Capítulo IV.

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-¿Cómo está?

-Grave y en el quirófano, nadie cree que lo consiga... Al menos conseguí mi móvil...

Íñigo permanecía neutro ahí parado sin hacer nada hasta que Alberto le abrazó y empezó a llorar.

-No quiero que muera... No quiero.

-Lo conseguirá venga suéltalo todo anda.

-No es justo es demasiado joven no quiero que muera no ahora.

Alberto seguía consolándole y le secaba las lágrimas... E Íñigo le dio un pico.

-Gracias...

Íñigo soltó una media sonrisa y Alberto estaba confundido, no sabía qué acababa de pasar.

-¿Algunas noticias?

-¿Eh?

-¿Eh? Que si hay algunas noticias sobre Cristo.

-Ah, no, bueno sí, bueno no, no sé, lo sabe Íñigo.

-Joder cariño ¿te pasa algo?

-No no es que necesito despejarme un poco.

-¿Te acompaño?

-¡No! Cari no, déjalo solo necesito dar un paseo solo y despejarme.

-Vale...

Alberto se fue por el pasillo de urgencias apresurado y todavía confundido, esa reacción había dejado a Pablo inquieto y preocupado, miró a Íñigo algo sospechoso.

-Eeerr... Está grave y no creen que lo consiga.- Íñigo apartó la mirada.- no quiero que muera...

-Yo tampoco, es demasiado joven y eso que dijo... ¿Tú sabes algo?

-No, se lo mismo que tú.

-Pero te peleaste con él por algo, ¿qué sabes de él?

-Nada...

-Mientes. -Pablo encerró a Íñigo contra la pared apoyando sus manos por encima de los hombros del chico.- ¡¿Qué sabes sobre él?!

Eso asustó un poco a Íñigo y le recordó a Cristo de alguna forma, tampoco sabía por qué se interesaba tanto ahora por ese chico.

-Nad...

-Deja de mentirme.- le cortó Pablo.- Está claro que sabes algo.

-No shabe nada, déjale en paz.

Los dos miraron a la puerta de urgencias. Era Ras con... ¿Una long? ¿Os imagináis a Rajoy en long? Porque yo no pero ahí estaba Ras, el "clon" de Rajoy con una long, converses rojas, vaqueros desgastados negros, una camisa de cuadros roja y una gorra negra y verde neón.

-Ras...

-¿Ras?

-Shí.

-Qué... ¿Qué haces aquí?

-Crishto no llegaba y me preocupé, cuando fui a bushcarlo vi todo este accidente y fui trash la ambulancia.

-Voy a buscar a Alberto ahora venimos.

Pablo fue a buscar corriendo a Alberto y de paso hablar con él sobre la reacción anterior.

-Está... Está grave Ras... No creen que pueda conseguirlo.

-Ha peleado contra una banda de rumanosh sheguro que puede con eshto.

-¿Que qué?

-Ya osh lo dijo cuando vinishteish la primera vez... Tiene 19 añosh y ya ha malgashtado shu vida entera.

-Entonces le conoces.

-No, pero me contó shu hishtoria un día, shu shueño esh encontrar a shu padre.

-¿Por? Si le abandonó...

-Porque no shabe que tiene un hijo.

-¿Cómo que no lo sabe?

-No... Porque literalmente esh un hijo de puta criado en un mal entorno, no me eshperaba que murieshe ashí. Penshe que moriría de shobredoshish.

-Se droga.

-Y bebe y... A vecesh eshtá demashiado mal y entre el alcohol y lash drogash she autoleshiona. Eshta lleno de traumash por culpa de shu madre, traía tíosh a todash horash a casha y losh gemidosh e insultosh no shon muy buenosh para un niño, ¿shabesh?

-No tenía ni idea...

-También ha eshtado en centrosh y en la cárcel. Mató a un cliente de shu madre porque la agredía, él pobre sholo la defendió de eshe tío.

-Pues menuda pieza.

Pablo y Alberto habían escuchado todo y estaban detrás de Ras.

-¡Pablo!- dijo Alberto dándole un codazo en las costillas.

-Ah... Es la verdad. Espero que encuentre a su padre pronto...

-Ya, pero si su madre era puta pues a ver quién es el padre.

-Pues no sé...

-¿Te hariash una prueba de ADN con él? Ya que osh pareceish tanto...

-Ras tiene razón amor, os parecéis demasiado.

-Bueno tampoco es que pierda nada, vale.

En ese mismo instante el doctor salía del quirófano.

-¿Cómo está doctor?

-Sigue grave, hemos podido salvarle un poco pero sigue muy delicado y no sabemos como reaccionará las próximas 72 horas, estará en la UVI, lo siento pero no podéis entrar a verle o visitarle.

-Gracias, doctor.

-¿Ander?

El doctor se había ido corriendo a atender a otro paciente y la voz de una niña se oyó detrás de Ras.

-Ander, ¿eres tú?

Ras se giró y vio a una niña en silla de ruedas, se quedó confuso, no la podía reconocer.

-Perdona, ¿te conozco?

-Ander... Soy yo Fran.

-Lo shiento no te conozco.

-Soy yo Fran, me conoces y te conozco ¿es que no te acuerdas Ander?

-No... Lo shiento...

Ras o Ander mejor dicho se fue corriendo del hospital, quizá recordaba algo o quizá no pero se fue espantado eso es seguro.

-¿Sois amigos suyo? Yo soy Fran, encantada.

-Igualmente.

Fran se fue de allí como pudo, no era buena manejando la silla de ruedas y los otros tres también se fueron de allí, Pablo seguía sospechando algo y Alberto seguía confuso, ¿de verdad le gustaba a Íñigo o eran imaginaciones suyas? ¿Por qué ahora y no antes de empezar a salir con Pablo?



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