Relatos De Un Hombre 2: aclara la mente y abre la puerta al sexo

15: ESA PEQUEÑA CHICA part. 2

Al día siguiente fui con Lucero de nuevo (perdón pero es que por dios eso que hizo fue simplemente maravilloso) al llegar pasó lo mismo, solo que esta vez su mamá si estaba! Pero salía varias veces (atendía una tienda ) la señora pensaba que era compañero de su hija (cuando yo le ganaba como por 3 años) en fin, procedimos a lo mismo, me empezó a dar un sexo oral maravilloso, hasta que vi la oportunidad y nos fuimos a su cuarto , ella se bajó el pantalón y las bragas y se acostó inexperta en su cama, no sabia como acomodarse, la puse en cuatro y le dije que le podía doler pero lo haría con delicadeza, cuando intente introducir mi miembro en su interior me costó trabajo ¡Dios estaba tan apretada que me puso más caliente! Fui poco a poco introduciéndome dentro de ella y ella lo disfrutaba, cuando estaba por completo ella pego un gemido que tuve que suprimir (por miedo a que su mamá nos descubriera) , empecé a bombearla poco a poco aumentando más la intensidad, ella aprendió rápido porque en poco tiempo tomo el ritmo y empezó a gemir demasiado, su placer aumentaba, le solté una pequeña nalgada y ella solo grito pero se tapo la boca enseguida, después la recosté boca arriba y me pude encima de ella, la clásica "el misionero", besaba sus pezones mientras le daba, ella estaba en pleno extasís, estaba tan mojada, yo ya no resistía, simplemente estaba a punto de acabar, pero no quería que esto terminara así, yo estaba enseñando a la pequeña Lucero a tener sexo! Sus futuras parejas me agradecerían en su momento, me salí de su interior y me relaje un poco, aún no quería acabar, le propuse hacer un 69 y ella dijo que no sabia como hacerlo, que con dificultad y pudo darme sexo oral, le dije como y empezamos a hacerlo, ella se detuvo de repente y en una gran explosión, dejó derramar todos sus jugos sobre mi, ese glorioso primer orgasmo estuvo tan delicioso que hizo que enseguida yo terminara, no en su boca pero si en sus pechos, la vestí rápido y yo también para ir directo a su baño, salí como si nada y su mamá me pregunto dónde estaba Lucero, yo le dije que solo entre al baño, pero había escuchado que Lucero había subido, pero que me tenía que ir.
Después de irme de su casa ella me siguió invitando varias veces pero su mamá se empezaba a dar cuenta que algo pasaba así que decidimos dejar de frecuentarnos