009

1.1K 125 19
                                    

ya habían pasado dos horas desde que habíamos cenado. podía sentir la incomodidad en el ambiente, michael no hablabla y parecía concentrarse en mirar mal a su compañero y a la chica a su lado. en cambio, yo me encontraba mirando mis manos en cada momento. oía la conversación animada que mantenía la ex pareja,
-lo que creía que hacía enfurecer a mi amigo-, y no lograba comprender como ocurrió todo.

michael me había explicado, cuando habíamos conseguido un tiempo a solas en la cocina con la excusa de estar pendientes en los alimentos, que calum había ingresado al departamento con rose a sus espaldas. llegamos a la conclusión de que había estado esperando en el estacionamiento y que, exageradamente, le había comunicado a calum su percance con clifford.

"estaremos en mi habitación." michael tomó mi brazo y nos pusimos de pie con un poco de lentitud. no iba a reprochar, quería salir de allí lo más antes posible.

"de acuerdo." murmuró calum que estaba demasiado pegado a rose. "hay helado en la cocina, pearl."

fruncí mi ceño, allí estaba otra vez. desde que había llegado, calum no paraba de llamarme por mi nombre, quiero decir, no había vuelto a llamarme 'p' como usualmente lo hacía. agradecí en voz baja y me aferré más a michael, nos encaminamos hasta su habitación donde cerró la puerta de un golpe.

"estoy cansado, ley." me dijo cuando terminó por acomodarse en su cama, sus manos ocultando su rostro provocaron que las palabras se escucharán más gravemente. él también tenía un nuevo apodo para mi. "no es la primera vez que sucede esto, ¿sabes? rose ha engañado a calum más veces que lo normal."

me recosté junto a él, mi mente era un mar de teorías. estaba asombrada, no pensaba precisamente que ella sea fiel a la relación, pero tampoco tenía en mente que fuera una rompe corazones. comenzaba a creer que era una relación tóxica -y rayos, me había percatado tarde- y que solamente había una cuestión de interés y dolor en todo esto.

"¿cómo se conocieron?" pregunté con curiosidad, quizás si lograba saber sus inicios podría llegar a una conclusión lo bastante realista como para compartirla con michael. siendo sincera, nunca llegaba a algo creíble.

"rose llegó a la ciudad el último año de preparatoria. ella y calum congeniaron rápidamente pero nunca llegaron a nada serio sino hasta hace dos años." jugaba con mi anillo mientras me relataba la historia. podía distinguir el fastidio en su voz y la amargura al evocar aquel recuerdo. "antes de que ella llegara, solíamos pasar la mayor parte del tiempo juntos. éramos el mejor dúo, inseparables. típico de mejores amigos. luego, calum comenzó a salir con rose, comencé a ser su segunda opción y casi ni hablábamos. es un milagro que viva junto a él ahora."

la forma en la que michael relataba esta retorcida historia hacia crujir mi interior. podía distinguir la amargura, confusión, la tristeza de ser posicionado en un segundo lugar, sobre todo. estaba sencillamente apenado, aturdido, como si una vieja novela resurgiera de las oscuridades de su mente pero con su contenido diferente.

había entendido, luego de minutos y minutos de solo oír, que calum odiaba olvidar a las personas y se le hacía difícil superarlas. tal vez porque me fascina pensar en profundo, encontrar la complejidad del asunto, pero creía que calum le tenía miedo a la soledad.

"diablos, se me hace difícil imaginar a calum de esa forma." respondí. y era cierto, no era el chico que me había demostrado ser. "pero, ¿sabes? estoy segura de que todo esto acabará pronto."

"gracias por tu optimismo, ley." besó mi mejilla. continuamos hablando de cosas al azar, era un privilegio compartir estos pequeños momentos con alguien como michael.

había aprendido a apreciar los pequeños momentos y todo lo que tenía a mi alrededor desde que mis padres me habían hecho presentarme en un juzgado por el caso de mackenzie. siendo sincera, tenía miedo de perderlo todo de un segundo a otro, sólo podía recomfortarme con disfrutarlo.

era de madrugada cuando decidí irme a casa. michael se levantó de su cama, se colocó sus zapatos y me acompañó hasta la puerta. ya en la sala, me dirigí hacia el sofá para despedirme.

