Perseguida del peligro (PARADA)

Capítulo 13

  Nada es lo que parece,

y nadie es quien dice ser

Le pesaban los ojos pero con un gran esfuerzo consigió abrirlos. Tardó unos segundos en acostumbrarse a la luz del cuarto y unos más para recordar lo que había pasado. La habían encontrado. La verdad es que no debería sorprenderse.  Su cambio de vida tenia una razón. Al volver a su antigua vida y apareciendo en público estaba claro, que no aguantaría escondida por mucho tiempo. Pero muy dentro de ella esperaba que su padre hubiese dejado la investigación o que ellos ya no la quisieran encontrar. 

- Por fin despiertas. Has dormido un día entero del tirón.

Kate se asustó y se giró para mirarle a la cara.

- ¿Qué haces tú aquí?

Tyler la miraba serio y preocupado desde la puerta. Leo y él habían conseguido arreglar un poco el colchón de Kate y cuando dejó de llorar, la subieron a su cuarto. Tyler fue a casa de Kate con el propósito de devolverle sus apuntes. Y se encontró con una casa devastada y a una Kate dormida en los brazos de Leo.  A pesar de insistir, Leo no le quiso decir que había pasado, por lo que Tyler dedujo que no había sido un simple robo. Tyler nunca había visto a Leo tan estresado y asustado. Algo gordo estaba pasando y quería saber el que. 

- Vine para traerte unos apuntes que se te cayeron de la mochila en nuestra carrerita.

- Aaa , ¿ te refieres a esa carrera, en a que el pequeño Tyler se quedó plantado en un semáforo en rojo? Si, me acuerdo, pero no tenias porque venir. Me los podrías haber dado en la universidad.

- Lose, pero... Podrías decir gracias y ya esta.

-¿Dónde esta Leo?- preguntó Kate levantándose de la cama. 

- Hablando con Maddox supongo. Llevan así horas.

-¿Maddox esta aquí?

-Si

Kate salió corriendo del cuarto. Si Maddox estaba ahí y Leo lo había llamado, Leo sabía lo que pasaba. bajo las escaleras lentamente mirando a su alrededor. Alguíen había barrido los cristales hacía los lados pero sino todo seguía igual. Cuando llegó a la cocina pudo oir a Leo gritando enfadado.

- Tenemos que llevarla con él. Solo allí está protegída. 

- Leo, si crees que es lo correcto, hazlo. Pero sabes que abrirás viejas heridas. Tanto de Kate, como de tu familia.

-Me da igual. La quiero a salvo y él probablemente también.

- Muy bien. buscaré una solución. ¿Le decimos que esta pasando?

- No, aun no podemos. Se lo tiene que contar él.

Kate entro en la cocina y ambos hombres se giraron hacia ella.

-¿Contarme que? ¿Quien es él? Leo.

- Lo averiguaras demasiado pronto. Lo siento gatita, pero todo es más complicado de lo que crees.

- No me digas. Me da igual lo complicado que sea, quiero saber que coño esta pasando. Los que han echo esto pagarán por ello. Esta era la casa de mi madre. Ellos la han devastado. - Se le podía escuchar el dolor en su voz.

- Kate. Te prometo que no saldrán ilesos de esto, pero necesito que confíes en mi y en Maddox.

Kate miró a Maddox que la miraba nervioso. Su mirada era clara. Le decía que no quería saberlo, no ahora. Confiaba en ellos como en nadie.

-Muy bien. Sacadme de aquí y llevadme con él. Quien quiera que es.

-¿Y yo que pinto en todo esto?- La voz de Tyler sobresaltó a todos.

Estaba apoyado contra la puerta y tenía las manos hechas puños, metidas en los bolsillos. Kate no pudo evitar fijarse en lo guapo que estaba tan imponente. Su cara estaba tensa y parecía ofendido. Kate se giró de nuevo hacia los otros dos hombres y los miro con la ceja levantada.

-Esa si que es una buena pregunta, pero no te extrañes si no te responden. - atacó Kate.

-Hay dos coches suyos aparcados fuera. Te habrán visto venir. Estarán esperando refuerzos pero ya saben que estas involucrado, Tyler. Maddox,- Leo se giró a Maddox. - tenemos que salir de aquí antes de que vengan sus refuerzo. Si nos dividimos en tres, no nos podrán seguir.

- Si pero si nos ven a nosotros....-

- Pues en ese caso, Kate tendrá que ir con Tyler. Que cojan tu Range Rover. Tu coge mi Audi y yo cojo el Jaguar de Kate. Así...

- ¡Mi Jaguar! A no. Ni hablar. Y encima habláis de mí, como si no existiese. Yo no quiero ir con Tayler. No quiero que se meta en esto.

- Muchas gracias Kate, pero se cuidarme yo mismo.

- No me vengas ahora de machote Tyler. No tienes ni idea de lo que pasa.

- Kate, tienes que ir con él.- le regañó Leo.- Supondrán que vienes con nosotros. No os seguirán. Hazlo por mi.

-¿Y yo tengo elección?- preguntó Tyler denuevo ofendido.

-No.- dijeron Leo y Kate, ambos enfadados.

-Muy bien. Pues pongámonos en marcha. Yo conduzco.

- Pero....

-Vaya, que rápido la hemos convencido.- Leo estaba realmente sorprendido. Se esperaba una pelea o algo.         

Todos se pusieron en marcha. Tyler siguió a Kate otra vez para arriba mientras que Leo y Maddox se repartían las llaves. Cuando Tayler llegó a la habitación, Kate estaba en el suelo junto a unas fotos. Las miraba una por una, con una sonrisa radiante. Tyler no pudo evitar figarse en lo guapa y frágil que estaba ahí sentada en el suelo como una niña pequeña. El pelo le caía hacia los lados como cascadas. Sus ojos brillaban y su sonrisa era contagiosa.

Cuando Kate terminó de ver todas las fotos de su madre y ella , las guardó en un sobre y se lo metió en el bolsillo. Se levantó y borró su sonrisa de la cara. Estaba en problemas y eso que ella no había echo nada. Le quedaban pocas prendas que no estuvieran rajadas. Decidió cogerse un jersey y unas deportivas por si tuviesen que salir corriendo. Aunque sabía correr sorprendentemente bien con tacones nunca serán lo mismo que un buen par de zapatos. Por último sacó dos gorras de los Knicks y se puso una. Estaba lista para volver a huir, pero esperaba que fuese la última. Y aun más importante, esta vez tenía ayuda. Kate sabía muy bien que Leo no le estaba contando algo pero confiaba en él. Si tenía que esperar al misterioso hombre para enterarse lo haría.

Cuando Kate se dió la vuelta se encontró a Tyler apoyado de nuevo conta la puerta, con los brazos cruzados y una media sonrisa.

- Toma.- Kate le tiró la gorra al pecho y esté la cogió al vuelo.

- Que está pasando.- No fue una pregunta. Era más bien una orden, que la obligaba a Kate a responder.

- Pronto, muy pronto lo sabremos.- dijó Kate con una mirada ausente mientras se escabullía por la puerta rumbo al principio de su nueva vida.

Algo estaba pasando que ni ella entendía. Pensaba saber lo que pasaba pero pronto, muy pronto se enterará de que nada es lo que parece y nadie es quien dice ser. 

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Gracias a todos mis leyentes y a todos los que votan. 

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