Capítulo 2

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N/A: Creo que tardé bastante en subir este capítulo. Tenía planeado escribirlo antes pero me entretuve con otras cosas y lo acabo de terminar xd

Pero aquí está, y espero que lo disfruten. Otra cosa que quiero aclarar es que yo no sé NADA de medicina ni sobredosis ni nada de esto. La mayor parte es ficticia aunque sí intenté investigar un poco para que no sonara algo sacado de una película de ciencia ficción o demasiado alocado.

Debo decir que no estoy del todo contenta con este capítulo, creo que no logré plasmar bien lo que quería plasmar y eso me enoja, pero después de darle algunas vueltas decidí dejarlo así.

Agradezco sus comentarios a mily, Always1514,Martha AlwaysCB, gonza y guiguita...

Disfruten!


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Había bastante ajetreo dentro del hospital. La fila de la sala de emergencias era larga; los doctores corrían de un lado a otro, atendiendo a heridos, embarazadas, adolescentes borrachos, ancianos con dolores de rodilla, rellenando informes. Desde ahí se podían oír las sirenas de las ambulancias alejarse por las calles. Y Castle se encontraba sentado en una de las sillas blancas con los codos sobre las piernas y la cabeza enterrada en las manos. La camilla había entrado a una velocidad inimaginable y se había perdido tras un par de puertas dobles, dejando a Castle fuera de ellas sin sabes qué esperar.

Había pasado ya bastante tiempo desde que llegó al hospital preguntando por ella, sin respuesta concreta. Nadie sabía el estado en el que se encontraba. La mente de Castle no dejaba de darle vueltas a lo sucedido. Verla ahí, tirada en el suelo de su casa, oliendo a alcohol y sin consciencia lo había dejado nervioso. No era tonto como para no darse cuenta de que Katherine Beckett había tratado de acabar con su vida de una manera indignante y probablemente inmadura. Sí, le había calado que ella no le tuviese la confianza suficiente como para desahogarse con él después de más de 3 años conociéndose. Porque él hubiese movido mar y tierra para ayudarla... porque la amaba. Se lo dijo el día que le dispararon y ella decía no recordar nada. También le había dolido eso, pero no podía obligarla a recordar.

Minutos más de incertidumbre pasaron antes de que el doctor Lehmann saliera preguntando por los familiares de Katherine Beckett. Castle saltó de la silla y se paró frente al doctor señalando que él era su novio. No se le había ocurrido otra cosa, simplemente salió de su boca de manera esporádica y en parte creyó que era lo mejor para que la dejaran estar con ella el tiempo que tuviese que quedarse en el hospital. Además, claro, que esa idea siempre le había hecho ilusión.

- ¿Cómo se encuentra ella, doctor? -Preguntó Castle después de unos breves segundos en silencio, tragando saliva.

-Le voy a ser sincero. No se encuentra muy bien. Ha tenido una depresión miocárdica durante el análisis de su estado -Castle frunció el ceño. No estaba familiarizado con el término, por lo que el doctor tuvo que explicarle-. Depresión Miocárdica se refiere a la disminución de la actividad del corazón por lo que no llega oxígeno al cerebro, creemos que se debió más que nada a la herida que sufrió recientemente -Castle supo que se refería al disparo, porque durante la operación había sufrido un paro, y los doctores debieron de haber visto el expediente de Kate-. Afortunadamente hemos logrado que su cuerpo se estabilice un poco. Le estamos administrando medicamentos vía intravenosa y la tendremos conectada a un respirador artificial mientras esté en observación durante las siguientes 6 horas en Terapia Intensiva. Fue una gran cantidad de desipramina que tomó y acompañada con el alcohol causó un daño aún peor.

- ¿Desipramina? ¿Para qué es ese medicamento? -Preguntó Castle. El doctor se frotó el puente de la nariz antes de contestar.

-Es un tipo de antidepresivo que se obtiene bajo prescripción médica. Es un medicamento delicado.

You Are My Last HopeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora