Prudence Hellen.

Celebramos el Ostara.

Hemos estado una semana donde Clemence, hace unos días celebramos el Ostara.

Esta semana el pub ha estado más lleno que de costumbre, Clemence piensa en contratar otra muchacha para lo que queda del mes así que me ofrecí para quedarme, mi abuela dijo que ella también se quedaría, noto preocupación en su rostro, temo que sienta que estamos amenazadas en el pueblo; Clemence se alegró pero también se le nota distante.

En la mañana dejé de escribir porque teníamos que alistar las cosas, hace poco se fueron todos a la cama, aunque la abuela y la tía se quedaron hablando en el altillo.

Van a ser las dos de la mañana y no puedo dormir; hay algo extraño en el aire, rastros de miedos ajenos y anteriores en la casa, me persiguen.

Quizá es mejor que deje las alucinaciones e intente dormir, mañana es sábado y el pub se va a llenar como hace años se llenaba, cuando ese pueblo tenía vida; este año hay demasiados extranjeros en el pueblo, quizá es eso lo que asusta a Clemence y a Sarah.