El diario de Carolyn

Querido Diario #1

La sesión de hoy no me tuvo lo suficientemente feliz, será porque sigo muy deprimida por mi rompimiento número cuatro con Ian, en realidad no sé porque sigo con él, o más bien no sé porque permití otros dos intentos después de nuestra primera ruptura. Debí dejarlo hace mucho tiempo. Así que la psicóloga Vasilescu me pidió que para tener un mejor control era necesario tomar una agenda y escribir todo esto. Me sugirió que le pusiera nombre, pero la verdad soy una persona muy sencilla, no sé me ocurría como titularte, ella dijo algo así:

—Bueno Carolyn, ese diario no será necesariamente tu mascota o algo así para que te mates pensando en un nombre, de hecho puedes llamarlo como no sé... tu artista favorito o alguna persona que extrañes, de esa manera sentirías que le estás escribiendo todo a él.

¿Una persona que extraño, eh? Bueno, entonces debería llamarte Sherlock.

Sherlock Ravensdale.

Pero no, sería muy deprimente si te llamó así. Entonces te dejaré mejor con "Querido diario"

Papá me dijo que era mejor asistir a esas terapias después de la tremenda pelea y golpiza que sufrí por parte del estúpido de Ian Busher, yo asentí. La verdad es que esto de ser adolescente es más complicado de lo que nos hacen ver en las series de Hollywood.

Yo pensé que había una salida, que había alguien que siempre estaba conmigo y alguien para mí. Pero finalmente desapareció, se fue sin dejar rastro y así se llevó consigo los pedazos de este corazón roto.

Pero en fin, no quisiera hablar de él nunca jamás. Puedo resumirte que no lo conocí en el momento o en el lugar adecuado, de hecho creo sinceramente que lo nuestro no iba para más, fue mi quinto novio y sin embargo yo... fui su primera novia.

Seremos sinceros, nada bueno iba a salir de eso. Sherlock podía darme amor, pero no podía recibirlo, de mi parte claro que sí, pero sino recibes amor propio o amor familiar, no puedes dar amor a los demás. Yo era su ángel, su salvadora y eterna diosa según en sus palabras. Pero me abandonó en el momento que más lo necesitaba, me traiciono, destrozó nuestra confianza. Nunca podré perdonarlo.

Solo espero que en cualquier lugar donde esté, se encuentre bien y feliz. Él merece ser feliz en realidad.

Pero no soy de esas personas que juzgan sin saber el trasfondo de la otra historia, así que mañana mismo lo enfrentaré, cara a cara, tengo muchas cosas que decirle.