Capítulo 11

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Kate se sentía como aquella vez, que luchó por primera vez en una lucha ilegal. Aquella vez la gente también se había reído de ella. Por una milésima de segundo, sintió el miedo a perder, pero tan rápido como había llegado, se había ido.Hacía un año y poco más que no peleaba, y en una hora había visto a dos personas importantes de su vida y volvía a encaminarse hacia un ring. En dos semanas su vida había vuelto a dar un vuelco. Jack llegó, como siempre, rompiendo toda la paz y tranquilidad que había creado. Rompiendo aquella personalidad que había vuelto a sacar de lo más a dentro de su corazón. Jack había vuelto haciéndola recordar todo por lo que pasaron juntos y su vida. Aquella vida llena de emociónes y adrenalina. Llena de locuras y en la que por fin había conseguido sentirse libre. Una vida que su subconsciente había dejado bien guardada en un rincón de su cabeza, a la espera de volver a aparecer. Jack la había encontrado y aquella primera noche juntos de nuevo la había convencido a recordar. La había llevado a las carreras, a la parte fea e ilegal de aquella más que famosa ciudad, en la que había vuelto a ver a Damon. Damon había sido como su segundo padre. A parte de meterla en carreras ilegales, lo cual no era muy responsable de un padre, la quería y la apolló en toda y cada una de sus decisiones, aconsejándola en aquellas en las que no se estaba tan segura. Aquella noche, en contra del peligro que tan solo ella conocía, volvió a correr con su coche y dejando su nombre resonar de boca en boca. Sabía el peligro que corría volviendo pero también sabía que vivir escondida no era vida. La siguiente mañana decidida a volver fue a la universidad como una vez lo había eco. Tenía una mirada segura de si misma, no quedaba ni un poco de vergüenza o miedo. La gente al principio se quedó alucinada pero poco a poco ya no era tema. Pero una semana después Tyler, el supuesto chico malo,  reservado y maduro, se le había acercado y la había invitado a una pelea clandestina con el fin de enseñar lo machote que era. Tyler se había comportado como un niño pequeño y mimado. Pero es que encima en esas peleas se había encontrado con Maddox su amigo casi hermano responsable y protector y con el italiano Leonardo. Aquel hermano que nunca tuvo. Aquella persona que la enseñó a pelear, a saber protegerse de cretinos y que a la vez la protegía a ella. Aquella persona que la enseñó a luchar por lo que quería, que la quería como una hermana y la ayudaba a comerse el mundo.

Y ahora estaba ahí. Tras una semana ,más que de locos, estaba de camino ha un ring de pelea como lo había echo muchas veces antes. La gente la abucheaba y le decía cosas como que mejor escapara y que tenga cuidado para no romperse una uña. Pero ella seguía sonriendo al igual que lo hacía Leonardo. 

Tyler desde el otro lado veía como Kate se habría paso entre la gente hasta el ring. Aún no se lo podía creer. El hombre contra el que iba a pelear Kate contaba como uno con el puño más fuerte de los boxeadores de por aquí. Solía enfadarse rápido y se salía de control. Tyler cruzó la sala hasta llegar al lado de Leonardo. Este sonreía de oreja a oreja orgulloso. Tyler no podía entender como la había dejado pelear. Si valoraba al menos un poco la vida de Kate, o al menos su bonita cara. Miró enfadado a Leonardo el cual por fin se dió cuenta de que Tyler había dejado a aquella pelirroja.

-¿Qué se supone que se cree que esta haciendo Kate allí arriba?¿Es qué quiere morir?¿Está loca de remate?- Tyler no se callaba. Por cada frase que decía Tyler, Leonardo enfurecía más y más.

Al final Leonardo explotó y lo agarró fuertemente del cuello de su chaqueta y camiseta, levantandoló por un breve momento del suelo.

-Nunca, Jamás te atrevas a volver a hablar así de ella. No sabes por lo que ha pasado. No tienes ni idea. Iluso. -Las palabras de Leonardo eran susurros pero tan profundos y llenos de odio que Tyler pudo oírlas por encima de los gritos de los otros presentes. Los ojos de Leonardo brillaban a milímetros de su cara,con furia. Leonardo lo soltó y se giró prestándole completa atención a West, el cual empezó a explicar las reglas de esta pelea.Por lo natural no había reglas, La pelea era terminada si alguno de los dos estaba inconsciente o a veces muerto. Pero como bien estaba diciendo West este iba a ser una pelea especial.

Perseguida del peligro (PARADA)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora