Lost soul-BTS [TERMINADA]

013

Es domingo en la tarde, Taehyung me vino a dejar a mi departamento en su auto.
Lo pase bien además de que comimos demasiado. Siento que subí un par de kilos.

Me obligo a prometerle de que si pasaba algo lo llamara. "Si te pasa algo, yo mismo te saco de ahí"
Aveces pienso que es muy sobreprotector.

Me encuentro ordenando todo, desde la última vez que salí, quedo todo hecho un desastre.

Recuerdo que hay una azotea aquí. Tengo mucha ropa húmeda y necesito más espacio donde colgarlas.

Dejo todo lo que estaba haciendo y salgo, subo las angostas escaleras para llegar arriba. Debo admitir que tenía una vista hermosa.
Además de tener tendederos para la ropa, estaban algo viejos. Nadie se molestará  si los ocupo, supongo.

Suspiro.

Bien, iré a buscar la ropa.
Al darme la vuelta choco con alguien, asustada lo miro a los ojos.

-Joder, Jimin, deja de asustarme así.

-Yo, quería...hablar contigo.

-¿Y de qué quieres hablar? ¿De lo que paso el otro día? Descuida, no te molestaré más.

Intento irme pero me toma la mano, quedamos frente a frente de nuevo.

-_____, no es eso, no debí haber dicho eso. No quiero que te vayas.

Miro nuestras manos, aun siguen juntas. Siento culpa por mi manera de reaccionar.

-Oye, disculpa.Fui una estúpida, también fue mi culpa.

-Entonces, ¿Ya no estas molesta conmigo?

-Creo que no-Sonrió un poco.

-No estuviste en todo el fin de semana, No sabes cuantas veces estuve frente a tu puerta esperando. Incluso pensé que te habías ido definitivamente.

-Tú, ¿De verdad?...-Me quedo sin palabras.

Nos quedamos un rato sentados en la azotea mirando la ciudad, las puestas de sol son realmente hermosas.
Tomo mi teléfono y comienzo a sacar fotos.

Jimin estaba mirando todo tranquilamente, perdido en sus pensamientos. Sin que se diera cuenta, le tomo una foto.

Me acerco a la baranda y me paro en ésta. Jimin me mira asustado, estiro mis brazos y siento la fría brisa. Sonrió para mi misma.

Me doy vuelta a verlo y esta sonriéndome. Se acerca a mí y yo me siento en la baranda mirándolo.
Sus ojos brillan con la luz del sol.
Apoya sus brazos en mi cintura haciendo mis mejillas arder.
Se acerca lentamente, siento su respiración chocar con mis labios.

-Tú, también me gustas-Me dice casi en un susurro.

Nuestros labios se rozan lentamente, hasta terminar en un beso.
Con un poco de inseguridad, apoyo mis manos en sus hombros.

Nadie miente cuando dicen que puedes tocar el cielo con un beso.

Nos alejamos un poco para recuperar oxígeno. Me muerdo el labio cuando me sonríe tímidamente.

Me acerco más a él para besarlo de nuevo. Esta vez él me abraza y yo paso mis dedos por su cabello.

A la mierda la ropa húmeda, puede esperar un poco.