"adiós, gracias por to-" me interrumpí a mi misma. no era como si no hubiese visto dos personas besarse en mi vida, pero nunca semidesnudas. "-do."

oí como michael reía sarcásticamente detrás mio y como golpeaba su llave fuertemente contra el vidrio de la mesa. ¿cómo debía reaccionar frente a esto? estaba estática, muda, no podía pensar con claridad. michael tomó mi brazo y me hizo a un lado.

"dios mío, calum." farfulló mientras el par acomodaba su vestimenta y agregaba los faltantes. había decidido desviar mi mirada hacia la puerta. "eres un estúpido. primero, tanto pearl como yo gastamos nuestro aliento tratando de animarte aunque sea un poco por culpa de ella," dijo señalando sin temor a rose. continuó: "segundo, has pasado semanas llorando sin cesar, ¿¡y ahora estás casi teniendo sexo con la persona que rompió tu maldito corazón!?"

apreté con fuerzas mis ojos, no quería decirlo en voz alta, pero michael tenía razón. había acertado en cada una de las palabras.

"¿quién eres tú para hablarle así a calum?" rose había intervenido. "ya es un adulto, puede hacer lo que él quiera."

"rose, ya basta." por primera vez, había oído a calum.

"por si ninguno de los dos sabía, esta es mi maldita casa también." gritó. todo se estaba yendo de las manos, tenía que intervenir. "y además hay una invitada, una jodida invitada que tocó nuestra puerta para pasar un buen rato. en cambio tiene que presenciar a dos estúpidos teniendo relaciones además de ser ignorada toda la noche, de no ser por mi, su cadáver estaría en la mesa."

todo estaba en silencio, lo único que podía oírse era el viento que golpeaba la ventana.

"uh, bien." ideé un plan a último momento. "michael, te ayudaré a empacar un poco de ropa, te quedarás conmigo unos cuantos días, ¿vamos?"

él me sonrió, tomó mi mano y volvimos a la habitación. 

"gracias, ley. realmente no quería quedarme aquí." suspiró. "estoy tan enojado, ¿sabes? todo parece tan irreal, diablos, quiero emborracharme y dormir."

reí suavemente. terminamos de empacar lo básico y nos dirigimos a la sala nuevamente. michael abrió la puerta y salió, me quedé parada allí un instante, cada escena culminaba en mi mente con una rapidez inexplicable.

"p, yo..." calum comenzó. lo interrumpí.

"no, calum. no me interesa."  intenté sonreír. "al final de todo es tu vida, ¿no? y aunque michael haya tenido razón en todo lo que ha dicho, yo ya no tengo nada que ver aquí. eh, ten una linda noche."

volteé y me dirigí hacia la puerta. michael me esperaba a un lado y me sonrió cuando estaba cerrando la puerta. lo último que escuché fueron las disculpas de calum hood.


::::

n/a sigo en hiatus, no se emocionen. pero acuerdensé que les dije que este capítulo estaba por la mitad y que lo iba a subir en cualquier momento. espero que todos ustedes estén bien y que hayan pasado una navidad espectacular con todos sus seres queridos. espero también que esto recompense mi ausencia y los capítulos sin nada de drama (todos necesitamos drama) así que nada, los amo con todo mi corazón y espero volver a verlos pronto porque los extraño un montón. igual seguramente les deje una nota en año nuevo o en cualquier momento del 1/1/17. los amo mas que a nada, comenten que les respondo porque se lo merecen ♡

p.d si encuentran errores ortográficos o lo que sea, avísenme porque el celular de mi querida madre no tiene el predictivo (además de que me da paja activarlo)

p.d2 el sobrenombre de pearl ("ley") se pronuncia como "li" ((el apodo es porque aunque no lo aclare, michael le dice a ella "pearley" cariñosamente, y de ahí el "ley", creo que me entendieron))


elevator ↻ cthDonde viven las historias. Descúbrelo ahora