8. Las jornadas deportivas

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Me levanté de la cama de un salto. Hoy era la exhibición de baloncesto en el instituto y me apetecía mucho actuar, ya que era tan conocida.
¿Sabrán todos los del club de baloncesto quién soy? A lo mejor es mucho pedir...

No esperé más y me hice las dos mochilas. Una para el instituto y otra con la ropa para después de ducharme. No sudaremos mucho, pero ayer en el vestuario acordamos que nos ducharíamos, para estar un rato todas juntas hablando.

Al meter los libros en la mochila, me acordé de Gabriel cuando metí el bonito libro de física. Ahora que tengo más confianza, me resultará más fácil preguntarle mis típicas preguntas físicas. A ver si sabe responderme.

Me reí por dentro y bajé a desayunar.

Mientras desayunaba, Will parecía estar estudiando en la mesa del patio. Tenía la calculadora en la mano y el lápiz encima de la oreja. Eso significaba que nadie le podía molestar porque estaba estudiando.

Cuando acabé de almorzar, me despedí de él y me dirigí hacia fuera.

Por mi sorpresa, Jack y Pierce también estaban con Bonnie.

Saludé a todos y fui a picar a casa de Colyn. Es extraño que no haya venido a picarme. Suele venir temprano.

Mientras esperaba a que saliese Colyn, estuve preguntando de qué hablaban mis amigos.

-Hemos estado pensando en ir el domingo al cine de la ciudad. ¿Qué dices, Anne?

-Es una muy buena idea. ¿Qué vemos?

-No lo sé. Lo que haya. Luego en el descanso del instituto lo miramos.

Colyn había salido de casa. Y al darse la vuelta se encontró con todos nosotros. No se esperaba que hubiese tanta gente conmigo, por la cara que puso.

Colyn saludó a todos con un "buenos días" y se guardó las llaves en el bolsillo. Pienso que algún día las perderá.

-¿Esta vez llevas las bambas y todo preparado para la exhibición?

-Pues claro.

Dijo con un tono confiado. Empezamos a andar y seguimos hablando de los lugares de la ciudad donde podríamos ir próximamente. Colyn no participaba mucho en la charla, pero parecía estar escuchando.

De repente, Bonnie dijo:

-¿Por qué no te vienes con nosotros al cine, Colyn?

-¿Yo?

Me quedé igual de sorprendida que él. Nos miramos y enseguida volví a mirar a Bonnie.

-¿Sí, por qué no?

-Bueno, vale...

No se le veía tan animado como siempre. Pero tampoco ponía una cara de decepción. Supongo que sería porque no conoce a mis amigos, aunque Colyn no es nada cortado, no entendía bien su tímido comportamiento.

Al llegar al instituto vimos a Gabriel con su coche. Era un coche moderno y parecía bastante caro. El profesor iba con su cartera cruzada por el pecho. Apretó el mando de las llaves para cerrar su coche y se dirigió hacia la entrada. Al verle de espaldas, vi que llevaba la misma mochilita de cuerda de ayer. No se va a imaginar que he descubierto su deporte.

Dije con una sonrisa traviesa.

-¿Estás escuchando Anne?

-¿El qué?

-¿Enserio tengo que repetirlo todo?

-Si era muy importante sí.

Jack y Pierce siguieron explicándome sobre su exhibición de tenis, que era antes que la mía.

Demasiadas preguntasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora