Dolore, ¿Guerra Por Tu Amor?

Dolor, orgullo y perdón.

Luego de que Violeta consolará a Gabriela ambas jóvenes salieron a limpiar, después de ello informaron a el comandante por lo ocurrido.
-¿Cual era tu nombre?, Religión, Familia...- pregunta Violeta
-Gabriela, tengo Veinte años y mi vista es artificial, no se si realmente exista un Dios y si lo hay estoy molesta con el por haberme abandonado, mi hermano está en la guerrilla y mis padres estoy segura que están muertos.-
-Bonito nombre, no recuerdo si te dije mi nombre pero soy Violeta y tengo dieciocho años de edad, también llegue a pensar que Dios me había olvidado hasta que descubrí que yo lo abandone a el, actualmente no tengo familia.- Dijo mirando el suelo
-¿Puedo preguntar algo?.- Gabriela la mira a los ojos
-Si.- responde cortante
-¿No te duele saber que has matado?.-
Violeta cambio su sonrisa por un rostro más triste y comenzó a llorar, pasa sus manos a su cara ocultando sus lágrimas con vergüenza.
-Tengo miedo, pero se que si no lo hacía hiban a haber más vidas pérdidas, ¡No soporto la idea de que Dios no me perdone, ni mucho menos la idea de que no existe!.
Quiero tocar el rostro de mi hermano y pedirle perdón, quiero decirle a Dios que todo fue mi culpa...- Gabriela no entendió mucho de lo que dijo, pero supo que era importante. -Yo se que el es real, porque mi madre me contó sobre muchos milagros que el hizo con su vida, ella nunca mentía. Pero yo quiero conocerlo y sentir el amor que mi madre juró sentir, ¡También a ella le quiero pedir perdón!, ¿Nunca has sentido un vacío en ti que sólo llenas con esperanza, con fe?, es lo único que me mantiene con cordura, lo único que logra mantenerme bien, ¡De lo contrario no tendría razón para mantenerme bien!.- Sigue llorando
-Tu madre estaría orgullosa, espero algún día entender tu dolor y tu esperanza, porque en este momento no creo en nada que me ayude, no tengo esperanzas de vida ni mucho menos creo en que la haiga después de la muerte, pero tus palabras me transmiten tranquilidad aún cuando sonaron como todo lo contrario.-
-Espero puedas sentir lo que yo siento ahora Gabriela, porque en verdad mantiene bastante protegida.- sonríe limpiando sus ojos con sus mangas
-Yo también eso espero.- Le corresponde la sonrisa
-¿Hacemos un trató?.-
-¿Qué clase de trato Violeta?.-
-Te parece si...- hace una pausa y piensa un poco.- Yo seré tu motivo para vivir, me cuidarás y yo a ti. Pero si me dejas morir buscaras en mi bolsa un sobre y harás exactamente lo que dice dentro de el como paga por dejarme morir, si yo te dejo morir cumpliré todos tus deseos que no has podido realizar en vida.- Violeta le estira la mano
-Trato hecho linda.- Toma su mano y la aprieta.
-Siento decirte que no hay marcha atrás, desde ahora tu y yo seremos personas unidas.- ambas rien.

En otro lugar con Marifer y Gregorio...
Ambos están platicando sobre la vida de cada uno, llevaban mucho tiempo sin verse.
-Bueno, ahora ¿Qué vas a hacer?, ¿Donde vivirás?, ¿Con quien vas a estar?.- pregunta el
-Siempre he estado sola, no me preocupa estarlo ahora.-Dice ella
-No seas tonta, bien sabes que podrían matarte en cualquier momento sola, deberías ir con tu tía.-
-¿Para qué, para que me trate mal?, No gracias Papá, primero muerta antes que soportar a personas como ella.-
-¡Es una orden!, además tu tía conoce personas del gobierno que les guardará el secreto de que siguen vivas, deja de ser caprichosa pequeña mocosa.- Grita con un tono más firme
-Como sea, espero que me maten en el camino.- desvía la mirada evitando el rostro de su padre
-¡Cállate, nadie te ha preguntado!, No quiero que mueras.- Grita el
-Como sea, mañana nos vamos y no creas que estaré felíz por ello.- Dice la niña molesta y va a su habitación

Al día siguiente el padre llevo a la niña a la casa de su tía y se despedirá de ella.

-Marifer, ahora pasará un tiempo para que pueda volver a verte, quiero despedirme de ti y ah... Perdóname por gritarte hace rato, quiero despedirme adecuadamente de ti.- Agacha la mirada un poco
-Adiós, que te vaya bien.- Dice aun molesta
-¿No vas a...?, Adiós te amo nena.- sale de la casa un poco decepcionado.
Cuando el está afuera se siente un poco mal  Marifer pero el orgullo de  la niña no le permite despedirse de su padre.
-Hola tía, ¿Puedes decirme cuál es mi habitación?.- dice ella y su tía rie a carcajadas.
-No tenemos otra habitación, dormirás en la sala y despertara temprano porque no permitiré que estés ocupando la sala tan tarde.
Si eres tan amable deja tus cositas en debajo de las escaleras.- contesta su tía (era bastante estricta con ella).

Ahora veamos que es lo que hacen Raúl y su familia.

Raúl está en su trabajo como de costumbre, tocan la puerta y el abre.
Era el asistente del presidente (el le informaba de todo lo que su mayor le ordenaba).
-Hola señor, ¿Qué se le ofrece ahora?.-Dice Raúl.
-¿No le gustaría que su familia esté en un lugar alejado de todo esto?, Existe una zona reservada para gente Influyente, la única condición es que si usted dejase de servir a nosotros su familia será echada del lugar.-
-¿Estarán completamente seguros en ese lugar?.-
-Completamente.- Afirma
-Entonces perfecto, lleven a mi familia ahora mismo, no quiero ponerlos más en peligro.-

Luego de eso llamaron a la familia a el laboratorio y les explicaron todo.

-Me parece bien pero, prometeme una cosa Raúl.- Dice la esposa
- Haría lo que sea para que estén lejos del peligro así que, ¿Qué es lo que deseas?.-
-Promete que siempre me seras fiel aún estando demasiado lejos de ti.- dice ella.
-Te lo prometo.- luego de eso le besa y a ella le salen varias lágrimas, abraza a sus hijos y a su esposa. -Los amo cuídense mucho por favor.- no soporta las lágrimas y también llora un poco.
Después de eso salieron con el jefe de Raúl y entraron a un autobús, (la zona era alejada de la población así que no había tanto problema), Ahora estará sólo y alejado de la única forma en la que había probado el amor.
Fin del capitulo.