Querido Diario #12

14 6 2
                                    

Se supone que debería ser la chica más feliz de la tierra al escuchar eso pero...

Fue todo lo contrario.

Y no fui la única que reaccionó de esa manera.

—Oh que buena noticia ¿No lo crees Sherlock?—dijo Cinthya emocionada.

— ¿Q-qué? P-pero...—oh no había vuelto sus tics— ¿D-e donde son ellos?

—De Washington. Ellos pronto vendrán por ustedes.

— ¿QUÉ?—se alejó de todos hasta la pared de la ventana principal— N-no... no me pueden decir eso ¿Cómo? ¿Nos iremos de Alabama?

Y así volvió todo... paranoias...

—IMPOSIBLE ¡Esos tipos! N-no deben ser nuestros... abuelos... NO

Tricotilomania...

Con sus dos manos agarró dos de sus mechones y los arrancó fuertemente, hasta a mí me dolió.

— ¡Tenemos que regresar a nuestra casa Cinthya!—se arrodilló frente a ella, casi iba a dañarla— ¡No! ¿Quiénes son esos hombres? N-no... no puede ser posible, no quiero, no se puede ¡AYUDA!

—Sherlock tranquilo por favor—me paré frente a él, sostuve sus manos con dulzura.

Estaba al borde del colapso, su rostro estaba tan rojo que iba a estallar en cualquier instante, mordía sus labios, no dejaba de temblar. Nunca lo vi tan mal...

—Mira tienes que calmarte...

Y antes de que pudiera seguir mi discurso, dos enfermeros volvieron a ponerle una inyección, era claramente la anestesia. Esto provoco que se desmayara y... adivinen encima de quién cayó...

(...)

Eran las nueve de la noche. Papá quedó de pasar por mí cuando le dijera y se lo agradecí infinitamente.

Nuevamente volvieron a ponerle las vendas en las manos de Sherlock con tal de que dejara de jalarse el cabello. Me sentí tan decepcionada, había avanzado tanto y todo se fue directo a la auténtica mierda.

—Oh Carolyn—abrió lentamente los ojos—, tuve un sueño horrible.

—Es una realidad—le dije sin darle tiempo para despertar—, tus abuelos vendrán por ustedes muy pronto.

—P-pero ellos viven en la capital... y tú...

—Sherlock, ¡Recapacita!—grité enfadada— No puedes quedarte aquí todo el tiempo. Familia no es solo padre/madre o hermanos ¡Es mucho más que eso! Tu familia son tus abuelos y probablemente haya conozcas a tus primos o tíos pero ¡Súpera esto por favor! No puedes quedarte a mí lado todo el tiempo...

—M-me ¿Me estás abandonando?

—No te funcionarán estos chantajes conmigo. El terapeuta McClane dice que esta es tu sucia táctica. Chantajearme emocionalmente aunque no sea agrede pero ¡Eso haces! No te voy a abandonar ¡Por un carajo!

—P-pero... no quiero alejarme de ti...

—Creo que—le tome la mano—, estás obsesionado conmigo...

—Yo te amo.

—No creo que esto sea amor, Sherlock—dije lo más comprensivamente posible.

—Lo es—empezó a llorar, quería quitarse las lágrimas de sus ojos pero se dio cuenta que tenía los vendajes que imposibilitaban el movimiento de sus manos—. Ay no puede ser.

El diario de CarolynDonde viven las historias. Descúbrelo ahora