Decimacuarta Cosa

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Camine hacia el centro comercial y fui justo a la tienda del bello vestido, tenía un costo demasiado alto y James no me lo pudo comprar, me entristecí mucho, pero James me compro a cambio unos tacones que nunca utilizaría, pero me hacía ilusión tenerlos.

Y ahí estaba yo, justo en el mostrador donde reposaba el hermoso vestido de encaje negro largo. Y del otro lado del vidrio estaba el cartel con la perfecta caligrafía de James.

Mire tu rostro cuando viste este vestido, esos hermosos ojos verdes brillaban. Por unos segundos tuve envidia del vestido, por saber cuánto lo deseabas.

Bueno cariño, sabes que no soy mago ni nada parecido, pero pedí unos cuantos préstamos y lo logré, el vestido es tuyo. ¿Qué quiero decir con esto? Siempre, siempre, haré lo posible por verte feliz y hermosa. Solo tienes que tener paciencia.

Att; El que ama tus ojos.

P.D: La peluquería de al frente te espera.

Att; El amor de tu vida |Editando|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora