Imperfection.『Ayato Sakamaki』

Capítulo 7

7; Cruel e insensible. [Es casi lo mismo si se trata de Ayato Sakamaki]

- ¡Eres una tonta! - le gritó Ayato enojado.

Nozomi frunció el ceño. ¿Por qué se ponía así? ¡Ella no le había dicho nada malo! o por lo menos no era malo para ella.

- Sólo te dije que tengo un trabajo con Azusa, no es para que te pongas así.

- ¿No es para que me ponga así? - Ayato rió con ironía, mientras caminaba hacia ella-, ¡Tengo todo el derecho de ponerme así! ¡Si vas a donde los Mukami, significara que estará ese sucio inmundo!

- ¡No le hables así a Ruki-san! - chilló Nozomi roja del enojo.

Ayato detuvo su caminar y se le quedó mirando.

- ¿Ruki...san? ¿Ahora te refieres así a él? ¿que más? ¿luego le dirás "Ruki, cariño"? -escupió-, ¡Te he dicho tantas veces que no te acerques a él!

- ¡No es mi culpa que el profesor dijera que me tocaba con Azusa!

- No. - Ayato negó con la cabeza-, No irás. Te quedarás aquí, es una orden.

- Tú no eres nadie para decirme que hacer. - gruñó Nozomi, Ayato la miró profundamente poniéndola nerviosa.

- ¿Crees que alguien te va a querer? - preguntó Ayato con su voz llena de burla-, mírate; nadie te quiere. Eres fea, no, eres horrenda.

«Él no pudo ser capaz de decir eso...por favor, él no pudo decirlo...»

Nozomi sintió una punzada en el corazón; ella sabía que no era linda, solo usaba unos comunes lentes negros y casi siempre tenía ojeras por tanto estudiar y hacer sus deberes. También sus ropas eran comunes y nunca llamaba la atención.

Quizás lo que más llamaba de atención de ella era su cabello celeste, ya que sus ojos eran de un color café común.

- Eres horrible; tu querido Ruki-san no se va a fijar nunca en ti. - siguió hablando Ayato-, no te hagas ilusiones. Una chica como tu nunca llamaría su atención.

- Ayato...cállate. - pidió Nozomi.

- ¿Por qué quieres que me calle? - rió Ayato-, será....¿Por qué sabes que es verdad lo que estoy diciendo? Digo; mírate. Ni siquiera tienes un cuerpo bonito que llame la atención de esos Mukami.

- ¡Entonces dime! - gritó Nozomi con los ojos cristalizados-, ¡Si soy tan horrenda, si nunca llamaría la atención de los chicos! ¡Dime, ¿por qué estas conmigo?! ¿¡Por qué eres mi novio!?

- Quizá...por lástima. - reconoció el chico, extrañado.

- ¿Por lástima? - repitió Nozomi-, entonces...¡No quiero nada contigo! ¡No voy a estar con alguien que este conmigo por lástima!

- ¿A qué te refieres? - preguntó Ayato frunciendo el ceño, sabía lo que significaba...Sólo que no quería escucharlo.

- ¡Significa que terminamos! - le espetó Nozomi de mala manera-, significa que yo ya no quiero saber nada de ti. Significa que lo que te pase me da igual.