Cómo si tuviera que hacerte caso, no me conoces, ni yo a ti.

-Eh, relájate, Finn.

-A la mierda, yo me voy de aquí. -Dijo Finn levantándose de su lugar para salir por la puerta.

Este chico tenía problemas.

Minutos después, los bomberos bajaron y nos dijeron que el apartamento había quedado hecho un desastre y que tendríamos que buscar otro lugar para quedarnos.

Después de tanto insistir y que Rachel me dijera que no me hiciera la difícil, terminé aceptando y nos fuimos a instalar a su apartamento.

El departamento de Jack y Finn era más grande que el nuestro, aparte, este tenía dos pisos.

-Chicas, se pueden quedar en esa habitación. -Dijo Jack señalando una esquina del segundo piso.

Caspar ya se había ido a su departamento, así que nos quedamos nosotros tres.

Las dos asentimos y le dimos las gracias para después subir a nuestra futura habitación.

Era un poco espaciosa, con dos camas matrimoniales que casi chocaban en las esquinas y un closet de cada lado para cada una.

Dejamos nuestras maletas al lado de la que sería nuestra cama y empezamos a sacar nuestra ropa para acomodarla en un armario.

-Bueno, yo me iré a dar una ducha. -Dijo Rachel caminando hacia la puerta cuando terminó de acomodar todo. -Ah, y Aria, lamento lo que paso. -Dijo deteniéndose en el marco de la puerta.

-No te preocupes Rach, no fue tu culpa que hiciera cortocircuito. -Le sonreí de lado y ella salió de la habitación.

Luego de unos minutos, salí del cuarto y bajé hacia la sala donde Jack estaba usando su laptop y llevaba puestos unos lentes.

Me senté junto a él y me volteó a ver.

-Gracias.

-No hay problema. -Alborotó un poco mi pelo y dirigió su mirada de nuevo hacia su laptop. Justo en ese momento, Finn pasó por la puerta y se me quedó viendo.

-Carajo, sí se van a quedar... -Murmuró para sí mismo-. Solo no me molesten, voy a estar en mi habitación. -Subió las escaleras y cerró la puerta de lo que supuse que debía ser su habitación.

-Ookay. -Alargué y giré mi vista hacia Jack.

-El es así, nadie lo entiende. -Asentí.

-Y si no fuera por su actitud en este momento me estaría preguntando si estoy hablando con Finn o con Jack. -Dije y Jack soltó una pequeña risa.

De pronto, empecé a escuchar una melodía, que venía de algún lugar. ¿Qué será eso?

-Es Finn, cuando no tiene nada que hacer se pone a tocar el piano, o en este caso, la guitarra. -Explicó Jack, adivinando mis pensamientos-. El es el músico y deportista de la familia, yo solo soy "el nerd". -Dijo encogiéndose de hombros.

-Oh, de seguro que eres más que eso. -Le sonreí golpeando su brazo levemente.

-No creo. -Hizo una mueca y se me quedó viendo, y luego sonrió.

Se acercó a mi, lentamente, estaba viéndome a los ojos, y yo lo miraba también. Pude notar que tenía unos ojos verdaderamente hermosos. Su nariz estaba tocando la mía, y antes de que pudiera reaccionar, ya había unido nuestros labios en un beso.

Sus movimientos eran lentos y suaves. No sabía porque lo estaba haciendo, pero por alguna razón no lo detuve. Segundos después, Jack se separó de mi, un poco confundido por su acción.

-Disculpa, yo no debí... Ah... -Se paró y se fue, dejándome a mí aún más confundida.

Me levanté y salí corriendo hacia mi habitación y cerré la puerta.

¿Por qué había hecho eso? ¿Por qué se había disculpado? Estaría mintiendo si dijera que no me había gustado. Pero bueno, todo era demasiado raro en este momento. Ahora lo único en lo que pensaba era; ¡Se había robado mi primer beso!

-¿Viste un fantasma o por qué esa cara? -Dijo una Rachel sonriente que acababa de entrar a la habitación.

-Jack me besó.

Editado.

jack & finn harries • descontinuadaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora