La Historia de Amanda

Capítulo 11

Sábado

Llegó.

Llegó el día de ir a casa de Tiago.

Nuestras madres se hicieron bastante amigas. Mi madre no para va de hablarme de ellos. Vienen de Galícia, y están aquí para tener mas cerca a familia, por lo visto tiene a su hermana mayor que vive aquí...
Que raro. Y que su hermana tiene un hijo que va si mismo instituto que yo. Vaya. Vaya. Se supone que cuando viene familia de algún alumno todo el mundo se entera. Pero nadie me contó nada.

Me pongo el vestido que compré con Lola, ese blanco y negro.
Al arreglar mi pelo mi madre me alerta qué alguien está dando golpes en la puerta así que tengo que ir.
Al acercarme a la puerta intento ver quién es por ese abujerito que ay para saber quién es. Nada. Se ve completamente oscuro.
Habro la puerta asta que una espalda masculina casi se cae encima mio, asta que el sujeto de vuelve erguido. Se gira y puedo ver claramente que es Tiago? Que raro. Que yo sepa no le dije en que puerta vivía, ay como 5 apartamentos en cada planta. Que raro.

Se ve que el esta impresionado por como voy vestida. Sin embargo no aparta su mirada de mis ojos. Nunca antes un chico me miró directamente a los ojos, el chaval es un poco distinto a los demás.

---Vine a buscarte para la fiesta de mi hermana---entonces su radiante sonrisa de cambia por una cara de tristeza---No querías venir, ho. Vaya he sido un estúpido al venir aquí. Quizás tu tenías otros planes y yo aquí molestándote. Perdón, ha sido una mal---antes de que pudiera acabar su frase le interrumpo.

---Tranquilo, iba dirigida a tu casa, y no, no tenía otros planes, cuando prometo venir, no rompo mis promesas. ---digo con voz de superioridad y con una sonrisa en mi rostro---bueno, vamos o que. ---
Él se aparta de mi camino y me deja pasar primero. Me despido de mi madre y me voy a la fiesta de cumpleaños.

Al llegar a su casa, la puerta está decorada con adornos de navidad y en un papel con letra que claramente se veía que era de una niña pequeña tenía escrito con colores alegres :

"Bienvenido a la fiesta de cumpleaños de Anabel."

Que ricura de niña.

Al entrar en la casa, veo que por todas partes ay mas cartas escritas por la cumpleañera.

Llegamos al salón, lleno de flores, regalos, y niños. Muchos niños. Demasiados niños. Haber seré sincera? Me gustan los críos, pero para que sean tantos, y muchos de ellos mal educados, y que encima de todo sean mi propiedad. A no. Eso si que no. Por suerte eso último no es en este caso.

De pronto una niña con el pelo rizado, con una diadema de princesa y un vestido que me pareció haber visto antes, viene corriendo a mi y me da un abrazo de oso como los de Lola, solo que esa vez el ha brazo va dirigido a mi cintura. Le de vuelvo el abrazo agachándome para estar a la altura de la niña.

---Has venido---que raro. Nunca he conocido a la niña pero por lo visto ella a mi si---Tu mamá me dijo que tu podrías ser mi hermana mayor. Porque hermanos estoy harta---se dibuja una sonrisa radiante en su rostro y luego mira a Tiago. ---a tu no te necesito. Quiero a ella como hermana---y ese momento me da otro abrazo---mira---me tira de mi brazo para llevarme con ella--- este es mi cuarto---vaya por dios. Eso es un cuarto o una residencia de la realeza. Desde muy pequeña he querido esas camas que parecen un castillo. Por dios que suerte tiene la niña.

La niña estuvo todo el rato corriendo de aquí por allá con sus amigas, asta que me vuelve a tirar del brazo, quitándome de mi maravillosa conexión en el instagram. Apago mi móvil, y me digno a seguir a la niña.
¿Me ha llevado a la cocina?
---Quiero que tu me traigas la tarta ---entonces en ese momento me señala la tarta de princesas que estaba en la mesa de la cocina. La madre de Tiago y la cumpleañera me saluda.
---A, hola cielo, no te había visto---¿Cielo? De que me conoce esta señora. A, ya se. Mi madre les habrá hablado de mi. Típico de ella.

Al fin se acabó esa selva de niños. Me quedé después de la fiesta para ayudar a limpiar con ellos.
Al terminar Tiago me coge de la muñeca y me dirige a su cuarto.
Vaya cuarto, esta mas limpio que no se como describirlo. Por cierto no os dije que tengo T.O.C(Trastorno Obsesivo Compulsivo)osea que me da asco casi todo.
Ver ese cuarto me alegró lo que quedaba de día.
Me encantan las cosas limpias.

Se dirige al balcón y con el me sigue tirando. Asta ver ese atardecer que no se como decirlo. Era todo tan.... No lo se, hermoso. Como podía ser que yo no podía ver eso desde mi balcón? A ya. Yo vivo en un cuarto piso y el en séptimo. No me extraña.

Nos quedamos en silencio observando la puesta de sol.
Sus palabras me vuelven a la realidad
---Te gusta? ---como no me iba a gustar eso. ¿Me estás vacilando?.
---Si---digo sin quitar mi mirada de esa puesta de sol tan maravillosa. Otro silencio entre nosotros, asta que esta vez soy yo la que lo devuelve a realidad.
---Que os ha traído a ti y a tu familia aquí? --- sabía perfectamente la respuesta pero quería escucharla salir de su boca.
---Mis padres se están separando y entonces vinimos aquí a casa de mi tía, ---entonces eso baja su cabeza lentamente al momento que apoya sus codos en la barandilla y empieza a jugar con sus dedos---mi madre encontró este piso y vinimos. Llevo en esta ciudad desde que acabe el curso pasado, el lunes es mi primer día de clase.---entonces me vino una pregunta en mi mente pero el continua su historia ---iré al instituto junto con mi primo Nacho---¿Quee?Nacho es su primo. No puede ser que alguien amable como Tiago tenga sangre de ese inepto de Nacho.

Porque destino. Porque!!

---Nacho el de la pandilla de los latinos?? ---pregunto con cara de sorpresa.
---El mismo---por dios tenía que ser el. ---porque, lo conoces?? ---Como para no conocerlo.
---Si,---en ese momento se ve una sonrisa picara en su rostro, que podría deritir a cualquiera ---Va conmigo a clase, y---antes de que pudiera acabar el me interrumpe muy feliz
---tendremos que ir en la misma clase---me pone la mano par chocar esos cinco, hago el movimiento correspondiente. ---No solo seremos vecinos uno que también compañeros ---

Vale, me alegro que él tenga que ir a mi clase pero lo malo de todo esto es que el es familia de Nacho.

De verdad que echo para merecer esto. Es una tortura

Mitad la foto para saber cómo es el atardecer que vieron