18 de octubre de 2003, Baltimore, Maryland.
Era sábado y lo único que quería hacer era dormir, pero me desperté con el ruido del ringtone de mi celular. El mensaje era de Alex: "Kim, hoy a las 16:00 hacemos una práctica en mi casa. Vivo en Webster Ave 623. Realmente me gustaría que vinieras ".
Le había dado mi número la semana pasada, cuando me había ofrecido ir a otro de los ensayos de la banda, que después se suspendió. Al leer el mensaje inevitablemente se dibujó una sonrisa boba en mi cara. Quiere que vaya a la práctica de su banda. Creo que voy a llorar, es tan perfecto que duele.
Todavía medio dormida redacté una respuesta: "Claro, pero no se como llegar". La respuesta llegó casi inmediatamente: "Te paso a buscar por tu casa? Le contesté lo más rápido que pude: "Si no te molesta..." Alex me contestó al instante: "No, no me molesta. Nos vemos a las 15:40 "
Miré la hora. Las 15:21.
Dormí demasiado, ya es tarde para comer algo. Me cambié, me peiné y me maquillé. Desde cuando hago esto por un chico?
-Buen día, perdón por no despertarme antes. -dije mientras me sentaba en el sofá- En un rato voy a salir a... -no se me ocurría ninguna excusa- a... a ayudar a un amigo con la tarea de la escuela...
-Qué amigo? -interrogó mi mamá.
-Uno de la escuela... se llama Evan...
-Y por eso te maquillaste así?
-No, es que... quería ver como me quedaba...
-A que hora vas a volver?
-No sé, pero no creo que vaya a volver tarde...
-Evan? Que amigo es ese? Lo conozco? -se metió mi hermano.
Mierda.
-Emm... es nuevo como yo... probablemente no lo hayas ni notado... es muy callado. -mentí lo mejor que pude.
-Ah, podrías presentarmelo, no? Yo te presenté a los míos... -Sí, supongo...
Sonó el timbre. Supuse que era Alex, así que me despedí. Abrí la puerta y ahí estaba Alex. Llevaba una remera de Green Day, unos jeans y unas Vans.
-Kim, la práctica se suspendió de nuevo, Zack está enfermo. Perdón. -se disculpó.
Mierda. -Ah, que pena, supongo que será en otra ocasión... -Podemos ir a tomar un helado si queres...
-Claro, me encantaría -no pude evitar sonreír y sonar totalmente emocionada.
Caminamos hasta una zona comercial y entramos a una heladería. Alex pidió helado de chocolate y menta.
-De que sabor vas a pedir, Kim? -Vainilla y almendrado.
Alex pagó los helados y nos sentamos en un banco a comerlos. Decidí iniciar la conversación.
-Así que... te gusta Green Day, no?
-Sí, demasiado.
-A mí también. El año que viene sacan disco nuevo. Espero que salgan de tour con Blink-182 de nuevo...
-Sería genial... podríamos ir a verlos juntos, no?
-Sí, seguro. -sonreí de oreja a oreja.
Hablamos un rato largo hasta que empezó a oscurecer. Puto sol.
-Alex... me tengo que ir. Es mucho pedir que me acompañes hasta mi casa? Todavía no sé volver...
-No, no hay problema. -sonrió.
Caminamos hasta mi casa y me despedí de él con un beso en la mejilla. Después se dio media vuelta y se fue.
Es perfecto.