Capitulo 4

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Me desperté gracias a la Estupida alarma que puso Chloe.

Me quede sentada mientras veía Chloe frotar sus ojos con su manos.

Sus ojos se abrieron y miro la toalla que está encima de su maleta.

Sali rápidamente de mi trance y corrí directo al baño mientras sentía a Chloe correr detrás de mí.

—¡Seras zorra Cassandra kristine!—grito mientras pateaba la puerta solté una gran carcajada mientras encendía la ducha.

Suele llamarme por mi nombre completo cuando esta molesta.

Lave mis dientes, cara , cabello y cuerpo. Tome la toalla que meti anoche.

Punto para Cassie!

Me seque y me enrollé en esta mientras salía con una sonrisa triunfal.

Chloe entró bruscamente chocando su hombro contra el mío.

—joder—dije entre risas—¡baja tus humos pequeña zorra!

—¡Seras puta!—la escuche chillar dentro del baño y eso sólo hizo que estallara en carcajadas.

La amo.

Tome un conjunto de bragas y sujetador y me lo coloque. Después me quede segundos viendo el uniforme.

este estaba compuesto por una falda de cuadros rojos y negros, una camisa blanca de botones manga larga.

Asco.

Procedí a colocarme la camisa la que por cierto me quedaba algo ajustada. Después me puse la falda que llegaba a la mitad de mi muslo.

Meti mi camisa por dentro y al verme en el espejo quede satisfecha con mi trabajo.

Creo que me empieza a gustar el uniforme.

Tome mi cadenita de oro y me la puse. Y ahora venía la parte más difícil de todas.

Que carajos me pongo de zapatos.

Supongo que todas las chicas usarán tacones. Excepto yo.

Por dios ¿quien en su sano juicio usaría tacones en este lugar tan grande?

Me cansaría nada mas al llegar al ascensor.

Cogi unas zapatillas deportivas Adidas que se veían bien.

Amarre mi cabello en una coleta. Sinceramente amo mi cabello en este momento... Esta largo y mama quiere lo corte, pero es mi cabello. Yo decido.

Me maquille ligeramente y tome todas mis cosas y las meti en mi bolso.

Chloe salió del baño con su uniforme puesto. Se veía casi igual a mí solo que ella optó por usar tacones en vez de zapatillas.

—Vamos.

(...)

Para mí mayor sorpresa nos tomó un par de segundos llegar al salón de literatura.

Mi vista se fijó automáticamente en los puestos de atrás.

Teníamos suerte de habernos despertado temprano, normalmente siempre están ocupados los últimos asientos pero hoy era nuestro día de suerte!

Me dirigí hacia uno de los últimos asientos.

—¡No!—grito una castaña asustándome.

—Disculpa?—pregunte lo que pude.

—Perdona mi reacción pero es que ese puesto ya tiene dueño—dijo con cierto nerviosismo en su voz.

La mire confundida.

—Disculpa.. pero este asiento está libre, Además que no dice ser de propiedad de alguien—dije con cierto toque de molestia en mi voz.

—Elige otro—me miró con ojos suplicantes—te estoy evitando problemas el primer dia.

Alcé una ceja más confundida aún por su actitud y me senté en otro sitio.

Mi mirada quedo puesta en el asiento, Nadie, Absolutamente nadie trato de sentarse allí.

¿De quién carajos será ese Asiento?

Salvame.-VsecretshDonde viven las historias. Descúbrelo ahora