The Dark king

Entrando en la etapa de convertirme en vampiro

Había transcurrido una semana desde mi cumpleaños y estaba en medio de una transformación. Mis colmillos comenzaban a brotar, me había vuelto más fuerte, mis músculos se habían desarrollado y mis ojos habían cambiado de color gris a azul. Mi cabello se había oscurecido y mi piel se había vuelto más pálida. Estos eran los primeros cambios en mi transición a vampiro.

La fase dos, la fase completa de la transformación, estaba a punto de comenzar y eso me preocupaba enormemente. Sin embargo, por el momento, seguía asistiendo a la secundaria.

La carga de trabajo escolar se había vuelto abrumadora. Revén David, mi mejor amiga, y yo estábamos exhaustos. Siempre trabajábamos juntos en nuestros proyectos escolares, y debido a nuestra estrecha amistad, muchos de nuestros compañeros y otros estudiantes pensaban que éramos novios.

Revén, a pesar de su habilidad en los deportes y las artes marciales, parecía preocupada y triste últimamente. Probablemente había notado los cambios en mí y sabía que pronto tendría que alejarme de ella y de la escuela durante unos meses mientras completaba mi transformación.

Entiendo su tristeza. Hemos sido amigos desde la infancia y la idea de perderme, aunque sea temporalmente, debe ser dura para ella. Afortunadamente, sus padres conocen mi situación y han prometido guardar nuestro secreto.

A pesar de mi ausencia, Revén siempre será bienvenida en mi casa. De hecho, la familia David tiene llaves de nuestra casa. Aunque mi transformación me llevará lejos de la escuela y de mi vida normal por un tiempo, sé que nuestra amistad perdurará.

Durante la transición a convertirse en un vampiro, pueden experimentarse varios síntomas. Estos pueden incluir:

1. Cambios físicos: Los colmillos pueden comenzar a crecer y volverse más pronunciados. Además, es posible que se experimente un aumento en la fuerza muscular y una mayor agilidad.

2. Cambios en la apariencia: Los ojos pueden cambiar de color, generalmente de gris a azul o rojo. El cabello también puede volverse más oscuro y la piel puede volverse más pálida.

3. Sensibilidad a la luz solar: A medida que se produce la transición, los vampiros suelen volverse más sensibles a la luz solar. La exposición prolongada a la luz solar puede causar malestar y quemaduras en la piel.

4. Sed de sangre: A medida que la transformación avanza, es común que los vampiros experimenten una intensa sed de sangre. Esto puede ser difícil de controlar y puede llevar a un deseo constante de alimentarse.

5. Cambios en los patrones de sueño: Los vampiros suelen ser más activos durante la noche y pueden tener dificultades para dormir durante el día. Su cuerpo se adapta a un ciclo de sueño invertido.

Es importante tener en cuenta que estos síntomas pueden variar en cada individuo y que la transición vampírica es un concepto ficticio.

En algunas representaciones ficticias de los vampiros, se muestra que durante la transición o después de convertirse en un vampiro, pueden desarrollar un fuerte instinto de protección hacia sus amigos o seres queridos. Esto puede manifestarse en una mayor disposición para luchar o defender a aquellos a quienes consideran importantes.

Sin embargo, es importante tener en cuenta que estas representaciones son parte del folklore y la ficción. No hay evidencia científica que respalde la existencia de vampiros o sus características específicas.