• Capítulo 11.- Ajuste de cuentas

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G-TOP (G-Dragon & TOP)

• Capítulo 11.- Ajuste de cuentas.

       A la mañana siguiente mi cuerpo apenas respondía al querer levantarme, me levanté perezosamente del sillón de Daesung y con una pluma junto con un papel que encontré en la mesita le dejé un mensaje a mi amigo para después tomar mis cosas y salir de su departamento.
Cuando salí caminé por la calle sacando mi celular y lo encendí muy apenas estaba vivo pues la batería era baja, miré un montón de llamadas perdidas, mensajes de voz y mensajes de texto pertenecientes del celular de Choi.

“¿Dónde estás?”

“¿En dónde estás y con quién?”

“Kwon Ji Yong contesta mis mensajes, me preocupas”

“Maldita sea, ¡Contesta!”

“Maldita sea contesta, no me hagas buscarte. Te irá peor si te encuentro con alguien”

“Me voy a trabajar, tengo cosas más importantes que hacer. Cuando regrese quiero verte en casa”

Y los mensajes eran parecidos, breves, largos y hasta sin sentido. Los mensajes d voz eran igual y las llamadas perdidas eran muchas. Apagué mi celular y dirigí mi vista al frente para seguir caminando, la luz de la mañana calaba en mi vista muy apenas podía ver hasta que me acostumbré dándome cuenta que un auto lujoso me seguía, eso se me hizo totalmente raro, me detuve y volteé a ver para saber de quien se trataba. Lo podía divisar y entonces lo reconocí, era el Gerente pervertido quien estaba vestido muy elegante, un traje de color negro totalmente, un chaleco color vino y una camisa blanca por debajo mientras que en su cuello una corbata rojo vino lo acompañaba. Se acercó a mi y sonrió.
A comparación con él yo estaba hecho un desastre muy apenas me había levantado y salí sin importarme lo tan despeinado que estuviera, lo miré a la cara con tan sólo verlo me causaban escalofríos al recordar lo que él quería de mi.

—Buenos días, Kwon... Te ves muy mal, ¿Que sucedió? ¿A caso tienen problemas en el “paraíso”?— dijo con una sonrisa muy picara pintada en su rostro.

—Eso no le interesa, ¿Que quiere de mi ahora?— dije con completa serenidad.

—Quiero hablar contigo— alzó la mirada divisando a todos observándolos. —Quiero hablar contigo en privado así que sube al auto— se acercó a su auto abriendo una de las puertas. —Vamos, sube—

Subí al auto y el hizo lo mismo, arrancó el auto y me llevó hasta un hotel lujoso, no tenía ni la más mínima idea de lo que estaba pasando sólo tenía un mal presentimiento de todo eso. Detuve el auto y me hizo bajar de él, bajó acercándose a mi tomándome del brazo para caminar junto a él. Antes de entrar un hombre alto y de traje negro que cuidaba la entrada al hotel se puso delante de nosotros y dijo.

—Señor Seung Hyun, ¿Quién es este chico?— dijo mientras que me clavaba la mirada.

—Tranquilo, Jang. Es mi acompañante— dijo Seungri tomando mis hombros y al momento que el encargado nos dejó pasar fuimos hasta el elevador y ya dentro me acorraló al cerrarse las puertas. —¿Por qué te ves así de mal? Exijo saberlo— sus manos estaban a la altura de mi cabeza y su mirada era fija a la mía.

—Yo... Por favor, ya basta...— las lágrimas comenzaron a caer y sólo quería alejarme de él.

—Kwon, dime lo que sucedió. Me interesas demasiado que no puedo parar de pensar en ti, desde hace un año que te conocí apenas tengo el valor para verte y hablarte. Te amo, Kwon. Dime ¿Que te sucedió?, ¿Que fue lo que te hizo ese infeliz?— sus manos tomaron con delicadeza mis mejillas secando mis lágrimas con ellas.

