Hasta el fin del mundo

CAPÍTULO 4

CAPITULO 4

Voltee lentamente y vi, a un chico alto, de rizos con unos cuantos de ellos cayendo sobre su rostro, vestía una camisa blanca con un chaleco negro encima, pantalones medios grises...tiene piernas, oh, no puede ser, es un humano, me vieron. No le respondí nada y seguí mirándolo por unos momentos.

-hola, soy Michael –no dije nada- debes tener frio...

Se sacó el chaleco, y lo dejo sobre una rama, luego su camisa perfectamente blanca, se acercó y me la puso encima quedando él con un polo negro.

-¿no hablas?-lo mire un momento y decidí responderle
-que quieres que te diga...-sonrió
-mmmm...yo te dije mi nombre, ahora tu dime el tuyo
-para que querrías saberlo, no es importante
-claro que sí!...bueno, es decir... para mí lo es, porque acabo de conocerte
-¿quién eres? –Lo mire fijamente
-soy Michael –dijo sonriendo ampliamente mientras yo lo miraba esperando otra respuesta- bueno...soy Michael Jackson
-no me importa saber tu nombre....solo quiero saber quién eres-me miro un poco sorprendido.
-amm...yo soy una persona –me miró fijamente – vine con mi familia, en su barco...

"en su barco"...de seguro es el maldito barco que destruyo el castillo de mi padre y que acabo con él, fue entonces que nació algo dentro de mí, odio, rencor...sentimientos de maldad hacia los humanos. Y yo estoy aquí sentada frente a uno, frente a una horrible criatura llamada humano. Sonreí

-así que...viniste en tu barco?-le pregunte
-sí, bueno....no es mío, es de mi familia
-y que hacen por aquí?
-nada, solo salimos a distraernos, ya sabes.... -Me miro-eres muy hermosa...- se sentó a mi lado, yo solo lo mire – eres de aquí?
-no
-y que haces aquí?
-cosas...-le dije y sonrió

Lo mire detenidamente, viendo sus facciones y admirando sus perfectos risos hasta llegar a sus ojos, tenía una penetrante mirada, con esos ojos marrones, que tenían un brillo, supongo que por el reflejo del mar. Nos vimos un largo rato a los ojos. Fue bajando su mirada y vi como sus ojos se abrieron como platos, fijando su mirada en mi aleta, me descubrió, no dije nada, me quede pasmada

-eres....-dijo mirándome sorprendido

Iba a responderle, pero el fuerte sonido que salía de un barco, que se posiciono frente a nosotros me interrumpió, será que ellos también me vieron y vienen por mí?....que haría yo sola?...papá ya no está, él era el que me salvaba en momentos difíciles, o al menos hacia algo, pero ya no esta

-¿es tu barco?- lo mire
-no...no los conozco – dijo mirando el barco

De un momento a otro, empezaron a disparar, saliendo balas en nuestra dirección, agarre a Michael de la mano, me metí bajo el agua, jalándolo haciendo que él también entrara, no lo solté en ningún momento y seguí nadando. Faltaba mucho para llagar al otro extremo de la isla para ponerlo a salvo.
Después de mucho nadar, llegue y lo saque a la superficie, se había desmayado. Como pude lo lleve hasta la orilla. Me escondí tras unas ramas, había pasado una hora y no despertaba, seguí esperando. Paso un rato más, hasta que despertó, se sentó en la arena mirando a todos lados.

-¿sirena?... ¡sirena!- al parecer estaba buscándome.

Era mejor así, él es un humano, una criatura a la cual odio ahora...pero si lo odio ¿Por qué lo salve?, se supone que no debería de hacer eso, tendría que ser al revés, yo tendría que vengar la muerte de mi padre, pero sin embargo lo salve. Lo vi pararse y empezó a caminar, me aleje de ahí con destino al castillo pensando en lo que pasó y lo que no volverá a pasar...simplemente siento...odio, rencor, y desde ahora lo primero que pensare al ver a un humano será "venganza".