Me Enamoré Del Instructor De Zumba

Once

Pasados los días todo era lo mismo, aun no me compraba mis libros de crepúsculo ni nada.
Algo llamó mi atención y fue un mensaje de Bill.

"Hay Espárragos, Los Preparé yo"

¿Por qué tantas mayúsculas? Además de que no había faltas de ortografía, algo muy raro en Vyl ya que escribía de la mierda.

"¿Pasa algo?"

Contesté mientras tomaba mis llaves y salía por la salida de mi casa en dirección a la del oxigenado para ver que era lo que ocurría.

Pues al juntar las mayúsculas daba la palabra "Help" que en inglés es ayuda obviamente estúpidos. Al revés es Pleh que significa Puto.

Pasé a lado de un callejón y tuve que detenerme retrocediendo un par de pasos más antes de quefar boquiabierto, impaktatinochtli ante lo que vi frente a mis ojos.

Doña Silvia besándose con Phillip Cipher, omaiga la otepe.

Me quedé un rato viendo eso ante todo el misterio de Bill y luego eso, el día estaba siendo bastante extraño, ¿Qué más faltaba? Sacudí un poco mi cabeza antes de echar a correr para perder de vista esa escena tan traumática de manoseos entre una vieja gorda y un pelirrojo con fetiches a las muestras de perfume en catálogos baratos.
Llegué hasta la casa de los chicos y toqué la puerta sintiendo como después cubrían mi boca con un paño húmedo de extraño olor y mis ojos comenzaban a cerrarse, vaya día raro, necesitaba al FBI.