Si muero mañana... (Camren)

Capítulo 1

Solía ser una chica normal hasta hace una hora. Tenía uno de los mejores niveles académicos, jugaba para el equipo de Futból de mi escuela y tenía tantos chicos y chicas a mis pies como quisiera. Pero, ¿era muy lindo para ser real, no? Estoy recostada en una camilla en la sala de urgencias de un hospital junto a mis padres y hermanos, acabé de enterarme que tengo cáncer.

UNA HORA ANTES.

Miré el marcador total, íbamos perdiendo por 1 punto frente al equipo de la otra escuela, el entrenador acaba de hacer un cambio de ultimo minuto en el juego y entraré a jugar. El cronometro aún corría y tenía la oportunidad de anotar, empatar el partido y llevar a nuestro equipo a los penales, o simplemente dejar ganar al otro equipo. Todo estaba en mis manos, literalmente; aún recuerdo las palabras del entrenador: "Jauregui es nuestra arma secreta, no la utilizaremos a no ser de que sea necesario". Este era mi momento, era ahora o nunca.

Escuché el silbido del juez central y vi como todos mis compañeros de equipo robaban el balón y hacían pases agilmente a través de la cancha. Iba corriendo pareja a Normani, mi mejor amiga, y nos acercábamos a la cancha de nuestros oponentes. Sentí un dolor en mi pierna izquierda pero no le hice caso, no era algo nuevo así que supuse que sería solamente un mal estiramiento, seguíamos corriendo e intercambiando miradas a través de la cancha con la delantera izquierda de nuestro equipo; cuando sentí un chuzón en mi pierna, como si me hubiesen clavado un cuchillo, caí al césped gritando y sujetando mi pierna, escuché el silbato de nuevo y como todos en las tribunas hicieron silencio.

Los paramedicos me levantaron en la camilla y me dirigieron directamente al hospital. Eso había sido todo, no pude ayudar a mi equipo, no anoté, no nos llevé a los penales. ¡Mierda!

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"Normani: ¿Cómo estás Lauren? El equipo está preocupado por ti." -leí el mensaje de mi mejor amiga y no pude sentirme peor de lo que ya me sentía, mis padres estaban abrazándose los unos a los otros mientras el doctor conversaba con ellos y mis hermanos simplemente me miraban como si ya hubiese muerto.

"Dime que calificamos, dime que anotaste un gol al último segundo, dime que Dinah te asistió. Dímelo por favor." -oprimí la tecla de enviar y esperé por una respuesta de mi amiga.

"Normani: No te puedo mentir Lauren." -¡Mierda! ¡No habíamos entrado a las finales estatales! ¡Y era todo mi culpa! ¡Y del estúpido cáncer! Golpeé la camilla y tiré el celular contra el muro no soportando ver ese mensaje por un segundo más. Cubrí mi rostro con las manos y empecé a llorar, ¿por qué me tenía que pasar eso a mi? ¿Por qué justo ahora?

-Lauren, ¿estás bien? -preguntó mi madre preocupada sentándose a mi lado, secando sus propias lagrimas.

-No... -negué y sorbí mi nariz.- ¿Por qué me tiene que pasar esto? ¿Por qué a mi? ¿Por qué en mi último año? -lloriqueé y mi madre me abrazo.

-Lauren, esto es algo que le puede pasar a cualquier persona. -aclaró el doctor.- Lamento que haya tenido que ocurrir todo en este momento, pero estamos a tiempo de controlarlo, según parece. Sr. y Sra. Jauregui, ¿me acompañan a firmar los papeles de Lauren, por favor?

-¿Papeles? -pregunté dudando mirando entre mis dos padres.

-Lauren, -mi padre se acercó a mi.- el doctor cree que sea mejor que te quedes aquí por un tiempo. -sentí como todo dentro de mi se derrumbo y las lagrimas empezaron a caer de nuevo.

-Shh, tranquila Lauren, se pondrá bien todo. -intentó calmarme mi madre, pero nada funcionaría, no en ese momento...

DOS MESES DESPUÉS.

-Y entonces le dije '¿Cómo puedes estar tan segura?' y me respondió 'Porque te amo.' -finalizó Normani, contandome la historia de como ella y Dinah se habían hecho novias, era algo que veía venir pero, esperaba verlo en persona.

-Eso es genial Mani. -sonreí mientras veía como mi mejor amiga jugaba con la sabana que cubría mis piernas.

-¿Cuándo llegará tu compañera? -preguntó mirando la camilla frente a la mía.

-Se supone que mañana en la madrugada. -ella asintió.- Espero que no sea una viejita. -rió junto a mi.

-¿Imaginas el rostro que haría si te ve besando a Lucy? -rió y yo reí mas fuerte. Lucy era mi novia desde hacía ya un buen tiempo, dos años tal vez y no me había dejado aún después de que le contara sobre mi cáncer.

-Bien, tendrá que soportar, en especial esta noche que viene a quedarse. -ella me miró de una manera indescriptible y yo rompí en risas, su teléfono vibró.

-Es Dinah. -sonrió viendo la pantalla.- Quiere verme ahora, le diré que no...

-Ve. -ella giró a verme y yo sonreí, me besó la frente y salió corriendo de la habitación.

Y de nuevo, sola. Mamá y papá tenían trabajo hasta tarde, y mis hermanos estudiaban así que... en el día mi única compañía era Normani quien saltaba algunas practicas y clases para ir a verme un rato. Lucy llegaría en unas horas, así que no me preocupé demasiado. Tomé mi iPod lo introduje en el reproductor al lado de mi camilla, en menos de 10 segundos las canciones de The 1975 llenaron la habitación y me sentí normal de nuevo, no con un bulto creciendo en mi pierna. No sé cómo ni en qué momento, pero me dormí y me desperté para encontrar a Lucy durmiendo en el sofá y a una chica en la camilla de al frente.

-Hola. -susurró mientras levantaba la mirada de su iPad. The 1975 aún sonaba en el fondo, pero no tan fuerte como antes.

-Ho... hola. -susurré.- Yo no sabía que ya estabas aquí. -miré la hora, 3:50 a.m.- Apagaré la música.

-Dejala. -me detuvo.- Me gusta. -sonreí y giré a ver a Lucy quien dormía profundamente.- Llegó hace un rato, no debe estar tan dormida.

-Gracias, -sonreí a la chica.- hoy tenía turno nocturno parece. No la despertaré.

-Camila, hígado. -la giré a ver confundida.-

-¿Disculpa?

-Mi nombre es Camila, tengo cáncer en el hígado. -explicó.- Se supone que debes presentarte ahora. -añadió después de que no respondí nada.

-Oh, claro. Me llamo Lauren, tengo cáncer en una pierna. -ella asintió y devolvió su mirada a su iPad. Giré a ver de nuevo a Lucy de nuevo y recosté mi cabeza en la camilla, valla.

Ella era hermosa, la luz de la luna decoraba perfectamente su cara, pensar que la vería a diario simplemente me volvía loca, tenerla aquí conmigo... Camila era hermosa y no podía creer que estaba pensando en otra chica que no fuese mi novia.

NOTA: Esta será la trama del fic, espero les guste.