—Usted sólo es un desconocido, por favor déjeme ir— mis lágrimas seguían desbordándose y no podía dejar que un desconocido viera mis heridas y pensara que soy tan patético pero al último terminé cediendo a las dulces palabras que Seungri decía.

Al momento en que el elevador llegó al quinto piso salimos del mismo para caminar por el pasillo y así llegar a la habitación de Seungri, me invitó a sentarme en el sillón de esa habitación tan lujosa, se fue a la cocina dejándome sentado, regresó con dos tazas de café, le agradecí mientras tomaba de la taza y así me di cuenta de todo y yo siempre fui un ciego, TOP me había engañado desde hace tres meses y ahora la actriz con la que estaba está embarazada esperando un bebé de él. Supe todo por que Seungri me mostró muchos periódicos anunciando “el noviazgo” entre esos dos actores y al ver la foto en donde entraban a un motel, los besos que se daban detrás de las cámaras. Me maldije a mi mismo, ¿En serio fui tan ciego? ¿Tan estúpido? Las lágrimas comenzaron a salir y seguía maldiciéndome internamente. En verdad quiero saber si tenía algún retraso mental para no saber lo que era más obvio, sus llegadas a casa tan tarde y cuando me evadía con un “Estoy cansado, mañana hablamos", yo sólo lo observaba ducharse pero había tomado ese hábito desde hace poco y justamente los mismos meses desde que me engañaba, no me dejaba tomar su celular ni contestar sus llamadas por si él se duchaba o si apenas estaba despertando, siempre me veía y se ponía de mal humor.

El día que no olvidaré fue cuando llegó del trabajo, me tomó fuerte de la cintura haciendo que me golpeara contra la mesa y yo al negarme pues él estaba siendo muy brusco, me tiró al suelo y me desvistió salvajemente tomando mis muñecas mordiendo mis labios fuertemente haciéndolos sangrar poco y él seguía lamiendo mis labios, comenzó a violarme, no sabía que era lo que le sucedía. Cuando terminó me dejó en el suelo estando cansado y sudado, se fue a duchar sin importarle los moretones o las mordidas que en mi cuerpo había dejado, después me levanté para cubrirme de esa mirada fría y en vez de un ¿Estas bien? ¿Te duele algo? Sólo me dijo: "Date un baño, estás muy sucio. Apestas a sudor"

Al entrar a la regadera comenzaba a llorar sintiéndome tan miserable y así eran los días siguientes, me sentía como una mujer obligada a entregar su cuerpo a su acechador mientras que era cegado por los afectos que daba después de almorzar o al llegar a comer, siempre me daba un beso, una rosa, o un abrazo de despedida y yo volvía a caer en sus trampas. En serio soy tan patético.

Salí de mis pensamientos y abracé a Seungri ocultándome en su pecho, sus manos rodearon mi cintura y me dijo mientras me alzaba el rostro tomándome tomándome del mentón. —Pensé que ya lo sabías... Lo lamento tenía que decírtelo, pues no soporto que ese imbécil siga causándote dolor— me soltó y tomó mis dos manos. —Por favor, déjame ser quien cuide de ti. En verdad, sé que al principio te tomé como un juego y una simple diversión pasajera pero simplemente te volviste algo que quiero y no soporto que alguien como él pueda tenerte y no te valore... Eres una persona única— me miró con ternura pero fue más la tristeza que reflejaban sus ojos.

Mi vista se nublaba al dejar salir mis lágrimas y lo abracé, él no se negó, me abrazó con tal fuerza que se sentía tan confortante. Me llevó hasta la cama en donde me recosté, besó mi cuello con dulzura y acariciaba mi cuerpo, sé que esto es muy sucio y estoy siendo consolado de la manera equivocada pero fui engañado con quien sabe cuantas mujeres más, así que merezco divertirme como mi muestra, la muestra de una dulce venganza.

Continuará...

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