Capítulo 2.

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Evan POV

Diez años atrás...

Tuve una niñez bastante buena, la pasaba muy bien con mis hermanas y con mis padres, no éramos una familia llena de dinero, pero si éramos una familia feliz. Fue un poco difícil por un tiempo porque mi padre empezó a tomar cuando lo despidieron de su antiguo trabajo. Él empezó a tomar demasiado, luego de que varias personas le dijeran que debía dejarlo y seguir adelante, recibió ayuda. Ahora mi padre es contador en una muy buena empresa, que tiene muchas sedes en todo el mundo. Cada vez que podíamos, hacíamos viajes a varios lugares, entre ellos estaba Colombia. Nos encantaba ir a Colombia porque ahí estaba toda nuestra familia, nuestros primos, nuestros tíos y nuestros adorados abuelos.

Cada vez que íbamos a Colombia yo aprendía algo nuevo de mi abuelo, él a pesar de la vida que tuvo, nunca se rindió, siempre siguió luchando para poder salir adelante y demostrarles a todas las personas que cuando se tiene voluntad se puede. Mi abuelo es mi ejemplo a seguir. Él siempre fue muy estudioso, por eso siempre que me mira me dice: "Hijo, espero que estés estudiando mucho, porque la cabeza se usa." Todos siempre reían cuando él me decía eso, incluso yo también reía, pero él siempre se quedaba serio.

Luego de varios años, seguimos nuestra vida, a mi papá lo subieron de puesto por su buen desempeño, estuvo cinco meses en ese puesto hasta que lo transfirieron a la sede de Guatemala para que fuera a supervisarla por algún tiempo, nosotros teníamos que ir con él.

Estuve viviendo un tiempo en Guatemala por el trabajo de mi padre. Mi papá se la pasa constantemente trabajando, nosotros estudiamos este tiempo en una escuela bastante buena. Durante este tiempo me han pasado muchas cosas. Conocí a muchas personas, he hecho muchas cosas, entre ellas están las drogas, tomar, fumar y la última que hice fue destrozar una casa con un grupo de chicos populares del colegio.

Destrozamos, literalmente toda la casa, hasta que llegaron los policías y tuvimos que escapar.

Allí conocí a una chica, la cual me pareció muy linda. Aunque no me acuerdo mucho de su cara porque estaba bajo los efectos de la droga que nos habían dado para que a la hora de la hora nadie se acobardara.

Luego de haber salido a toda velocidad de esa casa, cada quien se fue por su lado. No sin antes prometer y recordar que nadie debía saber sobre lo que habíamos hecho. El día de hoy tocaba una fiesta de esas alocadas que hace Dylan, así que me estaba alistando para salir. La fiesta empezaba a las once de la noche, unos amigos pasarían por mí.

Llegamos a la casa donde sería la fiesta. Había muy buen ambiente como siempre, entramos y ahí estaba Dylan junto con Christian y otra chica. Muy linda, por cierto.

"¡Hey Evan! ¿Cómo va todo?" preguntó el chico.

"Hola Dylan, Todo bien, listo para empezar con la fiesta" contesté.

"Me parece genial ¿Ya saben dónde está todo?" asentimos "Genial. ¡Oigan! ¿Ya conocían a Alexa? Alexa, él es Daniel, este de acá es Fernando y este último se llama Evan" dijo señalándome.

"Mucho gusto chicos, encantada" contesta sonriendo. Que hermosa sonrisa.

"Tengo que ir a revisar la casa, para asegurarme de que nada este roto" comentó levantando su vaso y siguiendo su camino, detrás de él iba Christian y Alexa, pero antes de que se alejaran más tome a la chica del brazo.

"¿Te gustaría tomar algo?" pregunté.

"Claro ¿por qué no?" contestó.

La tomé del brazo y la guie entre el montón de personas para poder llegar al bar, donde estaban las bebidas.

Avenida Escape.Where stories live. Discover now